
Arquidiócesis de Bogotá invita a celebrar la XXVII Jornada Mundial de la Vida Consagrada
Mar 24 Ene 2023
El sábado 04 de febrero, la arquidiócesis de Bogotá animará en esta fecha la celebración de la XXVII Jornada Mundial de la Vida Consagrada, instituida por el Papa San Juan Pablo II en 1997. El evento se realizará en un ambiente festivo y de oración en el Auditorio del Colegio de Nuestra Señora del Pilar – Chapinero, acogidos por las Hermanas de la Caridad de Santa Ana, en compañía del señor arzobispo de Bogotá, monseñor Luis José Rueda Aparicio y el equipo de servicio para la Vida Consagrada de la Arquidiócesis de Bogotá. Sus organizadores han expresado que “Nos unimos en acción de gracias a Dios por el Don de la Vida Consagrada en la Iglesia, valoramos y reconocemos su importancia en la misión evangelizadora”. Sus organizadores han observado que la Iglesia cuenta con una riqueza incalculable en la vocación a la vida consagrada. Quienes responden con generosidad a este llamado “son hombres y mujeres sencillos que han visto el tesoro que vale más que todas las riquezas del mundo, Jesucristo” y con esta visión dejan todo de lado para acogerlo a Él en sus brazos y recorrer hasta los confines anunciando la Buena Nueva de Salvación. Anualmente, en la Fiesta de la Presentación de Jesús, esta Iglesia arquidiocesana dedica un día para reconocer y agradecer a cada hombre y mujer que ha optado por consagrar su vida en favor de la construcción del Reino, valorando el arduo trabajo que tantas comunidades religiosas, institutos de vida consagrada y sociedades de vida apostólica realizan en la Iglesia universal y particularmente en el territorio de la Arquidiócesis de Bogotá. Para participar de este encuentro, es suficiente con que el religioso o religiosa interesados se registre en el siguiente formulario AQUÍ Información adicional Oficina de la Vicaría de Evangelización al teléfono: 601 3505511 ext. 1101 o al correo electrónico: [email protected] INVITACIÓN Monseñor Daniel Arturo Delgado Guana, vicario episcopal para la Comunión y Participación, se refiere a la celebración arquidiocesana; presencia, desafíos y acompañamiento a este don de Dios Padre a la Iglesia.

Banco de Alimentos de Cali entregó 10 toneladas de ayuda humanitaria a damnificados de Rosas, Cauca
Jue 19 Ene 2023
La Fundación Arquidiocesana del Banco de Alimentos de Cali, salió al encuentro de los damnificados del municipio de Rosas, quienes desde el pasado 09 de enero, se vieron afectados por los derrumbes. Ante esta tragedia donde familias enteras lo perdieron todo, la Fundación emprendió una campaña de solidaridad y los vallecaucanos llegaron con sus ayudas. Gracias a ello, el pasado miércoles 18 de enero, partió un camión del Banco de Alimentos, con 300 mercados y 300 insumos de aseo. Según lo reportó el padre Joaquín Alberto Gómez, director del Banco de Alimentos de Cali, quien estuvo presente en la parroquia Nuestra Señora de los Dolores en Rosas, donde se distribuirán las ayudas “el panorama es desolador y preocupante, pues son más de 1500 familias las afectadas en este municipio”. El sacerdote dijo que es el momento de la solidaridad, por lo que recordó que la campaña continúa con el objetivo de realizar una nueva entrega en aproximadamente un mes. Como un gesto de hermandad el directivo dijo que se requieren ayudas como: ropa, cobijas, alimentos no perecederos, colchonetas, agua, productos de aseo o dinero y alimentos para animales. Mayor información: Cel: 3116902868 PBX: (602) 8812066 – Correo electrónico: [email protected] Donaciones: Fundación Arquidiocesana Banco de Alimentos - Nit. 805025018 Bancolombia - Cuenta Ahorros No. 06200001625 www.bancodealimentoscali.org

El Papa Francisco nombra arzobispo para Santa Fe de Antioquia
Mié 25 Ene 2023
Este miércoles 25 de enero, el Papa Francisco ha nombrado a monseñor Hugo Alberto Torres Marín, hasta el momento obispo de la Diócesis de Apartadó, como nuevo arzobispo de Santa Fe de Antioquia, convirtiéndose en el décimo sexto prelado en ocupar este cargo. Desde el pasado 05 de mayo de 2022, la Nunciatura Apostólica había designado como administrador apostólico “sede vacante” de Santa Fe de Antioquia a Mons. Elkin Fernando Álvarez Botero, actual obispo de la Diócesis de Santa Rosa de Osos. BIOGRAFÍA Mons. HUGO ALBERTO TORRES MARIN nació en Briceño el 9 de agosto de 1960, en el hogar formado por Francisco José Torres y Judith Marín Zuluaga. Fue ordenado presbítero para la Diócesis de Santa Rosa de Osos el 24 de noviembre de 1987. En el Seminario menor y Mayor de Santa Rosa de Osos realizó sus estudios de bachillerato, Filosofía y Teología. En la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma obtuvo la licenciatura en Teología dogmática y en la Universidad Católica de Oriente en convenio con la Fundación Universitaria Católica del Norte obtuvo Licenciatura en Filosofía y Ciencias Religiosas. Se especializó luego en Alta gerencia y Pedagogía de la virtualidad. En su Diócesis desempeñó el oficio de: vicario cooperador, párroco, vicario de pastoral, formador del Seminario menor y mayor, integrante del equipo administrativo de la FUCN y rector del Seminario Mayor Santo Tomás de Aquino de Santa Rosa de Osos. Fue nombrado obispo auxiliar de Medellín por su santidad Benedicto XVI el 4 mayo del 2011 y consagrado por monseñor Ricardo Tobón Restrepo, el 4 de junio del mismo año. El 16 de octubre de 2014 recibe el encargo de administrador apostólico de la Diócesis de Apartadó y un año después toma posesión en su calidad de obispo titular. El 25 de enero del 2023 el Papa Francisco lo nombró Arzobispo Metropolitano de Santa Fe de Antioquia. La posesión canónica ha sido fijada para el día 23 de marzo del año en curso.

Mons. Henao: “Reunión extraordinaria entre Estado y ELN revitaliza mesa de diálogo”
Lun 23 Ene 2023
Luego de participar en su condición de acompañante permanente en la Mesa de Diálogos, entre el gobierno de Colombia y el ELN, en reunión que se dio del 17 al 21 de enero en Caracas, Venezuela, monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, valoró como positivo este espacio de diálogo y resaltó que “la mesa sale mucho más vital y con mucha más capacidad de abordar los temas hacia el futuro”. “Valoramos el hecho que se hubiera realizado la reunión extraordinaria en un ambiente de diálogo sincero, propositivo y en un clima de búsqueda de entendimiento”. Resaltó el compromiso de las partes, para encontrar salidas a las situaciones que se han ido presentando, esto dijo el directivo, servirá para “reforzar y dar una nueva vitalidad a la mesa de diálogo”. “Salimos con un ambiente de esperanza, de confianza en que se puede avanzar en la búsqueda de terminar con el sufrimiento que hay en muchas comunidades por las confrontaciones y crear un clima de paz que asegure también la reconciliación en el país”, aseguró. Calificó como positivo el que las partes ya tengan una propuesta de temas a discutir y hayan fijado el segundo ciclo de conversaciones para el próximo 13 de febrero en México, donde tienen previsto empezar a “tratar y acordar” un cese de fuego bilateral. Finalmente, agradeció a México y Venezuela por facilitar los servicios como sedes negociadoras, y resaltó el clima de confianza que algunos sectores y las comunidades mayormente afectadas por el conflicto, han expresado para que se avance en la búsqueda del fortalecimiento de la paz en el país. Cabe recordar que, la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), en el mes de diciembre de 2022, aceptó la invitación a participar en "su condición de acompañante permanente" en la Mesa de Diálogo entre el Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional, nombrando como su representante a monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria. Garantes destacan voluntad de paz de Gobierno y ELN de Colombia En un comunicado a la opinión pública, los países garantes y las instituciones acompañantes permanentes de las negociaciones de paz entre el gobierno de Colombia y el ELN destacaron el compromiso de las partes para avanzar en los diálogos. DESCARGAR COMUNICADO DE PRENSA
Otros temas para iluminar
Dom 22 Ene 2023

Por: Diario El Catolicismo - El panorama para la población colombiana en el presente año no parece muy tranquilo. Ya hemos comentado el que se refiere a la paz. Pero en el horizonte también vienen asuntos de la mayor repercusión social.
Por una parte, el Gobierno Nacional está por presentar una reforma al sistema de salud y también al sistema del ahorro pensional. Por otra, cada vez es más notable la importancia negativa que empieza a tener la inflación, cuyos niveles no veía el país hace muchos años y que ha tocado casi todo, pero especialmente el rubro de los alimentos, generando o ahondando más la situación de precariedad de muchas familias colombianas.
Y no es menor el problema de desempleo, que no logra disminuir en forma importante, mientras la informalidad ocupa a millones de ciudadanos, con todas las limitaciones y carencias que este modo de trabajo conlleva. Ningún asunto es de poca monta.
Como los temas son tan complejos y prácticamente de especialistas, es importante que desde donde se pueda hacerlo, incluyendo a la misma Iglesia, se den luces a los ciudadanos. Hoy en día la gran tentación, tanto del Gobierno como de algunos sectores de la población, es tomar decisiones sin suficiente fundamento y, a la larga, empeorarlo todo. El muy conocido populismo que arroja a la miseria a tanta gente.
Sin embargo, no hay que desconocer que sí se requieren cambios profundos en muchos sectores para que el bienestar llegue cada vez a más personas en todo el país. Pero a estos cambios hay que ponerles manejo impecable, cero corrupción y muy alta gerencia para que los sienta la gran mayoría de la población. De lo contrario, todo seguirá igual o tal vez peor.
Quizás el primer criterio en las grandes reformas debe ser el de lograr realizar el mayor bien común posible con todo lo que se propone, decide y ejecuta, por supuesto partiendo de la base que lo que está funcionando bien no hay que destruirlo, sino fortalecerlo.
La democracia es el sistema de las mayorías y se trata de beneficiarlas en la medida de las posibilidades reales. Un segundo criterio debería ser la conciencia clara de que el progreso y el bienestar de todos es un proceso largo y nunca automático, pero que se puede acelerar en muchos aspectos. En tercer lugar, debe brillar el uso inmaculado de los recursos que, en un país como Colombia, son limitados: no alcanza para todo y no todo se puede hacer al mismo tiempo. A veces, se sabe, por tratar de hacer mucho, se hace poco. A esto se debe añadir que Colombia ya tiene una deuda externa muy abultada y seguir creciéndola no es otra cosa que dirigir el país a una crisis que llegará tarde o temprano, porque las deudas hay que pagarlas. Y, el cuarto criterio tiene que ver con generar más riqueza y no solo pensar en gastar … porque el dinero se acaba.
A la ciudadanía hay que darle instrumentos para que apoye o no lo que se le propone. Los impuestos salen de su bolsillo, el ahorro pensional también, los pagos por salud por supuesto. Tiene la ciudadanía todo el derecho a estar bien informada en todo lo que se quiera hacer en estos y otros aspectos que tocan directamente su vida. Y los mismos ciudadanos deben vigilar cada proyecto, cada debate, cada decisión que tenga que ver con su vida cotidiana.
El Estado y todas sus instituciones, lo mismo que las instituciones privadas que manejan aspectos como la salud o la pensión de las personas, todos tienen que recordar una y otra vez que su razón de ser y su primer deber moral es responderle a la gente para que pueda vivir dignamente.
Desde la Iglesia, en concreto desde su doctrina social, se puede contribuir con conceptos e ideas significativas para que una ciudadanía en tantos aspectos confundida, y también los dirigentes, se orienten bien, y pensando siempre en el bien común, construyan, entre todos, una sociedad más justa, equilibrada y donde todos puedan vivir bien y progresar siempre.
Fuente: Oficina Arquidiocesana de Comunicaciones de Bogotá
“Yo no me preparo para un fin, sino para un encuentro”: Benedicto XVI
Mié 18 Ene 2023

Por: Monseñor José Libardo Garcés Monsalve - El Ministerio Petrino en la Iglesia Católica se fundamenta en el texto bíblico del Evangelio de san Mateo que enseña: “Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia” (Mt 16, 18). Con esta certeza que proporciona la Palabra de Dios, comprendemos que la misión que desempeña cada uno de los Pontífices de la Iglesia Católica, es una elección de Dios que responde a su voluntad y al plan de salvación para la humanidad.
Como fieles bautizados, creyentes en Cristo, estuvimos unidos en oración desde el pasado 28 de diciembre, cuando conocimos la noticia que Su Santidad, el Papa emérito Benedicto XVI, experimentaba complicaciones en su salud. Después de su partida a la Casa del Padre, el sábado 31 de diciembre de 2022, queremos presentarles a los bautizados de la Diócesis de Cúcuta esta edición especial del Periódico La Verdad, como un homenaje de esta Iglesia Particular, a quien fue el sucesor de Pedro y Vicario de Cristo desde el año 2005 a 2013.
Joseph Ratzinger sufrió los horrores y las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial, experiencia dolorosa, que le dio la fuerza interior y la luz necesaria para rechazar, desde su magisterio, el nazismo y todas las políticas que atentan contra la libertad y los derechos humanos. Decía en Auschwitz: “Hablar en este lugar de horror, cúmulo de crímenes contra Dios y contra los seres humanos sin igual en la historia resulta casi imposible. Es especialmente difícil y opresivo para un Papa que viene de Alemania”, lo que le permitió en su humildad como persona, ver de cerca la miseria humana causada por el pecado y el horror de la guerra, para enfrentarlos con decisión y claridad.
Recordamos al Papa emérito Benedicto XVI, como un hombre de fe profunda, amor al estudio, dedicado a la academia y de gran producción intelectual, que aportó fe y doctrina en diversas etapas de su vida, dejándonos un legado del que todos nos beneficiamos, porque con su doctrina profundizamos más en la fe en Nuestro Señor Jesucristo. Su experiencia cristiana, recibida desde el hogar y vivida con gran fervor, le llevó a entender la fe como un encuentro personal con Jesucristo que debe ser anunciado: “No se puede encontrar a Cristo y no darlo a conocer a los demás. Por tanto, no se guarden a Cristo para ustedes mismos. Comuniquen a los demás la alegría de su fe. El mundo necesita el testimonio de su fe, necesita ciertamente a Dios” (Mensaje a la juventud en Madrid), enseñándonos que el cristiano no se prepara para un fin de la vida, sino que la fe en Jesucristo prepara al creyente para un encuentro con Él.
La entrega y vocación que encarnó en su misión, fue un gran testimonio para la Iglesia, ya que desde muy joven recibió encargos de gran responsabilidad, que, aunque nunca los esperó, los ejerció con generosidad, serenidad y humildad, pero también con seriedad y determinación, mostrando con ello que su único deseo siempre fue ser “un humilde servidor de la viña del Señor”, como lo afirmó el día que fue elegido Papa en el año 2005.
Inició su servicio prominente en la Iglesia como asesor teológico del Concilio Vaticano II, brillando por su grandeza intelectual. Posteriormente fue Arzobispo de Munich y Frisinga (Alemania); Cardenal, Prefecto para la Doctrina de la Fe y decano del Colegio Cardenalicio.
A pesar de su admirable capacidad intelectual, su humildad era lo que más brillaba en su persona. Fue claro e íntegro en sus declaraciones, habló de forma certera, denunciando desde el Evangelio los terribles males que aquejaban en su momento al mundo y a la fe cristiana. Su humildad fue gracias a la indiscutible confianza en el Señor, haciendo en todo la voluntad de Dios, que guio su ministerio desde el momento de su ordenación sacerdotal en el año 1951.
Para la Iglesia ha sido una gran pérdida, un hombre de fe, que, desde su servicio eclesial y la producción intelectual, contribuyó para que el Evangelio de Jesucristo fuera comprendido en los diversos ámbitos en los que se mueve el ser humano. Ahora, en la gloria de Dios, hemos ganado un intercesor que pedirá al Señor, para que la Iglesia, en salida misionera, continúe su misión anunciando a Jesucristo. El Señor en su gran bondad y proveyendo lo mejor para su Iglesia, concede para cada tiempo los pastores eximios a la altura de las exigencias de las épocas, y desde los carismas que el Espíritu Santo infunde en ellos, sirven oportunamente para seguir guiando la Iglesia, en medio de muchas tormentas que la intentan derrumbar.
Damos gracias a Dios por la vida y testimonio de Su Santidad, el Papa emérito Benedicto XVI, y nos unimos en oración constante con toda la Iglesia Universal, para que esté gozando de la gloria de Dios que predicó con fe y que explicó con la razón a través de sus escritos.
Pidamos al Señor que siga guiando a la Iglesia por caminos de fe, esperanza y caridad, de manera que todos nos sintamos protegidos por la gracia de Dios y así, caminemos juntos, en salida misionera, como hijos de Dios, en el Proceso Evangelizador de nuestra Diócesis, hasta que lleguemos un día a gozar de la plenitud de Dios en su gloria. Que la Santísima Virgen María y el glorioso Patriarca san José, alcancen del Señor todas las gracias y bendiciones necesarias, para que practicando la enseñanza que nos ha dejado el Papa emérito Benedicto XVI, podamos crecer en santidad y nos preparemos también nosotros un día no para un fin de nuestra vida, sino para un encuentro con el Señor.
En unión de oraciones, reciban mi bendición.
+ José Libardo Garcés Monsalve
Obispo de la Diócesis de Cúcuta
Un delicado compromiso
Sáb 7 Ene 2023

Se ha conocido la respuesta que la Conferencia Episcopal de Colombia ha dado a la mesa de diálogo entre el Gobierno Nacional y el grupo guerrillero ELN y en la cual acepta ser acompañante de la misma. Allí se designa al Padre Héctor Fabio Henao y a los arzobispos Omar Alberto Sánchez Cubillos, de Popayán, y Darío Monsalve Mejía, emérito de Cali, como representantes de la Iglesia en esa mesa. Acepta, pues, la Iglesia una tarea muy delicada pues este grupo violento, el ELN, ha sido y sigue siendo de un radicalismo que, no solo ha causado mucho dolor y muchas muertes a lo largo y ancho del país, sino que también se caracteriza por una gran incapacidad de empatía con los propósitos de paz y esfuerzos en el mismo sentido que se han hecho ya varias veces.
Para la Iglesia, la colaboración en las tareas de construir la paz dondequiera sea necesario, hace parte natural de la misión recibida de su divino fundador, Jesucristo. Alabó él mismo a quienes trabajan por la paz. Y amplia es la experiencia que, a través de sacerdotes, obispos, religiosos y religiosas, comunidades de fe, se tiene para abordar esta nueva misión. Sin duda alguna, la Iglesia católica, en cada uno de sus pastores y en sus instituciones, sigue siendo como un oasis o un punto de encuentro en la dura realidad colombiana y al cual pueden acudir todos los que quieran en busca de construir una nueva nación, caracterizada por la justicia y el respeto de los derechos de todos los ciudadanos. En este sentido, lo que puede ofrecer la Iglesia, además de su experiencia y capacidad de escucha, es su autoridad moral y su sincero deseo de una paz para todos.
Pero si la historia violenta del ELN es muy difícil de lidiar, no menos lo será el descubrir la posición real, profunda y a largo plazo que tiene el gobierno actual. En la opinión pública, en los ciudadanos de bien, hay una gran preocupación por la forma más bien blanda y condescendiente con que se está mirando y tratando a muchos actores violentos como, por ejemplo, la llamada ´primera línea’, el Clan del Golfo –narcotraficantes puros- y quedaría la impresión de que gozarán de mayor atención que los reclamos de la gran mayoría de los ciudadanos pacíficos y trabajadores del país. Para nadie es un secreto que la inclinación política del actual gobierno es de corte revolucionario y que en esa ideología se trata de subvertir todo orden establecido y no debe haber lugar a engaños. A cada afirmación del gobierno actual hay que buscarle su verdadera intención.
Le corresponde, entonces, a los representantes de la Iglesia católica, es decir de todos los bautizados y no solo de la Conferencia Episcopal, tener una clara conciencia, en primer lugar, de su misión en favor de la paz, como lo manda el Evangelio y las muchas ingratitudes e incomprensiones que esto conlleva. Pero también una gran clarividencia acerca de en medio de quienes estarán sentados y cuáles son los verdaderos objetivos que buscan y si en realidad y en el fondo son diferentes. Ojalá todo sea para el bien, no de unos pocos, que es como últimamente se toman decisiones en el país, sino de toda la nación, de la totalidad de los ciudadanos y del territorio y, asimismo, que las atrocidades cometidas no queden impunes porque quedaría el mismo sinsabor que ha dejado el proceso con las Farc, en el cual lo más inhumano ha quedado bajo el manto del olvido. Mucho tiene por hacer en esta nueva tarea el Espíritu Santo.
Fuente: Oficina Arquidiocesana de Comunicaciones de Bogotá
¡Dios, hogar y dignidad humana!
Vie 23 Dic 2022

Por: Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía - Llega la Navidad de cada año, nueve meses después de unas anunciaciones misteriosas a una pareja nazaretana, hebrea, de estrato uno o dos, sometidos a la sociedad esclavista y al imperio romano, al judaísmo y al nomadismo que dictan los poderosos del establecimiento.
Se trata de María, una joven que ya está desposada con José, pero aún no se ha completado el tiempo para celebrar como esposos sus bodas. Los dos se ven en apuros ante la elección divina para “semejante ministerio”, de maternidad sin concurso de varón y de esponsalidad con una mujer en gestación de otra autoría. Pero traducen su apuro en un SÍ desde la fe y asumen como esposos la misión de brindarle un hogar a Dios en las genealogías humanas.
Nace un niño en improvisada pensión de ganados, entre el rumiar de un buey y el rebuzne de una mula. Un excluido, un descartado, un destechado, pero de descendencia davídica y de origen misterioso, como invasor de tierras, como huésped no buscado, que pidió lugar y aunque “existía desde el principio, y todo fue hecho por Él”, “se hizo carne y acampó entre nosotros”.
El universo, especialmente el Occidente de la tierra, concentra su mirada en este pesebre, que contabiliza los calendarios en un antes y después de Cristo, así vivamos sin que Cristo sea el centro, el eje, el núcleo y la potencia que mueva vidas e historias, pueblos y culturas.
Aunque Navidad parezca sólo un mero pretexto para poner luces que esconden defraudaciones presupuestales, o músicas y tiernas letras que esconden villanías y llantos, la bondad del trigo que Dios sembró al encarnarse en toda naturaleza humana, y la armonía impresa al universo todo, puede brillar en cada Noche de Navidad.
En este contexto de la Noche Buena y del Nacimiento del Dios hecho hombre, de la Palabra hecha vida y de la vida hecha luz de los hombres, surgen tres verdades que la humanidad no debería separar, porque se auto destruye si no las mantiene en sana armonía: DIOS, HOGAR Y DIGNIDAD HUMANA.
Dios es Amor. La Navidad, la Cruz, la Resurrección y Pentecostés con sus lenguas de fuego, nos hacen sabernos amados, desposados, habitados y habitantes de una casa común, con el mismo idioma del amor que vence diversidades y distancias.
Jesús es el milagro de la intimidad solidaria de Dios con cada ser humano. Es la dicha de una Presencia que transforma en divina compañía el vacío de lo humano. Dios se hace hombre en el hogar de los esposos, formando una familia, un hogar de fe, de amor y de vida.
Este hogar de Jesús lo forman esposos que se saben amados de Dios y que se aman entre ellos, para cumplir juntos una misión, un ministerio confiado por Dios. Son esposos abiertos a la estabilidad de su relación, a la exclusividad de su intimidad y a la fecundidad que comunica y protege la vida. Forman un hogar típico e ideal, que es el pesebre eterno de Dios, el hogar de Belén y Nazaret.
Quizás los caminos no sean siempre los mismos de la pareja humana, pero toda persona, toda vida humana, necesita nacer, crecer y estar en un hogar de amor, de respeto y de generoso compartir. Todos ellos son los “hogares de Dios”. Desde ellos se construye la gran familia humana, la de los que “no han nacido de sangre, ni de amor carnal, ni de amor humano, sino de Dios”, como dice hoy el prólogo de San Juan.
¡Y la dignidad humana! Proclama la Navidad que Dios incluye en su Amor a todos. Y se hace hombre, pobre y solidario en el dolor y con la causa de la justicia en cada área de la vida, para elevar a todo ser humano a la excelsa dignidad de hijo de Dios, de heredero victorioso, a un nivel superior al de los mismos ángeles, como declara la lectura de Hebreos.
¡Ningún ser humano sin dignidad reconocida, sin derechos cumplidos, sin deberes y oportunidades abiertas al crecimiento del alma y al ensanchamiento del corazón, a la construcción de una humanidad igualitaria y unida desde sus identidades y diversidades.
Solo esta trilogía inseparable garantizará la armonía entre Dios y la Humanidad, este compartir humano divino, y este compartir fraterno y ambiental, que profetiza bellamente la Noche y el Día de las Navidad!
+ Darío de Jesús Monsalve Mejía
Arzobispo emérito de Cali

Vida Consagrada | Jue 26 Ene 2023
JORNADA VIDA CONSAGRADA: “Ustedes son signo de esperanza y testigos de la vida en donde asecha la muerte”

Comunicación Social y Tecnologías | Mié 25 Ene 2023
Participa del primer Encuentro de Pastoral Digital

Comunicación Social y Tecnologías | Mar 24 Ene 2023
Vaticano presenta mensaje para la 57ª Jornada Mundial de la Comunicaciones Sociales

Estado Laical | Vie 20 Ene 2023
El Papa: Jóvenes prepárense para la JMJ, abrir horizontes y no levantar muros

Comisión de Conciliación Nacional | Lun 16 Ene 2023