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Iglesia

Vie 25 Nov 2022

27 de noviembre | Lectura del santo Evangelio según san Mateo 24, 37-44

Estén en vela para estar preparados. EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando venga el Hijo del hombre, pasará como en tiempo de Noé. En los días antes del diluvio, la gente comía y bebía, se casaban los hombres y las mujeres tomaban esposo, hasta el día en que Noé entró en el arca; y cuando menos lo esperaban llegó el diluvio y se los llevó a todos; lo mismo sucederá cuando venga el Hijo del hombre: dos hombres estarán en el campo, a uno se lo llevarán y a otro lo dejarán; dos mujeres estarán moliendo, a una se la llevarán y a otra la dejarán. Por tanto, estén en vela, porque no saben qué día vendrá su Señor. Comprendan que si supiera el dueño de casa a qué hora de la noche viene el ladrón, estaría en vela y no dejaría que abrieran un boquete en su casa. Por eso, estén también ustedes preparados, porque a la hora que menos piensen viene el Hijo del hombre.». Palabra del Señor.

Jue 24 Nov 2022

La economía a la luz de las propuestas de la Iglesia católica y su diálogo con otros sectores

En el marco del desarrollo de los espacios de diálogo, encuentro y reflexión propuestos en el Noveno Congreso Nacional de Reconciliación, durante la jornada de la tarde del 23 de noviembre, se realizó el conversatorio “La economía a la luz de las propuestas de la Iglesia Católica y su diálogo con otros sectores”. En este espacio, moderado por Gonzalo Murillo (Ecopetrol), participaron Catalina Martínez (representante de la ANDI), Tatiana Rivera (representante de la Diócesis de Pasto), Arturo Luna (representante de La Economía de Francisco) y Jairo Arias (productor del Caquetá). A través de un vídeo, también formó parte intervino la doctora Cristina Calvo, integrante del Comité que anima la propuesta de economía de Francisco. A partir del tejido de un diálogo entre las distintas perspectivas de las personas participantes, se buscó abordar las relaciones existentes entre la economía y la realidad social a través de la respuesta a preguntas como: ¿Qué tipo de desarrollo puede ser favorable para el bien común y la construcción de paz? ¿Cuál es la responsabilidad del sector empresarial del país en los procesos de reconciliación? ¿Qué tipo de economía podría favorecer mayor inclusión y qué rol podrían jugar empresas colombianas en estas transformaciones? ¿Cuál es la mirada de la Iglesia católica frente a esto?. La disertación se abrió recordando la reflexión del Papa Francisco, a través de la cual buscaba interpelar especialmente a los jóvenes, respecto a la necesidad de transformar las relaciones económicas de nuestras sociedades actuales para concebir y hacer posibles formas alternativas que consideren el desarrollo humano integral y el cuidado de la casa común como pilares fundamentales: “Una nueva economía, inspirada en Francisco de Asís, hoy puede y debe ser una economía amiga de la tierra y una economía de paz”. A partir de este horizonte iluminado por las palabras del Papa Francisco, en la tarea de construir modelos económicos alternativos, se resaltó la necesidad de aspectos como mirar la economía de sectores empobrecidos para comprender profundamente raíces de transformaciones necesitadas, recuperar el valor del trabajo, y la encarnación, es decir, la posibilidad de convertir en reales, aplicables y efectivas las ideas de transformación que nuestras sociedades demandan. De forma general, teniendo en cuenta la realidad de Colombia, uno de los países más desiguales del mundo, entre otros aspectos, se resaltó que la labor de las empresas en Colombia no puede ser ajena a los procesos de construcción de paz y reconciliación que atraviesan al país; se señaló la urgencia de tomar medidas para evitar el colapso de nuestra casa común; se reiteró la necesidad de construir una democracia participativa y horizontal; y se evidenció que el rol de las mujeres también debe ser replanteado desde las apuestas de economías alternativas y los modos de relacionamiento que estas plantean, para ampliar sus espacios de participación y desarrollo de actividades económicas. A través del diálogo, se evidenció que las propuestas económicas que se enmarcan en las posibilidades que abre la doctrina social de la Iglesia católica y las reflexiones del Papa Francisco permiten recoger estas demandas, al postular economías alternativas que contribuyan a la paz y al cuidado de la casa común, así como al desarrollo integral del ser humano. Sin duda, siguen siendo muchos los retos y las necesidades de transformación que la realidad social, política, económica y cultural de nuestro país exige de la economía para hacer posible la apertura de caminos de paz y reconciliación.

Jue 24 Nov 2022

La caridad es la vocación cristiana

Por: Monseñor José Libardo Garcés Monsalve - Desde hace ya varios años el Papa Francisco nos ha convocado hacia el final del año litúrgico a celebrar una Jornada Mundial de los Pobres, con el propósito de sensibilizar a todos los cristianos, para que produzcan el fruto maduro de la fe y la esperanza en Jesucristo Nuestro Señor, en la manifestación de la caridad, que es el culmen de las virtudes cristianas y la puerta de entrada al Cielo. “Vengan benditos de mi Padre, tomen posesión del Reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. Porque tuve hambre y me dieron de comer, tuve sed y me dieron de beber; era un extraño, y me hospedaron; estaba desnudo, y me vistieron; enfermo y me visitaron; en la cárcel, y fueron a verme” (Mt 25, 34-36), concluyendo que cada vez que un cristiano hace esto por un hermano necesitado, lo está haciendo por el mismo Jesucristo. La caridad es una virtud que se cosecha en el corazón del cristiano que ama a Dios con todo el corazón, con toda la mente, con todas las fuerzas, y con todo el ser, ama al prójimo como a sí mismo, sabiendo que en estos dos mandamientos está todo lo que necesita un creyente para salvarse (cf. Mt 22, 37-40), concluyendo con esta verdad que la caridad no es una acción social que pertenece a una organización de beneficencia, sino que es una expresión del amor de Dios que se hace presente a través de un creyente que ha entendido su compromiso cristiano en la comunidad de creyentes que es la Iglesia, que se deja guiar por la fe que actúa por el amor (cf. Ga 5, 6). La caridad es la vocación que tiene el cristiano para mirar el dolor, el sufrimiento, la enfermedad y la herida del otro que está tirado en el camino y tenderle una mirada de amor, como manifestación del amor que viene de Dios. Jesús lo enseña en la parábola del “Buen samaritano”, cuando le responde al experto en la ley que le pregunta quién es el prójimo (cf. Lc 10, 30-36), invitándolo a hacer otro tanto, haciéndose prójimo del que sufre sin preguntar por su identidad política, social o religiosa. Así lo reitera el Papa Francisco en ‘Fratelli Tutti’: “La propuesta es la de hacerse presentes ante el que necesita ayuda, sin importar si es parte del propio círculo de pertenencia” (FT 80), invitándonos a todos a hacernos prójimos y a “dejar de lado toda diferencia y, ante el sufrimiento, volvernos cercanos a cualquiera” (FT 80). Vivir la caridad cristiana no es un aprendizaje que se recibe en las academias donde se llena el cerebro de la ciencia humana, sino que es fruto de la fe en Dios que nos enseña a amar al prójimo con el corazón de Jesús, sin cálculos humanos, reconociendo al mismo Jesucristo en todos los que sufren, tal como nos lo ha enseñado en el Evangelio al hablar de la ayuda que damos a los demás (cf. Mt 25, 31-46), descubriendo que “para los cristianos, las palabras de Jesús implican reconocer al mismo Cristo en cada hermano abandonado o excluido” (FT 85). De esta manera, entendemos que el cristiano tiene vocación a la caridad porque está en unión íntima con Dios, que lo mueve desde dentro a ser un instrumento en sus manos para realizar su obra con los que están caídos en el camino de la vida. La caridad nace de un cristiano contemplativo, que se pone de rodillas frente al Señor y allí encuentra la motivación más profunda para volverse prójimo del que sufre. El Papa Francisco expresa esta verdad cuando afirma: “La altura espiritual de una vida humana está marcada por el amor, que es ‘el criterio para la decisión definitiva sobre la valoración positiva o negativa de la vida humana’” (FT 92), concluyendo que la caridad es posible en un cristiano que se relaciona con Dios a través de la oración y que se mantiene en la gracia y en la paz del Señor y la transmite a los que están en su entorno. En todos los ambientes sociales queremos la paz y hacemos cálculos humanos para tenerla, llegando a convertirla en un negocio mezquino, olvidando que la paz es un don de Dios que brota de la caridad y desde la caridad, que es amor de entrega total se puede lograr que el corazón del hombre se transforme y transforme la sociedad, ya que “la caridad, con su dinamismo universal, puede construir un mundo nuevo, porque no es un sentimiento estéril, sino la mejor manera de lograr caminos eficaces de desarrollo para todos” (FT 183), de tal manera que la caridad no es solamente el centro de todas las virtudes, sino que es también “el corazón de toda vida social sana y abierta” (FT 184). Con esto entendemos que la caridad va mucho más allá de una jornada en la que servimos a los pobres. La caridad es el sello del cristiano y está todo el tiempo en el corazón. La caridad es la manera de ser del cristiano, que en el camino de la vida se agacha a sanar las heridas de quien está caído en el camino de la vida. Sigamos adelante construyendo juntos un mundo nuevo y mejor desde la caridad, que es el amor de Dios que se hace presencia a través de cada uno de los cristianos, que peregrinamos en la santa Iglesia de Dios, hasta llegar un día a la salvación eterna. Que la Santísima Virgen María, madre de la caridad y el glorioso Patriarca san José, custodien la fe y esperanza en nosotros, que produce el fruto maduro de la caridad y agradecidos, sigamos adelante. En unión de oraciones, reciban mi bendición. + José Libardo Garcés Monsalve Obispo de la Diócesis de Cúcuta

Jue 24 Nov 2022

Villavicencio, sede de los talleres “Iglesias Particulares Seguras y Protectoras”

Dando continuidad al Proyecto “Iglesias Particulares Seguras y Protectoras”, promovido por la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), los días 25 y 26 de noviembre se estará realizando en la ciudad de Villavicencio una jornada de talleres orientados a facilitar herramientas y espacios de reflexión que permitan a las Jurisdicciones implementar políticas de protección y prevención de abusos sexuales contra menores y personas vulnerables dentro del entorno eclesial. El episcopado ha dicho además que, será un espacio para socializar las Líneas Guía: “Cultura del Cuidado en la Iglesia Católica Colombiana”, documento aprobado por los obispos colombianos en su 113 Asamblea Plenaria del 2022. Estas jornadas que se iniciaron en el mes de octubre y que se extenderán hasta junio del 2023 por todo el territorio nacional, son posibles gracias al auspicio de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos. Dentro de la temática a abordar se encuentra: Programas para la protección de menores de edad; atención a las víctimas y sus familias; prevención de los abusos de poder, de conciencia y sexual; fundamentos jurídicos canónicos y civiles; y comunicación institucional. En esta ocasión participarán las Jurisdicciones Eclesiásticas que hacen parte de la Provincia Eclesiástica de Villavicencio, son ellas: Arquidiócesis de Villavicencio, las Diócesis de Granada y San José del Guaviare; y los Vicariatos Apostólicos de Puerto Carreño y Puerto Gaitán; además se suman a este proceso de formación los Vicariatos Apostólicos de Inírida y Mitú. El proyecto contempla capacitar a más de 1200 personas, para luego poder consolidar los equipos diocesanos de protección de menores de edad, de atención a víctimas, implementación de protocolos de prevención y a los responsables de adelantar los procesos canónicos. Los talleres se realizarán en la sede de la Universidad Santo Tomás y contarán con el acompañamiento de los miembros del Consejo Nacional para la Cultura del Cuidado de la CEC. En esta oportunidad se espera la participación de unas 440 personas entre sacerdotes, seminaristas, religiosos y religiosas, miembros de los consejos de protección de menores de estas Iglesias particulares, trabajadores de las curias diocesanas, docentes, agentes de pastoral familiar y otros evangelizadores pertenecientes a movimientos apostólicos y parroquias. Para mayor información sobre el desarrollo del proyecto, contactar con la señora Diana María Guzmán, coordinadora del Proyecto Iglesias Particulares Seguras y Protectoras al correo electrónico: [email protected] / Cel.: 313 3211877

Jue 24 Nov 2022

Con un llamado a no perder la esperanza concluye segunda jornada del IX Congreso Nacional de Reconciliación

La jornada del segundo día del IX Congreso Nacional de Reconciliación, inició con una eucaristía presidida por monseñor Juan Carlos Barreto, obispo de Soacha y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social. Seguido, monseñor Omar Sánchez, arzobispo de Popayán y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, presentó su saludo en nombre de las directivas de la Institución y celebró ver la nutrida participación de tantas personas en representación de los diversos territorios. “Me alegra ver muchas rostros conocidos y otras personas nuevas que se suman a esta tarea de la paz, indistintamente de su filiación, pero que tienen estas voluntades impecables por ayudarle al país a salir de estas violencias, construyendo y emprendiendo caminos que lleven a la reconciliación”, afirmó el prelado. Observó que todas experiencias unidas en este Congreso, había que sumarlas inteligentemente con constancia y sin cesar para elaborar propuestas muy concretas que se aterricen de acuerdo a las distintas realidades del país. Subrayó que cada paso que da la Conferencia Episcopal en la dirección de la reconciliación y la paz, siempre está bordeado de grandes acciones que se vienen haciendo por años y que se han ido estructurando en procesos que van llegando a una maduración muy alta. “Estos congresos dan un aire de voluntad nueva, un aire de esperanza y saberse no solo en el territorio acompañados de la Iglesia, sino entender que la Iglesia está en el marco general de la nación en los lugares más difíciles”. Vislumbró que los participantes volverán a sus territorios recuperados en su vacación de ser constructores de paz y con una visión más general de lo que pueden lograr “yo creo que cada paso que se da, como en este congreso, va sumando en una construcción de paz que el país ya no puede postergar”. Criterios para la construcción de paz Luego, monseñor Juan Carlos Barreto, presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social – Caritas Colombia, ofreció la ponencia titulada: “Pastoral para la paz y la reconciliación”, basada en el libro con este mismo nombre, que la Conferencia Episcopal publicara en su momento y que brinda algunas orientaciones del pensamiento y de la acción de la iglesia en este campo. El prelado advirtió que no se trata de un texto que ofrece un recetario concreto de las decisiones coyunturales y pequeñas que se deben tomar en algunos momentos, más bien agregó, son unos criterios generales que requieren adaptaciones y complementos en cada Jurisdicción Eclesiástica, asumidos desde una dimensión territorial, dados los contextos particulares, pero sin perder la síntesis general que los debe unir. Afirmó que, es constante escuchar interrogantes como cuál es la posición de la Iglesia en temas de paz, a los procesos de paz, si la Iglesia tiene un proyecto de paz, o cómo deben actuar los agentes de pastoral frente a este tipo de temas, a lo que explicó que este documento da respuesta a estas inquietudes, pero teniendo en cuenta que son orientaciones para la acción evangelizadora. “Nosotros somos una organización que fundamentalmente está animada por el espíritu de evangelización. Evangelizamos los diferentes aspectos del mundo: la educación, la salud, la política y por eso la Iglesia no puede ser ni politizada, ni despolitizar. La acción evangelizadora de la Iglesia tiene que ir en la perspectiva de evangelizar la sociedad, la economía, la política, la cultura y aquí nos quedan unas tareas para las jurisdicciones eclesiásticas, para las provincias eclesiásticas, para las regiones del país, que nos articulemos para que no quedemos aislados”. Monseñor Barreto enumeró algunos criterios que desde lo eclesial son esenciales para la construcción de paz. Son ellos: La defensa de la vida en todas sus expresiones; la identidad propia; el discernimiento comunitario bajo la acción del Espíritu Santo; el diálogo y amistad social; el compromiso de todos los sectores eclesiales; la complementariedad entre las orientaciones de la Conferencia Episcopal y los planes de pastoral de las jurisdicciones eclesiásticas; la formación de agentes de pastoral en Doctrina Social de la Iglesia, la independencia y sentido crítico; evitar las tentaciones, las estructuras organizativas; y la animación sinodal hacia la paz frente a los creyentes, autoridades, sociedad civil y actores violentos. Así también, evocó la invitación del Papa Francisco a no dejarnos robar la esperanza y aseveró que la Iglesia desde su accionar pastoral debe seguir aportando a esta tarea de búsqueda de la paz. "La paz es posible, necesaria y es la principal responsabilidad de todos. No es un hecho aislado, eso que lo hagan allá, eso es una cuestión del Gobierno y de la guerrilla. No, es una cuestión de todos dice el Papa, es la principal responsabilidad de todos". Antes de concluir su intervención, afirmó que la Iglesia en Colombia con este documento renueva su opción por la paz y la reconciliación, "es un camino largo y hermoso, en búsqueda de la paz integral y el Señor está a nuestro lado para ayudarnos en esta tarea".

Mié 23 Nov 2022

Iglesia católica presentará el Programa Centralidad de la Niñez

Este jueves 24 de noviembre a las 10:00 a.m. en el contexto de la celebración del Día Universal de los Derechos de las Niñas y los Niños, la Iglesia presentará el programa Centralidad de la Niñez, con el lema: “100% ternura, cero violencia”. El Programa Centralidad de la Niñez es una iniciativa regional, en América Latina y el Caribe, que convoca los esfuerzos de diversas organizaciones con el fin de promocionar la vida plena y el desarrollo integral de las niñas, los niños y los adolescentes. La iniciativa es apoyada por el Consejo Episcopal Latinoamericano –CELAM- , y en Colombia participan: la Conferencia Episcopal de Colombia, la Conferencia de Religiosos y Religiosas de Colombia –CRC-, la Confederación Nacional Católica de Educación -CONACED-, Fe y Alegría Colombia, Pastoral Social Caritas Colombia, el Movimiento con la Niñez y la Juventud, y World Vision Colombia. Algunos de los objetivos que se proponen las organizaciones que animan este programa son: • Compartir las experiencias exitosas en la prevención de la violencia contra la niñez, la promoción de sus derechos y la potencialización de sus capacidades desde las comunidades de fe. • Identificar oportunidades y estrategias para la incidencia política a favor de la prevención de las violencias contra la niñez y la promoción de sus derechos, visibilizando sus voces y participación. • Consolidar procesos de formación al personal que acompaña a niñas, niños, adolescentes y sus familias aprovechando el saber acumulado de las organizaciones que integran la red del programa. • Fortalecer espiritualmente a niñas, niños y adolescentes, mediante el apoyo a las pastorales y programas tanto a nivel nacional como regional. Estos objetivos se proponen considerando la situación actual del país en términos de la violencia que vienen sufriendo las niñas y los niños. Según el boletín de medicina legal, entre enero y septiembre del presente año, han ocurrido 469 casos de homicidio de niñas, niños o adolescentes, menores de 17 años. Los casos de lesiones por violencia intrafamiliar, para las mismas edades y periodo, son de 5.048. Lo cual significa que, en promedio, 18 niños o adolescentes sufren la violencia física cada día en su propio entorno familiar. Teniendo en cuenta que estas cifras solo hacen referencia a los casos que llegan a la instancia de medicina legal, es razonable suponer que la realidad va mucho más allá de estas cifras. Promover una cultura del trato tierno y amoroso hacia las niñas, niños y adolescentes es un propósito compartido por las organizaciones que participan del programa, al tiempo que se convierte en invitación a la sociedad en general para aunar esfuerzos para transformar y superar toda forma de violencia contra la niñez. Esta jornada se realizará en la sede de la Conferencia Episcopal (Cra. 58 No. 80-87) y estará a cargo de Marco Laguatasi de Ecuador, asesor regional del programa de niñez.

Mié 23 Nov 2022

Así fue la primera jornada del IX Congreso Nacional de Reconciliación

Este martes 22 de noviembre, con la participación de más de 450 personas venidas de las diferentes regiones del país, se dio inicio al IX Congreso Nacional de Reconciliación, que lleva como lema: “Abriendo caminos de diálogo y esperanza”. Un espacio que busca reflexionar acerca de los aportes que realiza la Iglesia Católica, los retos y desafíos en términos de reconciliación y construcción de paz, a la luz del evangelio y la doctrina social de la Iglesia. El evento inició con el saludo de monseñor David Shattler, Delegado de la Nunciatura Apostólica, quien señaló que la reconciliación es abrir una puerta a todas las personas que han vivido la realidad del conflicto, esto agregó, representa un compromiso urgente y real de reconstruir el tejido moral de la nación colombiana para poder caminar juntos. El acto de apertura lo hizo monseñor Germán Medina Acosta, obispo auxiliar de Bogotá, quien en nombre de las directivas de la Conferencia Episcopal de Colombia, saludó a los participantes al Congreso. Recordó que la Iglesia continúa con confianza desarrollando su misión de ser signo de comunión y agente de reconciliación por la paz en el país. “De ahí que, vuelva a abrir este espacio de encuentro, reconocimiento, escucha, diálogo, reflexión, discernimiento y búsqueda conjunta de nuevos caminos que nos lleven a la consecución de la paz y la reconciliación en Colombia”. Aseguró que, estos espacios son transformadores en la medida que se dé una apertura y disposición por parte de cada persona que busca siempre el bien común. Y agregó que, “Nos corresponde ser en la cotidianidad de nuestras relaciones e interacciones ‘artesanos de la Paz’ y, también, de forma organizada, contribuir a la ‘arquitectura de la Paz’”. Compromisos que debemos asumir como Iglesia en este Congreso El Padre Rafael Castillo Torres, director del Secretariado Nacional de Pastoral Social, durante su intervención enumeró múltiples aspectos negativos que considera han quitado la posibilidad de una construcción colectiva de sociedad, generando esto más atraso, desigualdad y contradicciones sistemáticas que profundizan los problemas fundamentales. Entre los fenómenos mencionados están: la violación al derecho fundamental a la vida, el conflicto armado, el narcotráfico, el desplazamiento, la polarización, la superposición de intereses privados, la falta de desarrollo pleno de las capacidades de cada persona, entre otros. Frente a este panorama el directivo aseveró que espera que luego de este Congreso, los participantes se vuelvan multiplicadores y agentes de paz comprometiéndose a evangelizar integralmente como camino de reconciliación. Además, enumeró los compromisos que como Iglesia se sugieren luego de este congreso: Como hombres y mujeres rechazar la violencia y toda forma de mentalidad guerrerista; impulsar un acuerdo humanitario capaz de abrir corredores humanitarios que puedan salvar vidas y proteger a las comunidades; seguir trabajando en programas pastorales de promoción humana; fortalecer la pastoral de la consolación y la reconciliación nacional; insistir en el llamado a todas las partes comprometidas en el conflicto social y armado; y seguir insistiendo en la acción y oración de fortalecimiento de todas las actividades que la Iglesia realiza en la consecución de la paz. “la Reconciliación y la paz sí son posibles” Monseñor Rubén Darío Jaramillo, obispo de Buenaventura, presentó la ponencia titulada: "El camino de la reconciliación en la sociedad Colombiana". Su intervención fue una muestra de esperanza y gozo al compartir el trabajo que la Iglesia y otras instancias han venido adelantando con las comunidades y los actores violentos. Observó que esta ciudad estaba catalogada como una de las trece ciudades más violentas del mundo. Entre enero y agosto de este año se contaban con 102 homicidios, pero de septiembre a la fecha solo una persona fue asesinada. "Hoy estamos empezando a tener un nuevo amanecer en el puerto. Ha vuelto el grito de gol de los jóvenes en las canchas de barro en cualquier terreno baldío. La vida nocturna ha regresado con sus carcajadas, bebidas tradicionales como el viche, el arrechón o el tumbacatres", afirmó el prelado. Monseñor Jaramillo indicó que una de las razones que ha hecho que bajen los asesinatos y desaparezcan las fronteras invisibles, ha sido que los actores violentos se “cansaron de la guerra” y están convencidos que ese no es el camino por el que han marchado y agregó que los violentos, "no desean que sus hijos vayan a terminar engrosando las listas de los más buscados o que tengan que vivir “enfierrados” y con miedo". Explicó que desde inicios del mes de septiembre de este 2022, la Iglesia comenzó a realizar un papel facilitador, permitiendo a través del diálogo generar confianza y acercamiento entre las bandas allí presentes, para poder luego llegar a las instancias gubernamentales en donde esperan que se les escuche, se les atienda en los pedidos que ellos están haciendo y se les respete la vida. "Estamos en una etapa exploratoria antes de iniciar las mesas de negociación y de atención social. Como obispo mi papel ha sido de acompañante, de facilitador, de gestor de paz para que estos dos grupos (los Shottas y Espartanos), puedan sentarse en la misma mesa. Crear confianza ha sido la clave para que estos enemigos históricos en el territorio hayan decidido “parar la guerra”, sentarse en la misma mesa sin agredirse y tratando de encontrar intereses comunes para construir una sociedad donde ellos puedan ser parte de la solución y no del problema. Y el instrumento ha sido “el diálogo improbable” como mecanismo para unir estos enemigos y contrarios". Acto simbólico: “Buenaventura, potencia mundial en cultura de paz” Del 5 al 7 de diciembre esta ciudad portuaria realizará un acto simbólico denominado “Buenaventura, potencia mundial en cultura de paz”. Durante estos tres días esperan la participación de aproximadamente 600 muchachos pertenecientes a los grupos Schottas y Espartanos, quienes jugarán un campeonato de futbol con 48 equipos de microfútbol masculino y femenino. Además, esperan recibir a más de 3.000 personas y grupos culturales de todo el país para compartir experiencias en los barrios. Esta jornada concluirá el 07 de diciembre con un concierto por la paz que han denominado "Buenaventura ilumina la paz". "Este gran acto simbólico se hará para cobijar y proteger este proceso, seguir generando confianza y demostrar que esta ciudad es el gran laboratorio de paz del país que podría convertirse en el proceso modelo para otras ciudades". Finalmente, pidió elevar una oración por la paz, e invitó a creer que en Buenaventura es posible que se acaben la extorsión y el robo, que "es posible que los enemigos se encuentren y diriman sus diferencias por el camino del diálogo y no el de la exhibición de la fuerza de las armas, porque valiente es dialogar". Desarrollo de la agenda La agenda del Congreso de este primer día se desarrolló en principio con los saludos protocolarios, para pasar luego a la exposición de la ponencia: “El camino de la reconciliación en la sociedad colombiana”, por parte de monseñor Rubén Darío Jaramillo, obispo de Buenaventura. Seguido se dio paso al Panel: “De agendas territoriales a proyecto compartido de país”, con la participación de: Dra. Rosa Inés Floriano, de la Comunidad de Práctica “Caminando hacia la paz”; el padre Fernán González,SJ del CINEP; Fernando Sarmiento de Redepaz; Cesar Augusto Montealegre, de FONSA; con la moderación de Javier Rendón, CEIR de la Universidad de La Salle. La tarde arrancó con el Panel: “Retos para la construcción de paz territorial en una sociedad polarizada”, apoyado por los especialistas: David Yepes, Agenda de Desarrollo Rural; Karen Aponzá Sinisterra, del Proceso de las Comunidades Negras –PCN; Tatiana Menjura Roldán, iniciativa de Barómetro, Instituto Kroc; Gustavo Sarmiento Mora, delegado grupo motor PDET, en Florencia – Caquetá; el padre Venazio Mwangi Munyiri, de la Arquidiócesis de Cali. Por último se desarrollaron tres paneles simultáneos, donde los participantes pudieron asistir de acuerdo a sus intereses temáticos. Ellos fueron: * Panel 1: Nuevos Mínimos de Reconciliación y Paz, coordinado por la Comisión de Conciliación Nacional * Panel 2: Ecología integral, territorio y desarrollo * Panel 3: Participación y diálogo social, y desarrollo territorial La jornada del primer día concluyó con la eucaristía presidida por monseñor Orlando Olave, obispo de la Diócesis de Tumaco. Organizadores El congreso es coordinado por la Conferencia Episcopal de Colombia, a través de la articulación del Secretariado Nacional de Pastoral Social-Cáritas Colombiana, la Comisión de Conciliación Nacional (CCN) y la Delegación para las Relaciones Iglesia – Estado. Se viene realizando en Bogotá en el Hotel Casa dan Carlton y está siendo transmitido a través de las redes sociales de estas organizaciones..

Mar 22 Nov 2022

Iglesia colombiana anima celebración de la XXXVII Jornada Mundial de la Juventud

El pasado 20 de noviembre, en la Solemnidad de Cristo Rey, se dio inicio a nivel diocesano a la celebración de la XXXVII Jornada Mundial de la Juventud 2022, que lleva por lema: “levantarse y partir”, y que es, precisamente, el tema de la JMJ que está prevista en Lisboa el próximo 2023: «María se levantó y partió sin demora» (Lc 1, 39). En este contexto, varias Jurisdicciones Eclesiásticas del país, ya iniciaron el camino de preparación que les llevará a celebrar esta Jornada en Lisboa. Con numerosas iniciativas como eucaristías, actos celebrativos, testimonios, música y fiestas de fe arrancó a nivel diocesano la JMJ. Presentamos algunos registros de las actividades. Arquidiócesis de Florencia Durante toda la semana, más de mil jóvenes y familias participaron en las diferentes actividades que se realizaron en el marco de la #SemanaArquidiocesanaDeLaJuventud, la cual culminó con una eucaristía presidida por monseñor Omar de Jesús Mejía Giraldo. Arquidiócesis de Bucaramanga Monseñor Ismael Rueda Sierra, arzobispo de Bucaramanga, presidió la eucaristía en la Solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo, Rey del Universo; con la institución y envío de ministerios laicales y la celebración arquidiocesana de la Jornada Mundial de la Juventud, desde la Catedral Metropolitana de la Sagrada Familia. Provincia Eclesiástica de Popayán Más de 300 jóvenes de las distintas jurisdicciones de la provincia de Popayán como son: la arquidiócesis de Popayán, las diócesis de Pasto, Ipiales y Tumaco, y de los vicariatos de Guapi y Tierradentro, se dieron cita este 19 de noviembre en las instalaciones de casa Estrella del mar, en la ciudad de Tumaco, desde donde marcharon en medio de la alegría que les inunda este gran encuentro de la Jornada Inter diocesana de la Juventud. Este espacio fue una invitación a los jóvenes a vivir y experimentar el amor de Dios en sus vidas a través de la adoración de Jesús Eucaristía y predicación kerigmática. Como un acto de entrega y agradecimiento por la vida de los jóvenes monseñor Orlando Olave Villanoba, obispo de la Diócesis de Tumaco, presidio la eucaristía de cierre. Arquidiócesis de Medellín Con el lema: ¡Levántate y construye una civilización del amor!, esta Iglesia particular, celebró el pasado 09 de noviembre la Jornada Arquidiocesana de la Juventud, un espacio donde niños y jóvenes se dieron cita para compartir diversos escenarios y experiencias. En el evento participó con una eucaristía, el arzobispo de esta ciudad, monseñor Ricardo Tobón Restrepo. Episcopado anima la celebración de la JMJ Por su parte, Sor Arelis Gaviria, directora del Departamento del Estado Laical del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC), animó a los jóvenes a vivir con alegría la JMJ 2022 y a vincularse a través de las parroquias a este camino sinodal "siendo protagonistas de la historia de la salvación y así sintamos como Iglesia joven la alegría de caminar juntos". Desde el Vaticano el Papa envió un mensaje a los jóvenes Durante el Ángelus de este domingo, el Papa Francisco, al dirigirse a los jóvenes les recordó que el secreto para mantenerse joven está precisamente en la aplicación de dos verbos: “levantarse y partir”. "No quedarse quietos pensando en uno mismo, desperdiciando la vida tras comodidades y últimas modas, sino mirar hacia lo alto, ponerse en camino, salir de los propios miedos para tender la mano a quien lo necesita”, ha dicho el Papa. Además, agregó que hoy hacen falta jóvenes “realmente ‘transgresores’, no conformistas, que no sean esclavos del celular, sino que cambien el mundo como María, llevando a Jesús a los demás, cuidando a los demás, construyendo comunidades fraternas con los demás, realizando sueños de paz”. Subsidio para la JMJ El Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida preparó un subsidio con orientaciones pastorales de la JMJ y pidió a las iglesias particulares “promover iniciativas en las que los jóvenes donen su tiempo, sus fuerzas a favor de los más pobres, de los marginados, de los descartados por la sociedad”. De este modo, el Vaticano quiere alentar a los jóvenes a convertirse en “protagonistas de la revolución de la caridad y del servicio, capaces de resistir a las patologías del individualismo consumista y superficial”. DESCARGAR SUBSIDIO JMJ 2022