Pasar al contenido principal

iglesia colombiana

Lun 5 Feb 2024

“Seamos instrumentos de renovación sinodal y misionera”: cardenal Luis José Rueda durante la instalación de la Asamblea 116

En la mañana de este lunes 5 de febrero, los obispos colombianos dieron inicio a su asamblea 116. La instalación del encuentro estuvo a cargo del cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal. Durante su alocución, el purpurado invitó a sus hermanos obispos a ser “instrumentos de renovación sinodal y misionera" en Colombia.En su mensaje, el primado de Colombia propuso a los prelados cuatro maneras de ser misioneros en sinodalidad para el anuncio del Evangelio en cada una de las jurisdicciones eclesiásticas que pastorean:1.Misioneros que oran y trabajanEl cardenal Rueda les recordó la importancia de entretejer siempre la oración con el trabajo que adelantan, y desde allí, desde ese encuentro permanente con el Señor, mantener la claridad y la energía que necesitan para el desarrollo de su misión.“Y si en verdad somos misioneros que oramos y trabajamos, tendremos necesidad de la Eucaristía con la doble mesa de la Palabra y del Pan de vida, que nos alimenta y nos pone en camino como Pueblo de Dios”.2.Misioneros con alegría y con cruzMonseñor Rueda afirmó que la vida de los misioneros armoniza la alegría y la cruz, asimismo, que el corazón de un obispo está lleno de cicatrices producidas por heridas y sufrimientos propias de su pastoreo en medio del Pueblo de Dios. Por ello, los invitó a alimentar su confianza en el Señor y así sobrellevar las dificultades que, a menudo, deben enfrentar. También, a pensar en sus otros hermanos obispos siendo apoyo cuando lo requieran.“No podemos esperar hasta que llegue el tiempo en que seamos eméritos para comenzar la terapia que nos permita sanar nuestro corazón episcopal. ¡Es ahora, mientras vamos con la cruz de cada jornada! ¡Es ahora que debemos ofrecerle nuestra palabra y nuestra fraternidad a cada hermano obispo! ¡Es ahora, el tiempo propicio para que, en la colegialidad apostólica, nos ayudemos, y así podamos avanzar en una auténtica sinodalidad, desde el peregrinar profundo de nuestro corazón! Con diversas medicinas, el Señor sana nuestro corazón episcopal; mencionemos sólo tres: la fraternidad, la oración y la misión”.3.Misioneros que escuchan y disciernenHaciendo referencia a la metodología usada durante la primera parte de la Asamblea General del Sínodo realizada en Roma en octubre del 2023, conocida como conversación en el Espíritu, el cardenal afirmó que se trata de algo más profundo que una simple estrategia. Dijo que es una manera de ser Iglesia y una forma de vivir su episcopado en la escucha y el discernimiento.Como se plantea el documento de síntesis de dicha asamblea sinodal, -agregó el purpurado-, la auténtica escucha es fundamental en el camino hacia la sanación, el arrepentimiento, la justicia y la reconciliación. Además, que esa escucha debe ser aplicada ante el clamor entero de la creación.“Sólo podremos discernir en profundidad si estamos dispuestos a escuchar la voz del Espíritu que nos habla en una gran sinfonía de voces: de laicos, de la vida consagrada, de ministros ordenados e incluso de personas que no hacen parte de la Iglesia”.4. Misioneros con el gusto de ser pueblo de DiosEl presidente del episcopado terminó su alocución recordando que, como pastores, están llamados a vivir su misión de iluminar, bendecir, vivificar, levanta y sanar, desde un amor cercano y comprometido con el bien de todos. Esto implica caminar juntos, como pueblo, consolidando relaciones fraternas, animadas por la fe, la esperanza y la caridad.“A nosotros los obispos, el servicio a la santidad de la comunidad eclesial nos pide tiempo y espacio, paciencia y dedicación para estar cerca de la gente. En este encuentro cercano, crece y da fruto nuestra vocación misionera, al estilo de Jesús, quien toma el riesgo misionero de ser cercano a los pecadores, a los enfermos, a los relegados por la religión y por la sociedad”.

Lun 5 Feb 2024

Cardenal Luis José Rueda Aparicio llama al encuentro, el diálogo y a la búsqueda del bien común en Colombia

Ante el complejo momento político que vive Colombia, “de ánimos caldeados, posturas diversas y desencuentros”, el cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal, pide que los colombianos, especialmente a los líderes, que enfoquen todos sus esfuerzos en la búsqueda de acercamientos y diálogos que faciliten la unidad y el bien común que tanto necesita el país.“Tenemos una democracia, debemos defenderla, tenemos unas instituciones, debemos fortalecerlas y debemos acompañarnos todos en la solución de los conflictos que se nos puedan presentar”, expresa el purpurado.Además, en el mensaje, el cardenal ofrece los servicios de la Conferencia Episcopal de Colombia para acompañar un posible diálogo entre los distintos líderes del país, un espacio necesario de escucha que permita buscar la mejor salida a esta confrontación.El llamado se produce este lunes 5 de febrero, al iniciar la CXVI Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano, que se estará desarrollando hasta el próximo viernes 9 en Bogotá, bajo el lema “Una Iglesia sinodal en misión”. Encuentro durante el cual los obispos del país abordarán también aspectos relacionados con la situación del país y su misión pastoral ante los desafíos que se presentan.Vea el mensaje del presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia:

Dom 4 Feb 2024

La Voz del Pastor | 4 de febrero de 2024

Reflexión del señor Cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y primado de Colombia:Lectura del Santo Evangelio según San Marcos 1, 29-39

Vie 2 Feb 2024

Obispos reflexionarán sobre la Asamblea General del Sínodo y su proyección en la Iglesia colombiana

Del 5 al 9 de febrero se llevará a cabo la CXVI Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano. Ochenta y seis obispos del país, incluyendo algunos eméritos, han confirmado su participación en este primer encuentro del año que se llevará a cabo en Bogotá.Durante esta reunión reflexionarán y trabajarán sobre el Sínodo de la Sinodalidad, específicamente a propósito de la etapa universal, que inició en octubre del 2023 con la primera parte de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos realizada en Roma. Por esto, tendrán como guía el Informe de síntesis presentado desde el Vaticano al cierre de dicha asamblea. Precisamente para esta reunión, los pastores colombianos adoptaron como lema la frase “Una Iglesia sinodal en misión”, la misma con la que se tituló dicho documento.Bajo ese propósito, los cuatro representantes de la Iglesia colombiana en la Asamblea General del Sínodo, serán los encargados de presentar durante esta semana a todos los prelados las claves centrales de esa síntesis, así como las experiencias vividas durante ese primer encuentro de la asamblea sinodal. Se trata de la madre sinodal, la hermana Gloria Liliana Franco Echeverri, presidenta de la Confederación Latinoamericana y Caribeña de Religiosos y Religiosas (CLAR); el señor Cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia; monseñor Ricardo Tobón Restrepo, arzobispo de Medellín; monseñor José Miguel Gómez Rodríguez, arzobispo de Manizales.En concordancia con la síntesis, las dimensiones de análisis clave que se abordarán en este encuentro 116 de los obispos del país serán: 1. El rostro de la Iglesia sinodal. 2. Todos discípulos, todos misioneros. 3. Tejer lazos, construir comunidad. Esto, a través de una metodología de trabajo que incluye conversatorios, plenarias, trabajos grupales por temas y por provincias eclesiásticas.Junto al discernimiento de las propuestas universales, los prelados también tendrán momentos enfocados en identificar los pasos que debe seguir la Iglesia colombiana en el camino sinodal. Esto se articulará con el análisis de la realidad que siempre realizan durante cada asamblea plenaria, en el que incluyen no solo aspectos de tipo eclesial, sino también social.

Jue 1 Feb 2024

Ser bálsamo ante el dolor y peregrinos de la esperanza, con espíritu sinodal: el llamado para los consagrados de Colombia

En el contexto de la XXVIII Jornada Mundial de la Vida Consagrada que se celebrará este viernes 2 de febrero, representantes de las instituciones de la Iglesia encargadas de animar a los consagrados de Colombia, hacen un llamado a valorar y fortalecer, cada vez más, la misión que desarrollan los religiosos y religiosas en los diversos territorios, siendo apoyo, especialmente, para quienes más sufren a causa de problemas sociales, como la pobreza, la injusticia, la corrupción y la violencia. También, de cara al Jubileo del 2025, piden a los religiosos seguir llevando un mensaje de confianza y esperanza en medio de la incertidumbre que muchas comunidades viven hoy, de manera particular, en las periferias existenciales del país.Se trata de un mensaje conjunto entre la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), a través de monseñor Joaquín Humberto Pinzón, vicario apostólico de Puerto Leguízamo-Solano y presidente de la Comisión Episcopal de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica; la Conferencia de Religiosos de Colombia (CRC), mediante su presidente, el padre Hermann Rodríguez; y la Confederación Latinoamericana de Religiosos de América Latina y el Caribe (CLAR) presidida por la hermana Gloria Liliana Franco Echeverri.Monseñor Joaquín, en representación de los obispos de Colombia, agradece la misión de quienes con su vida consagrada continúan edificando la Iglesia a nivel social y eclesial. “No con pocas obras, con misiones y servicios pastorales que realizan en la diócesis de Colombia, especialmente en las periferias geográficas y existenciales, en donde son signo de vida y esperanza para los pueblos y para las personas”.“Queremos que nuestros carismas que han brotado en la Iglesia para atender las heridas del Cuerpo del Señor, sigan respondiendo con mucha generosidad, como lo hemos hecho durante tantos años, a esas heridas que siguen haciendo doler el corazón y la vida de tantas personas”, agrega el padre Hermann de la CRC.Desde Roma, en donde participa del Primer Encuentro en Preparación al Jubileo de la Vida Consagrada 2025 que se adelantará bajo el lema “Peregrinos de esperanza, por el camino de la paz”, la presidenta de la CLAR, recuerda que los consagrados están llamados, primero, a "ser en la Iglesia misión y profecía". Esto, afirma la religiosa, supone, hoy, más que nunca y en medio de los múltiples desafíos sociales que se presentan en las periferias, revestirse de esa esperanza mientras se camina confiadamente de la mano de Dios.Para esta jornada, que coincide cada año con la fiesta de la Presentación del Señor, la hermana Gloria Liliana, hace también un llamado a estar, cada vez más, en comunión. “Ojalá que celebrar nuestro día nos comprometa a trabajar con otros, a caminar con la conciencia de que somos Iglesia y de que estamos invitados a la sinodalidad, a caminar con otros en pro de un mayor servicio, de una mejor misión. Conscientes de que el protagonista de nuestra vida, el dador de los carismas, es el Espíritu y que Él nos acompaña al caminar”, agrega la religiosa quien es, además, madre sinodal.Guía para que las parroquias se unan a la celebración de la jornadaPara la celebración de esta XXVIII Jornada Mundial de la Vida Consagrada en Colombia, el departamento de Vida Consagrada del Secretariado Permanente del Episcopado, anima a todos los fieles en la oración. De esta manera, afirman, “se puede favorecer la comunión y la acción de gracias por el abnegado trabajo que los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica realizan en su tarea evangelizadora, fruto de la oración y de la viva práctica de la caridad”.Para ello, se ha preparado un subsidio litúrgico de celebración que acoge como lema “Consagrados de Colombia se preparan para el Jubileo 2025: “La sed de reconciliación”, la misma consigna que se propone como inspiración para todas las comunidades religiosas presentes en el país.Vea el mensaje completo aquí:

Mar 30 Ene 2024

El papa Francisco pide oración y compromiso con quienes sufren enfermedades terminales

El papa Francisco pide a la Iglesia Universal que, en el mes de febrero, de manera especial, ore y reflexione sobre la necesidad de acompañar a los enfermos terminales. La petición se dio a conocer en el video publicado este martes 30 de enero a través de la Red Mundial de Oración del Papa.El llamado coincide con la celebración de la XXXI Jornada Mundial del Enfermo que se llevará a cabo el próximo domingo 11 de febrero y que tendrá como lema «Cuida de él». La compasión como ejercicio sinodal de sanación.“A veces no pueden hablar, a veces pensamos que no nos conocen, pero si les tomamos la mano, entendemos que están en sintonía”, expresa el Santo Padre.En su mensaje, el pontífice hace énfasis en que “incurable” e “in-cuidable”, no significan lo mismo. “Curar si es posible, cuidar siempre”, añade haciendo referencia a San Juan Pablo II, quien en 1992 instituyó esta jornada, en memoria litúrgica de la Virgen de Lourdes.El papa Francisco recuerda la importancia de que las personas que sufren a causa de estas condiciones de salud reciban siempre los cuidados y el acompañamiento necesarios, tanto a nivel médico, como humano, psicológico y espiritual. Para esto, afirma, se necesita un verdadero compromiso. También se refiere a la necesidad de apoyar a las familias, pues su rol en este tipo de situaciones, es decisivo.A propósito de los cuidados paliativos, el Santo Padre refiere que “garantizan al paciente no solo la atención médica, sino también un acompañamiento humano y cercano”.Vea a continuación el videomensaje del papa Francisco:

Vie 26 Ene 2024

Sé quién eres: el Santo de Dios

CUARTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIOEnero 28 de 2024Primera Lectura: Dt 18,15-20Salmo: 95(94),1-2.6-7ab. 7c-9Segunda Lectura: 1Co 7, 32-35Evangelio: Mc 1, 21-28I. Orientaciones para la PredicaciónIntroducción• Cristo resucitado se hace presente cuando la asamblea litúrgica, convocada por el mismo Dios, se reúne a escuchar su palabra de amor: él es el profeta que había de venir y a quien debemos escuchar.•Jesús hace cercano el Reino de Dios a cada persona y esto lo hace con palabras y obras: con su palabra aleja de nosotros el mal y con sus obras nos transforma en hombres nuevos a su imagen.•La autoridad de Jesús sobresale en la palabra de Dios de este domingo. Se trata de una coherencia entre enseñanza y vida que no solo asombra a todos los que lo escuchan, sino que debe animarnos a aprender de su testimonio.1. Lectio: ¿Qué dice la Sagrada Escritura?Yahvé le promete a Moisés que suscitará un profeta semejante a él. En efecto, aquel elegido del Señor, salvado de las aguas y destinado para liderar la liberación del pueblo de Israel, aparece presentado aquí como el «proto-profeta», el modelo de cada uno de los que ejerzan la misión de profetizar en nombre de Yahvé. A partir de esta promesa, los judíos han comprendido que el mesías esperado correspondería a un nuevo Moisés.No se puede olvidar que, en el contexto de la antigua alianza, la misión del profeta posee un carácter único. De labios del profeta el pueblo está llamado a escuchar la palabra de Dios para que el pueblo se mantenga fiel al pacto: escuchar al profeta es escuchar al mismo Dios en persona. En ese sentido aparece la invitación del salmo responsorial para ayudarnos a meditar en la primera lectura: «escuchen la voz de Dios, no endurezcan el corazón» (cf. Sal 94, 8). Ahora bien, en los comienzos de la predicación apostólica, Pedro contempla en Jesucristo, resucitado de entre los muertos, el cumplimiento de la promesa hecha a Moisés y también a los demás profetas: la llegada del tiempo de la restauración universal (cf. Hch 3,17-24).Siguiendo con la lectura semicontinua de la 1ª. carta a los Corintios, hoy aparece un fragmento que es continuación del que se proclamó el domingo anterior. Estamos ante una importante catequesis del apóstol Pablo sobre el matrimonio y la virginidad (1Cor 7) en la que sobresale un consejo para el bien de los lectores de la carta, la invitación a vivir en celibato: «… pienso que es cosa buena… quedarse el hombre así» (v. 26). Pablo mismo se ha puesto como ejemplo, dejando claro que es necesario recibir un don (v. 7). En ese orden de ideas, al final de los versículos de esta sección de 1Cor, proclamados hace ocho días, aparece una razón para apartarse del matrimonio: «la representación de este mundo pasa» (v. 31b), por lo que hay que aspirar a las realidades celestiales que son eternas (cf. Col 3,1-2). Todas estas reflexiones van preparando las que se nos proclaman hoy: la persona que opta por vivir célibe podrá dedicarse única y exclusivamente al servicio del Señor y no tendrá que preocuparse por las cosas mundanas ni distraerse en ellas. Se destaca la idea de que el matrimonio, junto con sus alegrías, también trae muchas preocupaciones.Jesús enseñaba con autoridad. Este es el mensaje central del evangelio de este domingo (Mc 1,21-28). Al comienzo de esta perícopa, el evangelista Marcos se refiere al asombro que Jesús suscitaba entre la gente porque su enseñanza era diferente a la de los escribas. Éstos eran considerados como auténticos intérpretes de la Escritura y la ley. Sin embargo, Jesús enseñaba directamente apoyándose en su propia autoridad, mientras que los escribas no respaldaban sus lecciones magisteriales con su propia vida. Por eso, para confirmar la coherencia entre su doctrina y sus obras, Jesús cura un endemoniado en la sinagoga de Cafarnaún, donde estaba predicando. Se pueden distinguir claramente las etapas en las que se desarrolla este prodigio: a) encuentro entre Jesús y el poseído (vv. 23-24); b) exorcismo (v. 25); c) salida del demonio (v. 26); d) reacción de los presentes (v. 27). El demonio llama la atención, queriendo oponerse al designio de Dios, pero el Mesías tiene el dominio del mal; por eso lo vence con el poder de su palabra y es precisamente este poder el que intensifica y enaltece la autoridad de su enseñanza.2. Meditatio: ¿Qué me dice la Sagrada Escritura y que me sugiere para decirle a la comunidad?Proclamando y haciendo visible la cercanía del Reino, Cristo Jesús, el Verbo hecho carne, se revela como profeta y maestro, dos rasgos que confluyen en una acción concreta realizada por el mismo Jesús en la sinagoga: enseñar. Con respecto a la condición profética de Jesús, el libro del Deuteronomio, en la primera lectura de hoy, destaca la misión del futuro Mesías, en cuanto verdadero profeta de Yahvé, remarcando un mandato divino dirigido para todo el pueblo: escuchar a su enviado y elegido, quien hablará en su nombre.Hoy en día estamos seguros de que Jesús está presente en medio de su pueblo y sigue hablando en el nombre del Padre del cielo. Precisamente es Dios Padre quien en la transfiguración nos ha hecho la gran invitación que le da sentido a nuestra vida de discípulos: escúchenlo. Por eso hay que recordar que nuestra vida cristiana comienza a tomar forma auténtica cuando alimentamos nuestra fe con la escucha de la palabra del Señor. Y si el maestro se dedica a enseñar es porque espera que nosotros nos dediquemos a escuchar. Dios no se cansa de insistirnos en su llamado pues él quiere que hagamos la misma opción que hizo María, la hermana de Martha en Betania: que nos sentemos a sus pies y nos pongamos a escucharlo, seguros de que sólo él tiene palabras de vida eterna, luz que ilumina nuestro sendero.Por otra parte, al contemplar a Jesús pasando del predicar al sanar, se cumplan las palabras del salmista: «el Señor todo lo que quiere lo hace» (Sal 134,6). En Jesús todo están armónico y tan coherente que con el poder de la misma palabra con la que estaba enseñando en la sinagoga, con esa misma autoridad, expulsa al demonio. El prodigio consiste en expulsar el mal para que pueda habitar en el ser humano la presencia amorosa de Dios. Es necesario que salga de la vida de cada persona todo lo que tenga que ver con el pecado y con el maligno para que efectivamente el reino de Dios se haga realidad en nuestra vida y lleguemos verdaderamente a amar a Dios sobre todas las cosas. De hecho, hay que recordar que en nosotros hay algo más original que el pecado: lo más original es la gracia porque lo que Dios ha deseado desde siempre es habitar en nosotros y divinizarnos. Como le paso a la muchedumbre del evangelio, no dejemos de asombrarnos porque siguiendo a Cristo estamos empapándonos de su doctrina nueva e igualmente el mismo Señor con su palabra nos transformará en hombres nuevos donde habite presencia.3. Oratio y Contemplatio: ¿Qué suplicamos al Señor para vivir con mayor compromiso la misión? ¿Cómo reflejo en la vida este encuentro con Cristo?Siempre necesitaremos que el Espíritu Santo nos ayude a conocer más y más a Jesús y comprender que sólo él tiene palabras de vida, que él es la Palabra definitiva de Dios, el verdadero profeta que debía venir, el camino que conduce a la casa del Padre. Pidamos al mismo Espíritu consolador que se ponga de nuestra parte y nos anime en todas nuestras capacidades para que todo nuestro ser se disponga en actitud de escuchar y escuchar la voz del Maestro, sabiendo que su palabra no solamente nos da un mensaje para meditar, sino que es palabra eficaz que nos transforma para poder reflejar en nuestra vida que la bondad del Señor está por encima del engañoso poder del mal. _______________________Recomendaciones prácticas:• Ya que acabamos de celebrar el domingo de la palabra de Dios y que hoy el evangelio subraya la dimensión profética del ministerio público de Jesús, es recomendable seguir destacando el signo del evangeliario tanto en la procesión de entrada como el rito mismo de la proclamación del texto evangélico.• El próximo viernes 2 de febrero se celebra la fiesta de la Presentación del Señor y se conmemora la Jornada Mundial de la Vida Consagrada.II. Moniciones y Oración Universal o de los Fieles Monición introductoria de la Misa Queridos hermanos: esta celebración de la eucaristía dominical es verdadero encuentro con Cristo resucitado. Él nos enseña su Evangelio con autoridad y quiere que en nosotros habiten su bondad y su amor. Celebremos alegres este banquete de salvación y oremos por todos los que sufren.Monición a la Liturgia de la PalabraCristo es el verdadero profeta, prometido desde antiguo y enviado por el Padre en la plenitud de los tiempos. Aquí y ahora podremos escuchar su enseñanza y veremos la autoridad de su palabra poderosa que aleja de nosotros el mal para transformarnos en personas nuevas. Escuchemos atentamente esta proclamación. Oración Universal o de los Fieles Presidente: Queridos hermanos: la enseñanza del Señor Jesús que acabamos de escuchar anima la oración de la Iglesia. Por eso, confiados en la inspiración del Espíritu Santo, elevemos al Padre nuestra oración y digamos: R. Oh, Señor, escucha y ten piedad1. Oremos por la santa Iglesia, reunida aquí en el nombre del Señor y extendida por el mundo, para que todos los bautizados tengan la valentía de predicar el Evangelio en todo tiempo y lugar.2. Oremos por los jefes de las naciones para que su autoridad pueda ir más allá de intereses personales, de manera que sus obras consigan el bienestar de los pueblos.3. Oremos por los padres de familia para que, a través de su autoridad en el hogar, se dediquen a amar y ser amados a ejemplo de Cristo.4. Oremos por los que sufren para que el Señor les dé a todos fuerza e ilusión para superar las dificultades que se les presentan en sus vidas.5.Oremos por nosotros, reunidos en esta celebración para que verdaderamente reconozcamos a Cristo como nuestro maestro y profeta y así creamos en su enseñanza que es transformadora y vivificante.Oración conclusivaConcédenos, Padre, el don de sabiduría,y haz que tu Iglesia sea signo concreto de la humanidad nueva,fundada en la libertad y la comunión fraterna.Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor.R. Amén.

Vie 26 Ene 2024

Encuentro con Jesucristo en la Palabra de Dios

Por Mons. José Libardo Garcés Monsalve- Para la gloria de Dios y bien de la Iglesia que amamos, comenzamos el año 2024 con ánimos renovados y fervor pastoral fortalecido, para llevar a cabo la evangelización en nuestra Diócesis de Cúcuta. Damos gracias a Dios por el trabajo pastoral y compromiso apostólico de todos nuestros sacerdotes, diáconos, religiosos, religiosas, seminaristas, agentes de pastoral y fieles de cada una de nuestras parroquias, que hasta el momento se han desgastado dando lo mejor de sí para llevar a todos a Nuestro Señor Jesucristo, respondiendo al mandato de ir en salida misionera a predicar el Evangelio del Señor.Para llevar a cabo esta tarea con la alegría de los hijos de Dios, les garantizo a todos mi oración constante de rodillas frente al Santísimo Sacramento y la celebración diaria de la Eucaristía, con la intención de ayudarles en su crecimiento en la fe, la esperanza y la caridad, respondiendo cada día a la pregunta que Jesús le hizo a Pedro: “Y según ustedes, ¿Quién soy yo?” (Mc 8, 29), afirmando con nuestras palabras y obras: “Tú eres el Cristo” (Mc, 8, 29), profesión de fe que tenemos que transmitir en la misión evangelizadora que estamos desarrollando y que este año vamos a fortalecer en la salida misionera por los sectores de cada una de las parroquias.El desarrollo de nuestro Plan de Evangelización comienza con el primer paso que es el “Encuentro con Jesucristo”, que será la insistencia central en este quinquenio y cada año tendrá un momento especial, fortaleciendo en este año 2024, el encuentro con Jesucristo en la Palabra de Dios y luego en años venideros será encuentro con Jesucristo en la liturgia, en la comunidad, en los pobres y en la Virgen María. Cada año retomará la insistencia del año anterior y será fortalecida con el contenido central de la evangelización que es Jesucristo Nuestro Señor, al que seguimos como camino, verdad y vida, que nos lleva hasta el Padre celestial (Jn 14, 6).Este primer año del proceso evangelizador tiene como énfasis el encuentro con Jesucristo en la Palabra. Al celebrar en este domingo el día de la Palabra de Dios, nos convoca de manera particular a profundizar en el conocimiento de Jesucristo en la Sagrada Escritura que es fuente de vida para cada uno de nosotros creyentes en Cristo y de esa manera caminar juntos fundamentados en la Palabra de Dios, tal como lo enseña Aparecida cuando afirma: “Junto con una fuerte experiencia religiosa y una destacada convivencia comunitaria, nuestros fieles necesitan profundizar el conocimiento de la Palabra de Dios y los contenidos de la fe, ya que es la única manera de madurar la experiencia religiosa” (Documento de Aparecida 226c).En el proceso evangelizador de la Iglesia, pastores y fieles, estamos llamados a caminar juntos, fundamentados en la Palabra de Dios. Así lo expresa Aparecida cuando hace el llamado misionero, “hemos de fundamentar nuestro compromiso misionero y toda nuestra vida en la roca de la Palabra de Dios” (DA 247), para encontrarnos con Jesucristo que es la fuente de nuestra salvación.Por eso el anuncio misionero en nuestra Iglesia Particular lo vamos a centrar y a fortalecer este año en la Palabra de Dios entregada a los fieles en su integridad, como lo ha pedido Aparecida: “Se hace necesario proponer a los fieles la Palabra de Dios como don del Padre para el encuentro con Jesucristo vivo, camino de ‘auténtica conversión y de renovada comunión y solidaridad’.Esta propuesta será mediación de encuentro con el Señor si se presenta la Palabra revelada, contenida en la Escritura, como fuente de evangelización” (DA 248).Desde el Bautismo todos somos discípulos misioneros del Señor que anhelamos nutrirnos con el pan de la Palabra y el Pan de la Eucaristía, para ir en salida misionera comunicando el mensaje de salvación a todos los hermanos.Palabra de Dios y Eucaristía siembran en el creyente las semillas del Reino de Dios, que le permite llenarse de fervor pastoral, para comunicarlo con la vida y las palabras en un deseo sincero de evangelizar, transmitiendo el mensaje de la salvación a todos. Un deseo evangelizador que brota del conocimiento y amor por la persona, el mensaje y la Palabra de Jesucristo. Así lo enseña el Papa Francisco cuando afirma: “La Palabra de Dios escuchada y celebrada, sobre todo en la Eucaristía, alimenta y refuerza interiormente a los cristianos y los vuelve capaces de un auténtico testimonio evangélico en la vida cotidiana. La Palabra proclamada, viva y eficaz, prepara para la recepción del Sacramento, y en el Sacramento esa Palabra alcanza su máxima eficacia” (Evangelii Gaudium 174).En este compromiso misionero contamos con la protección maternal de la Santísima Virgen María y del Glorioso Patriarca San José, nuestro patrono, quienes escucharon la Palabra de Dios y entregaron su vida para hacer su voluntad. En nuestra respuesta evangelizadora queremos hoy decir como Pedro: “Tú eres el Cristo” (Mc 8, 29), para recibir la gracia y la fortaleza que vienen del encuentro con Jesucristo, para ir en salida misionera a encontrar al hermano entregando la Palabra de Dios, acercarlo a Nuestro Señor Jesucristo y comprometerlo a vivir sin temor la alegría del Evangelio.En unión de oraciones,reciban mi bendición.+José Libardo Garcés MonsalveObispo de la Diócesis de Cúcuta