Pasar al contenido principal

diócesis de Palmira

Lun 12 Ago 2024

“Para mí, vivir es Cristo”: la certeza bíblica que guía a monseñor Rodrigo Gallego Trujillo, obispo electo de Palmira

El pasado, sábado, 10 de agosto, en la Basílica Menor del Señor de Los Milagros de Buga, se llevó a cabo la ceremonia de ordenación episcopal de monseñor Rodrigo Gallego Trujillo, quien fue nombrado obispo de la Diócesis de Palmira por el papa Francisco el pasado 31 de mayo.El ordenanteprincipal fue monseñor José Roberto Ospina Leongómez, obispo de la Diócesis de Buga, presbiterio al que pertenece el obispo electo de Palmira. Además de monseñor Ospina, en este importante momento y como signo de acogida y comunión episcopal, a monseñor Rodrigo lo acompañaron cerca de 30 obispos más. En representación de la Nunciatura Apostólica, estuvo presente su secretario, monseñor DavidPaulCharters.Previo al Rito de Ordenación, durante la homilía, monseñor José Roberto Ospina Leongómez expresó su gratitud con el papa Francisco y la alegría que han experimentado en esa jurisdicción tras la noticia del nombramiento.“Esta Diócesis de Buga ha sido hija de la Diócesis de Palmira y hoy, con alegría, desde la hija, la Iglesia llama a un pastor para la Iglesia madre, es emocionante”, expresó monseñor Ospina.Así mismo, monseñor José Roberto hizo referencia al sentido profundo de la sucesión apostólica y a la responsabilidad que implica la nueva misión que asume monseñor Rodrigo: “Así como en las familias hay una genealogía, en el episcopado hay una genealogía. Un obispo a otro obispo le va pasando la sucesión apostólica; y hoy yo tengo la alegría de ser el transmisor de esa genealogía, que en el siglo XX contó con San Pío X, con el papa Benedicto XV, con el papa Pío XII, con San Pablo VI. Una genealogía de Santos que nos obliga a continuar en la santidad” .El obispo de Buga también le pidió a monseñor Rodrigo, tener presente cuatro prácticas de vida centrales durante su ministerio: Disculpar sin límites, creer sin límites, esperar sin límites y aguantar sin límites. “Sigue esas cuatro frasecitas querido nuevo obispo, te ayudarán a relacionarte con tu clero”, agregó monseñor José Roberto.A propósito del templo en el que se llevó a cabo ordenación, la Basílica del Señor de los Milagros, a donde diariamente acuden con devoción tantos fieles nacionales y extranjeros, monseñor José Roberto afirmó que el mejor de los milagros que se le puede pedir es “creer en Jesucristo para servirle y seguirlo, como Él quiere ser servido: siguiéndolo hasta la Cruz”. Con lágrimas de alegría en los ojos, terminó su homilía deseándole a monseñor Rodrigo la protección de la Virgen Santísima y de San José. Con el mismo sentimiento en su rostro, monseñor Rodrigo acogió estas palabras.“Para mí, vivir es Cristo”: con esta expresión bíblica, tomada de la Carta a los Filipenses, el nuevo obispo inició sus palabras. Afirmó que esa certeza lo ha acompañado desde su diaconado y que también quedó consignada en su escudo episcopal para que le recuerde su prioridad y dirección.“Para indicarme que toda mi vida le pertenece al Señor y a la Iglesia, sin distracciones innecesarias. Y he dejado esta sentencia bíblica en mi escudo episcopal para que siga siendo el faro luminoso en mis pasos y nunca olvide lo que debo ser: ministro de Cristo”, agregó monseñor Rodrigo.El obispo electo de Palmira también agradeció a su familia, a su municipio de origen (Sevilla, Valle del Cauca), a sus formadores en el Seminario Mayor Juan Pablo II de la Diócesis de Armenia, por haber sembrado en él, el gusto por la docencia; gusto que se vio reflejado en su proceso como formador, docente y rector del Seminario Mayor Los Doce Apóstoles de Buga. Además , expresó su responsabilidad con el Pontífice; se refirió a la colegialidad con sus hermanos obispos, a lo que pide el Concilio Vaticano II para el ministerio: “Enseñar, santificar y servir”. Además, hizo una petición muy especial a Dios:“Que me dé siempre la alegría del ministerio; serenidad para vivir cada momento con sabiduría y acierto; generosidad para darme totalmente a mi amada Diócesis de Palmira, a la cual de verdad amo con todo mi ser desde ya”.A propósito de la sucesión apostólica celebrada allí, el obispo electo de Palmira también pidió al Señor que le concediera lo mejor de los doce apóstoles, evocando características y dones muy particulares de cada uno.La ceremonia de posesión canónica de monseñor Rodrigo en la Diócesis de Palmira se llevará a cabo el próximo sábado, 17 de agosto.Vea a continuación la transmisión de la ceremonia de Ordenación Episcopal:

Mié 3 Abr 2024

Mi Pascua en el Darién

Por P. Arturo Arrieta Aguas - Escrito en "Lajas Blancas", campamento en el Darién.Un sol inclemente azota uno de los campamentos a las orillas de la selva del Darién, donde día a día llegan, de diferentes partes del mundo, cientos de migrantes. Algunos, con la alegría nerviosa de haber pasado la selva, pero con el desconcierto de no saber qué les espera; otros con el corazón desgarrado por haber dejado atrás a otros que ya no llegaran; otros sencillamente llegan...Así fue, estuve en el Darién, en "Lajas Blancas", por el lado de la frontera con Panamá. La vida me trajo aquí nuevamente, y haber visto tantos videos y fotos no se compara con tener la realidad de frente. Siempre la misma escena: niños y más niños que ni entienden lo que pasa, hombres y mujeres casi sin poder caminar. A algunos, por hablar otra idioma, no les entendía lo que me decían, pero su gesto es suficientemente claro: una mano extendida con insistencia hacia nosotros, la otra señalando su estómago y una mirada desgarradora difícil de olvidar.Otra imagen se me ha quedado de manera especial. La de un joven que, con su mirada perturbada, no paraba de llorar diciéndome: "hay niños que murieron ahogados en el rio". Y hoy aquí pensaba: ¿Cómo viviré mi Pascua ahora que llegue a Colombia? ¿Qué podré decir en cada celebración? ¿No sería mejor callar? Sin embargo, ahora entiendo tal vez mejor el acontecimiento de la Pascua que, en imágenes sencillas pero certeras, ha sabido recoger lo esencial del misterio de Dios y de su entrega.Mateo nos dice que el día se tornó oscuro desde la hora sexta hasta la hora novena, desde el mediodía hasta las tres de la tarde (Mateo 27, 45). En el mundo es de noche y los hombres caminamos en tinieblas. Creemos saberlo todo y no vemos lo esencial. El relato tiene mucho de cierto. Si Dios resucita a su Hijo, siempre será para iluminar nuestra ceguera y abrir nuestros ojos al dolor del hermano que sufre.La manera más auténtica de celebrar la pasión del Señor es reavivar nuestra compasión, sin esto se diluye nuestra fe en el “Dios crucificado” y se abre la puerta a toda clase de manipulaciones. Que nuestro beso al crucificado nos ponga siempre mirando hacia quienes cerca o lejos de nosotros viven sufriendo con sus sufrimientos espirituales y materiales, hasta que un día celebremos la pascua celestial y el señor no responderá si eres de los míos “porque tuve hambre y me diste de comer”.La muerte de Jesús trajo frío y hace frío en el mundo actual. Falta el calor del verdadero amor. Se han helado muchos corazones, se han helado muchos países bloqueados por la superficialidad y el bienestar, muchas veces no somos capaces de sentir verdadera compasión por tantos crucificados vivos. El relato dice la verdad...Si Dios resucitó a su Hijo, será para poner en el mundo el calor del amor y la misericordia, este es el sentido de la Pascua.Solo hay una manera de vivir como resucitados: abandonar nuestras presunciones y seguridades, dejar de engañarnos, no confiar en tantas palabras vanas que salen de nuestra boca y tener el coraje de creer más en el amor y en la compasión. Podemos ser mejores, en el mundo puede crecer la solidaridad, pero eso sí, Dios solo puede resucitar allí donde se le deja entrar, y solo se le deja entrar allí donde se deja entrar al amor. Bendiciones.Padre Arturo Arrieta AguasDirector de Pastoral Social de la Diócesis de PalmiraDirector de la Red Clamor - Capítulo Colombia

Mar 11 Oct 2022

Diócesis de Palmira, sede del VIII Congreso Nacional CONIAM 2022

Del 13 al 16 de octubre, la Diócesis de Palmira recibirá en su sede a niños, adolescentes y asesores de la Infancia Misionera de todo el país para vivir el octavo CONIAM 2022, que tendrá como tema de reflexión: “Sinodalidad: Caminar juntos con Jesús para ser misioneros”. Según lo explican sus organizadores, el evento se realizará en el marco del mes de las misiones que la Iglesia universal anima este mes de octubre. Además, acogiendo el llamado que el Papa Francisco hace a ser una Iglesia en sinodalidad, se ha escogido para esta ocasión el lema: Caminando juntos ¡Somos testigos alegres de Jesús! “Es una hermosa oportunidad para que los niños, niñas y adolescentes se expresen acerca de lo que saben de la Iglesia, cómo la ven y la sienten, y así crezcan aún más en la conciencia de que por el bautismo, forman parte de una gran familia, donde todos somos importantes”. Este espacio de reflexión, adoración, canto y recreación busca “promover en los niños y adolescentes la sinodalidad misionera enseñada por Cristo, para que con la fuerza del Espíritu Santo se encienda aún más el fuego del amor misericordioso de Dios Padre en el mundo”. Por su parte el obispo de la Diócesis de Palmira, Edgar de Jesús García Gil, hizo la invitación a participar de este congreso que se realizará en la Villa de las Palmas, observando que esta jornada será un signo de comunión y un camino de sinodalidad. Quiénes podrán participar La invitación es para niños entre 9 a 12 años y adolescentes de 13 a 17 años, que tengan un recorrido dentro de la Obra de la Infancia de Animación Misionera (IAM), conocer bien sus objetivos, compromisos, y en lo posible que hayan tenido experiencia de ELMI (Escuela de Liderazgo Misionero) y que haya en ellos la capacidad de liderazgo, dinámicos, participativos. Por su parte, los asesores que participen deben ser personas mayores de edad, con una amplia experiencia en la obra (más de dos años) y que conozcan todos los fundamentos de la (IAM). La participación al CONIAM se realizará a través de los respectivos Comité Regional de Misiones- COREMI, de cada Jurisdicción Eclesiástica y tiene un costo de $290.000 Para mayor información pueden escribir al E-mail :[email protected]

Jue 3 Sep 2020

Diócesis de Palmira apoya a comunidades con acciones y palabras de esperanza

Ante la crisis sanitaria que vive el país por cuenta del Covid-19, diferentes jurisdicciones eclesiásticas se han dado a la tarea de brindarle seguridad alimentaria y apoyo psicosocial a las comunidades más vulnerables de su región. De este modo, la Pastoral Social de la Diócesis de Palmira, a lo largo de los últimos seis meses, ha aunado esfuerzos en pro de acompañar a las comunidades más necesitadas que les rodean. De acuerdo con el Padre Arturo Arrieta, director de la Pastoral Social de esta Jurisdicción ha dicho que “se han generado diferentes acciones en torno a la ayuda durante esta pandemia para las poblaciones más vulnerables. Lo primero es la seguridad alimentaria, se han distribuido un poco más de 50.000 raciones de comida a la fecha. También hemos distribuido mercados, kit de aseo, kits de higiene. Todo esto gestionado con empresas locales, pero sobre todo con instituciones internacionales”. Dichos kits de aseo y elementos de bioseguridad han sido entregados a los reclusos de la cárcel de Palmira y a migrantes venezolanos, con el objetivo de evitar contagios de Covid-19. Asimismo, se han focalizado en la población migrante y en quienes históricamente han estado en situación de vulnerabilidad, agravada ahora por las dinámicas de la emergencia sanitaria. El apoyo brindado por la Diócesis no se limita a las ayudas materiales, pues se disponen de dos líneas telefónicas para el apoyo espiritual y psicológico de la comunidad. El Hogar de Paso Papa Francisco, está a disposición “para las personas que se queden sin casa en estos momentos de pandemia, para los migrantes que no tengan para arriendo, poder hospedarlos”, comenta el Padre Arrieta. Allí pueden encontrar un refugio temporal que les ofrece también la alimentación. Además, se destaca la ardua labor en la gestión y entrega, casa por casa, de donaciones de alimentos a las personas más necesitadas. La Iglesia católica ha procurado enviar a la comunidad mensajes de fe y esperanza en estos tiempos difíciles que se viven actualmente. Para el sacerdote Arturo Arrieta, “sólo si estamos unidos, aunque no juntos, haciéndonos cargo de los unos de los otros podemos superar los desafíos. Lo peor que puede pasar en esta pandemia sería desaprovecharla, por eso no desaproveches ese momento tan valioso, no desaproveches este tiempo de aprendizaje. Este signo de los tiempos porque si nos llevamos acompañados uno de otros y obviamente con el señor iluminando cada situación de nuestra vida, vamos a ver salir el arcoíris como en el diluvio”. Fuente: Oficina de comunicaciones Secretariado Nacional de Pastoral Social - Caritas

Lun 19 Sep 2016

Palmira y Defensa de la Vida organizan foro sobre Bioética

La Diócesis de Palmira con el apoyo de el Departamento de Promoción y Defensa de la Vida del episcopado colombiano organizan el Foro de Bioética: "El valor de la vida". Este evento se realizará los días 5 y 6 de octubre en la Casa de Pastoral de Palmira, Valle. Durante este evento se presentarán los temas: Anticoncepción y FIV; Promoción y Defensa de la vida, un concepto bioético; introducción al concepto de persona humana; Eutanasia,final de vida y cuidados paliativos y Amenazas de la cultura actual a una sana afectividad. CLIQUEA PARA VER LA IMAGEN EN ALTA RESOLUCIÓN