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francia

Mié 17 Abr 2019

Y el velo del templo se rasgó por medio (Lucas 23,45)

Por: Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez - No dejan de ser impresionantes las imágenes del incendio que destruyó buena parte de la Catedral de Notre Dame en París. San Lucas describió el momento de la muerte de Jesús así: “El velo del templo se rasgó por medio… Y toda la gente que había acudido a aquel espectáculo, al ver lo que pasaba, se volvió dándose golpes de pecho. Todos sus conocidos y las mujeres que le habían seguido desde Galilea se mantenían a distancia, viendo estas cosas” (Luc. 23, 45. 48- 49). Seguramente estos fueron los mismos sentimientos de dolor del pueblo católico de París, y en general de los católicos del mundo, al ver en vivo y en directo el incendio de la Catedral de París. La sede catedralicia, sede del Pastor Metropolitano, se estaba destruyendo. Desde otra óptica cultural, patrimonial, histórica y artística, esta catástrofe generó también sentimientos de pesar. 856 años de historia amenazaban ruina. Pero hubo signos especiales para destacar. El empeño de los bomberos y voluntarios para evitar la destrucción total, la solidaridad del mundo entero con Francia, también de los líderes musulmanes y de otras confesiones religiosas y líderes políticos. De destacar la unidad de los católicos, que unidos en oración, de rodillas algunos, invocaban la misericordia de Dios, para que, de este fuego destructor, surgiera el fuego de la vida. Así lo interpretó el Arzobispo de París en su mensaje a los católicos de París, invitándolos a la Misa Crismal, que debió convocarla para la Iglesia de San Sulpicio, y en el que dice entender mejor a San Francisco de Asís, cuando escuchó el llamado del Señor para reconstruir la Iglesia, “toda entera”. Desde la fe otro signo que vale la pena destacar: ni la cruz dorada del altar mayor, ni la imagen de la Pietà (María que tiene en sus brazos a Jesús bajado de la cruz), fueron destruidos por el fuego. A sus pies quedaron las ruinas del incendio. María, la madre de Jesús, llora su muerte; María la esposa de la Iglesia llora también por nosotros que somos sus hijos, necesitados de una ayuda Divina para restablecernos, para reconstruirnos, para nacer de nuevo, incluso de las cenizas. “Ni las fuerzas del infierno prevalecerán contra ella” dijo Jesús a Pedro, en relación con la Iglesia. Es cierto. El fuego del pecado que nos quiere dominar, y que se expresó con vehemencia en este signo de París, amenaza la Iglesia, y no solo la Iglesia institución, sino también la Iglesia cuerpo místico de Cristo que somos todos, que requerimos no del fuego que destruye y quema, sino del fuego de la vida, la llama amorosa del Espíritu santo, que nos hace criaturas nuevas. Los signos de los tiempos son claves para descubrir el paso del Señor por nuestra historia. Muchas serán las lecturas de este “espectáculo”. Prefiero invitarlos para leerlo desde la fe y la invitación del Señor a renovar, por un lado, la fe, y por otro la confianza en el Señor y en su Santísima Madre, que lloran ante las cenizas que produce el pecado, pero pueden hacer de la ellas algo nuevo. Nacerá una Iglesia nueva. Todo es posible para aquel que tiene fe. +Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo Auxiliar de Cali

Mié 17 Abr 2019

Invito a leer desde la fe lo acontecido en la catedral de Notre Dame: Mons. Rodríguez

Luego que la catedral de Notre Dame de París, símbolo de la cultura europea, sufriera este lunes un incendio que derribó la aguja y destruyó dos tercios de las bóvedas y tejados, el obispo auxiliar de Cali, monseñor Luis Fernando Rodríguez Velásquez, dijo que serán muchas las lecturas que se realicen al respecto, pero invitó a mirar este acontecimiento como un hecho de fe. “Los signos de los tiempos son claves para descubrir el paso del Señor por nuestra historia. Muchas serán las lecturas de este “espectáculo”. Prefiero invitarlos para leerlo desde la fe y la invitación del Señor a renovar, por un lado, la fe, y por otro la confianza en el Señor y en su Santísima Madre, que lloran ante las cenizas que produce el pecado, pero pueden hacer de la ellas algo nuevo. Nacerá una Iglesia nueva. Todo es posible para aquel que tiene fe”, señaló. En un editorial dedicado a este tema, el prelado afirmó que, desde la óptica cultural, patrimonial, histórica y artística, esta catástrofe generó también sentimientos de pesar, pues eran 856 años de historia que amenazaban ruina. Destacó la solidaridad no sólo del pueblo francés sino del mundo entero. “De destacar la unidad de los católicos, que unidos en oración, de rodillas algunos, invocaban la misericordia de Dios, para que, de este fuego destructor, surgiera el fuego de la vida”, describió en Jerarca. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Mar 17 Nov 2015

Iglesia colombiana solidaria con víctimas del atentado en Paris

El presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Luis Augusto Castro Quiroga, expresó su solidaridad con Francia tras la serie de ataques que sacudieron el centro de París y que dejaron cientos de muertos. “A todo el pueblo Francés le manifestamos nuestra solidaridad, así como lo manifestó el Presidente de la República, también la Iglesia y el Papa en donde dio a conocer la cercanía de la Iglesia con el pueblo de París, nosotros como Iglesia colombiana deseando que se pueda a través del entendimiento y el diálogo llegar a acabar con toda esta violencia y es muy lamentable”, dijo el prelado. Así mismo monseñor Castro Quiroga señaló: “nos unimos y oramos por todos los que fueron asesinados, a sus familias para que mi Dios les de fortaleza, y esperamos que logren recuperar esa paz que Francia y el mundo entero necesitan”.