Pasar al contenido principal

encuentro mundial familias

Mié 9 Feb 2022

Talleres de preparación para el X Encuentro Mundial de las Familias

Del 22 al 26 de junio de 2022 se realizará, en Roma, el X Encuentro Mundial de las Familias. De cara a esta celebración, la Conferencia Episcopal de Colombia, adelantará un programa especial denominado: "El amor familiar vocación y camino a la santidad", que será transmitido todos los miércoles por el canal Cristovisión, iniciando este 9 de febrero, hasta el 22 de junio a las 8:00 p.m. El padre Juan Carlos Liévano, director del Departamento de Matrimonio y Familia de la Conferencia Episcopal de Colombia y quien será la persona que modere este espacio, ha dicho que esta iniciativa busca ir preparando el camino para lo que será el encuentro mundial en Roma y en simultáneamente en nuestras Diócesis, inspirados en la exhortación apostólica Amoris Laetitia. "Será un momento, para que con la ayuda de especialistas se profundice a la luz de la exhortación Amoris Laetitia sobre la importancia del amor al interior de la familia; en el diálogo de escucha sincera, teniendo como fuente de inspiración la oración y el modelo de la familia de Nazaret, de ahí la importancia que este programa pueda ser visto en familia", aseveró el sacerdote. Se contará con el aporte de conferencistas nacionales e internacionales, especializados en el campo de la pastoral familiar, entre ellos se tendrá la participación exclusiva del laico y orientador familiar, José Armando Duarte Pantoja, de la Diócesis de Irapuato, en México. X Encuentro Mundial de las Familias Recordemos que el pasado 30 de septiembre de 2021, el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, presentó lo que será el X Encuentro Mundial de las Familias, que tendrá lugar del 22 al 26 de junio de 2022, este, contará con diversos actos en Roma, pero, sobre todo, como un evento "multicéntrico" y "virtual" con acciones paralelas en todas las diócesis del mundo. Esto es para que todos se sientan protagonistas en un momento en el que todavía es difícil viajar debido a la pandemia. "Esta edición no se desarrollará con un único encuentro en Roma, sino como un verdadero evento multicéntrico (...) que permitirá a todas las familias participar en los encuentros diocesanos, en las fiestas, y en las misas que todo obispo está invitado a organizar en la propia diócesis", señaló en su momento el prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, el cardenal Kevin Farrell.

Jue 23 Ago 2018

Pilar Arango y Jesús Magaña: “Llevamos a Dublín la voz de la familia colombiana”

Los esposos José de Jesús Magaña y Pilar Arango (tercero y cuarta en la foto, respectivamente, de izquierda a derecha), coordinadores del movimiento Unidos por la Vida, en Colombia, participan hoy, 23 de agosto, en uno de los paneles principales del Encuentro Mundial de las Familias (EMF) en Dublín, que lleva por títlulo: “la dignidad y la belleza del amor sexual: encontrar un lenguaje nuevo para verdades antiguas”. Jesús fundó en 1985 Vive, el primer movimiento pro-vida colombiano. Pilar, por su parte, hace parte de la red Familia Colombiana, una ONG que defiende los derechos de los padres, de cara al impacto de la ideología de género. La familia, un patrimonio de la humanidad PREGUNTA.- ¿Qué significa para ustedes participar en el EMF? PILAR.- Es un honor y una gran responsabilidad. Llevamos a Dublin la voz de la familia colombiana, la familia latinoamericana. La voz de un continente que tiene sabor de familia y que lo vive en sus tradiciones, en su cultura, en sus valores. Un continente que cree que la familia vale la pena, que es un tesoro, un patrimonio de la humanidad, y que merece ser cuidada, promovida y protegida por todas las instituciones gubernamentales. P.- Las tentativas de legalizar el aborto en los países no cesan, ¿qué papel juegan las familias católicas de cara a esta realidad? JESÚS.- Las familias son la fortaleza más grande para acabar con esta plaga moderna del aborto. En ellas nace y se cultiva la vida. Es el lugar privilegiado en donde Dios muestra su amor creador que sustenta el universo. Entrega total, apertura a la vida y placer P.- ¿Cómo asumir la dimensión erótica del amor en estos tiempos sin caer en “una negación del valor del sexo humano”, como propuso en su momento Juan Pablo II? PILAR.- La sexualidad, su belleza y dignidad es, simplemente, la continuación de un proceso de maduración integral y sana del ser humano. Es la llave de la vida y vínculo de unidad, en la que Dios Padre hereda a sus hijos, en la figura de los esposos, su esencia creadora en la procreación. Vivir una sexualidad en Dios es tomar y aceptar este estandarte con respeto y gratitud, y vivirlo en plenitud. Es entender que para vivirlo de manera que dignifique al ser humano, debe entenderse desde el concepto físico y espiritual en la figura de un trípode, que sería: entrega total, apertura a la vida y placer. Cuando se elimina uno de estos tres aspectos, el sentido de la sexualidad queda incompleto, se desdibuja de su verdadero fin. Es allí cuando puede caerse en el reduccionismo físico del placer como meta y fin último de la sexualidad, olvidándose que el placer es medio y no meta. Cuando la sexualidad se cierra a la apertura a la vida, anulamos nuestra capacidad procreadora dada como tesoro por Dios Padre, según su imagen y semejanza, a cada hombre y mujer. Cuando la sexualidad deja de ser medio de unión e intimidad exclusiva entre los esposos, se rompe el vínculo fuerte de unidad sellado con el sacramento del matrimonio y la bendición divina, vínculo necesario para enfrentar los desafíos de la vida matrimonial, su fortaleza será heredada como legado de amor a la estabilidad emocional de los hijos. Sexualidad y cuerpo P.- ¿La Iglesia y, en particular, las familias católicas, han dado a la sexualidad el lugar que le corresponde? JESÚS.- Yo creo que desde siempre en la Iglesia la sexualidad ha sido tratada con la delicadeza y la importancia que merecen. Ante la propuesta cátara que condenaba la sexualidad y el cuerpo humano, la Iglesia con mucha fortaleza afirmó la dignidad e importancia de estos en el plan de salvación de nuestro Señor. En nuestra época se ha dado un trabajo incesante con aportes tan significativos como los de la encíclica Humanae vitae, del beato Paulo VI, o la Evangelium vitae, de San Juan Pablo II. Los aportes de los laicos también han sido muy importantes, por ejemplo, en el terreno de la fertilidad, tenemos a los doctores Billings o los aportes del gran científico católico Jérôme Lejeune. Hace falta mucho todavía. Los desafíos son muy grandes por la gran confusión que el mundo moderno dentro de su inmanentismo está generando y que se han sintetizado en la ideología de género que ha sido desenmascarada y combatida muy eficazmente por la Iglesia a través de sus laicos. Mostrar la belleza del amor P.- ¿Qué avances se han logrado con Amoris Laeticia? JESÚS.- Creo que como toda encíclica está asimilandose por el pueblo de Dios. La encíclica hace una radiografía muy acertada de la situación actual e invita a una nueva evangelización de la familia y desde la familia para mostrar al mundo la belleza y el gozo del amor con métodos nuevos y cercanos a la gente en especial a los jóvenes. Por: Portal Vida Nueva Digital en Colombia