Pasar al contenido principal

llegada papa

Mié 6 Sep 2017

El Papa habló poco, pero comunicó mucho

Por: P. Jaime Alberto Marenco Martínez - Los verdaderos sabios, decía mi abuelo, hablan poco, pero comunican mucho. Eso fue lo que hoy hizo Francisco, el papa de la alegría y la esperanza. Tanto a su llegada al aeropuerto El Dorado de Bogotá durante los actos protocolarios de bienvenida por parte de la Presidencia de la República, como en la recepción que le brindaron en la entrada de la Nunciatura, donde pernoctará durante su estadía en Colombia, no se dieron y tampoco hicieron falta los extensos discursos propios de estos acontecimientos. El papa cruzó palabras de saludo con el Presidente Juan Manuel Santos y su esposa; con el Nuncio Apostólico, monseñor Ettore Balestrero; el Arzobispo de Bogotá y Cardenal Primado de nuestro país, monseñor Rubén Salazar Gómez; el Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Óscar Urbina Ortega; el director ejecutivo de la visita papal, monseñor Fabio Suescún Mutis, y demás obispos que lo recibieron; agradeció, seguramente con palabras de afecto, el obsequio que le entregó el pequeño Emmanuel y, con la afabilidad que lo caracteriza, iba saludando, dejándose fotografiar, recibiendo obsequios y manifestando afecto a quienes tuvieron la dicha de estar cerca de él antes de que subiera al papamóvil que lo trasladó a la Nunciatura. En su primer día de visita el Papa Francisco habló poco, pero comunicó mucho con sus gestos, ademanes, sonrisas, abrazos, actitud de escucha… Todo esto fortalece nuestra confianza en su buena voluntad y deseo profundo de paz para nuestro país, una paz que inicia en la reconciliación con el otro y exige una ‘comunicación constructiva’ que nos anime a rechazar prejuicios contra los demás y, más bien, fomente una cultura del encuentro que ayude a mirar la realidad con auténtica confianza. Sí, el Santo Padre hoy habló poco, pero comunicó mucho. Y nos dejó claras dos cosas: no dejarnos robar la alegría y la esperanza, y rezar por él. Por JAIME ALBERTO MARENCO MARTÍNEZ Director de Sistemas – Conferencia Episcopal de Colombia [email protected]

Mié 6 Sep 2017

¡Y llegó el Papa, manifestando cercanía y alegría!

A las 4:10 de la tarde el avión de Alitalia, que lo trajo desde Roma, tocó tierra colombiana. Este fue el momento de que el Papa Francisco se bajó de avión #modopapa #ElPapaCol pic.twitter.com/LDaimCjxUk — Episcopado Colombia (@episcopadocol) 6 de septiembre de 2017 El protocolo oficial fue muy breve: saludo al Presidente Santos y su esposa Clemencia; al Nuncio Apostólico, monseñor Ettore Balestrero; al Cardenal Primado, monseñor Rubén Salazar; al presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Óscar Urbina; al director ejecutivo de la visita papal, monseñor Fabio Suescún, y varios obispos que se encontraban en la pista del aeropuerto El Dorado; también ofreció su saludo al gabinete ministerial. Se detuvo frente al grupo de jóvenes que desbordaban alegría bailando cumbia en su honor; fue cercano y tierno con sus hijos discapacitados, algunos de las fuerzas militares de Colombia, que lo esperaban ansiosos para saludarlos y dejarse bendecir por él. Con cumbia fue recibido el Papa Francisco. ¡Bienvenido Santo Padre! #ModoPapa #ElPapaCol pic.twitter.com/AtFk23E1if — Episcopado Colombia (@episcopadocol) 6 de septiembre de 2017 Subió al papamóvil para dirigirse a la Nunciatura. Se dejó amar por la multitud que a gritos lo saludaba… Debió emocionarse como se emocionó Cristo en su entrada a Jerusalén, pero como el mismo Francisco lo ha dicho en repetidas ocasiones, refiriéndose a este tipo de manifestaciones en las calles de las naciones que lo han recibido durante su pontificado: “Inmediatamente recuerdo la cruz que acogió a Nuestro Señor”. El Papa Francisco en medio de la multitud. Colombia recibe el #VicariodeCristo #modopapa #elpapacol pic.twitter.com/QjbzyNnoNT — Episcopado Colombia (@episcopadocol) 6 de septiembre de 2017