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sinodalidad

Mié 1 Nov 2023

Arquidiócesis sinodal y misionera

Por Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez - El pasado 29 de octubre culminó en el Vaticano la primera sesión del Sínodo ordinario sobre la sinodalidad. La segunda sesión se realizará en octubre de 2024. Ha sido un tiempo maravilloso durante el cual el Papa, con los miembros de la asamblea sinodal, han hecho el ejercicio de orar, de dialogar, de escucharse y de proponer, dejando espacio a la acción del Espíritu Santo que, seguramente, marcó las líneas diciéndoles a ellos y a nosotros lo que quiere para la Iglesia de hoy y de mañana.PRIMERO: Los tiempos de la Iglesia y del mundo no son fáciles. Los retos siguen siendo enormes. La llamada de la Iglesia a caminar juntos, sinodalmente, daría la impresión que no ha sido entendida ni valorada. Es una llamada que va más allá de lo religioso, para que la humanidad comprenda que el único camino de avanzar, de crecer y de superar los problemas es caminar juntos, aún en medio de la diferencia.Las noticias de las acciones bélicas entre diversos pueblos del mundo, y en nuestros territorios, no solo nos llenan de dolor, sino que nos deben llenar de vergüenza, pues cómo es posible entender, que en un mundo donde el desarrollo científico, industrial social y de la conciencia de los derechos y la dignidad de los seres humanos son tan evidentes, nos podamos ver sumidos en una hecatombe de estas dimensiones. Es como decir que el ser humano no aprende las lecciones de vida, con guerras por doquier, guerras que solo dejan a su paso destrucción, muerte y desolación.Es una pena que deba iniciar este editorial haciendo referencia a lo que desde mediados del pasado mes de octubre se está viviendo en el medio oriente, con la guerra entre el grupo Hamás e Israel, y el continuar de la guerra entre Rusia y Ucrania, entre otros. En palabras del Papa Francisco, estamos sumidos en una guerra mundial fraccionada.Es nuestro deber orar. No nos podemos cansar de hacerlo. Como arzobispo los exhorto para en todo momento, en los templos y las casas, se hagan oraciones y súplicas al Señor, para que nos regale la paz que tanto necesitamos.Pero en medio de estas realidades, que tocan también a nuestro país, que acaba de celebrar comicios lectorales regionales, también está el llamado para que los nuevos gobernantes (gobernadores, alcaldes, miembros de las asambleas departamentales y concejos municipales y los ediles) acojan este mensaje de unidad, que sean valientes para trabajar y caminar juntos en favor de las comunidades a las que están llamados a servir y sean artesanos de la paz.SEGUNDO: Nuestra Arquidiócesis está de fiesta. Después de varios años de arduo trabajo se ha podido concluir una primera etapa de las asambleas sinodales. En ellas, cientos de fieles, en la parroquias y grupos de clérigos, religiosos, religiosas, movimientos apostólicos, familias y jóvenes, se pusieron a la escucha de lo que el Espíritu Santo nos estaba diciendo, para discernir acerca de nuestra historia eclesial, y vislumbrar los planes y acciones pastorales que animen la Iglesia que peregrina en la Arquidiócesis de Cali. Sea esta la oportunidad para agradecerles a todos. Estoy seguro que sus aportes harán más fructífera la misión de nuestra Iglesia.Para recoger estos trabajos y socializarlos, tendremos el sábado 11 de noviembre, en el Coliseo del Pueblo, la Gran Asamblea Sinodal Arquidiocesana. Allí, en ambiente de oración, testimonio y fiesta, daremos a conocer los resultados y algunas de las conclusiones de las asambleas pastorales parroquiales. Que nadie se sienta excluido de esta fiesta eclesial. A todos los invito.Nos acompañará el Nuncio Apostólico en Colombia, monseñor Paolo Rudelli, quien viene a Cali en su calidad de Legado pontificio, para imponerme también el palio Arzobispal y así concluir, por así decirlo, el protocolo del inicio de mi servicio como arzobispo de Cali, que comencé oficialmente el 8 de diciembre de 2022.El palio, hecho de lana virgen, que es bendecido por el Papa y se coloca en la tumba del apóstol Pedro, es entregado solo por el Papa o por quien él delegue, pues es un signo con el que se fortalece la comunión del arzobispo con el Sucesor de Pedro, y se carga simbólicamente sobre los hombros, la responsabilidad de buscar y cuidar las ovejas, en la caridad, por la senda de la cruz liberadora de Cristo.Los invito pues para que nos acompañen en esta celebración y con el Nuncio Apostólico que representa en nuestra casa al Papa, asumamos el compromiso de trabajar y caminar juntos en la Arquidiócesis. En ella somos llamados a ser discípulos misioneros.+Luis Fernando Rodríguez VelásquezArzobispo de Cali

Jue 2 Mar 2023

Caminemos juntos en la acción misionera

Por: Monseñor José Libardo Garcés Monsalve - En nuestra Diócesis de Cúcuta, siguiendo el llamado del Papa Francisco, estamos en salida misionera y para ello, nos proponemos evangelizar desde el Proceso Evangelizador que la Iglesia nos ha enseñado desde siempre, sintetizando este proceso en tres etapas o momentos esenciales que son: Acción misionera, acción catequética y acción pastoral, reconociendo que estos momentos no son etapas cerradas, sino que tratan de dar el alimento del Evangelio más adecuado para el crecimiento espiritual de cada persona y de cada comunidad parroquial (cfr. Directorio General para la Catequesis #49). En este escrito vamos a dar algunos elementos para comprender la acción misionera en el proceso evangelizador de la Iglesia. Evangelizar significa para la Iglesia, llevar la Buena Nueva de la salvación a todos los ambientes de la humanidad, a los que están cerca y a los que están lejos. El Papa Francisco nos recuerda que la evangelización se debe realizar en tres ámbitos: “En primer lugar, el ámbito de la pastoral ordinaria, animada por el fuego del Espíritu, para encender los corazones de los fieles que regularmente frecuentan la comunidad y que se reúnen en el día del Señor para nutrirse de su Palabra y del Pan de vida eterna. En segundo lugar, el ámbito de las personas bautizadas que no viven las exigencias del bautismo, no tienen una pertenencia cordial a la Iglesia y ya no experimentan el consuelo de la fe. Finalmente, el ámbito de quienes no conocen a Jesucristo o siempre lo han rechazado” (Evangelii Gaudium #14). Estos tres ámbitos deben ser objeto de la entrega pastoral de cada sacerdote y de todos los evangelizadores en la Iglesia. En nuestra Diócesis de Cúcuta, reconocemos que estamos en un contexto misionero y por eso, se hace necesario revitalizar el comienzo del proceso evangelizador que la Iglesia nos enseña, mediante la acción misionera que consiste en el primer anuncio de los misterios del amor y la misericordia del Padre y todo lo realizado en el misterio pascual de Nuestro Señor Jesucristo, que se vive en el corazón del evangelizador, quien a la vez se convierte en testigo de las maravillas que Dios va realizando en la vida personal, con una experiencia de fe comunitaria que asegure el testimonio de la comunión en aquello que anuncia. Para dar pasos seguros en esta primera etapa es necesario tener claras las metas de la acción misionera que concretamente “tiene que suscitar en las personas la fe inicial y el inicio de la conversión. Estas son sus metas y se trata de experiencias personales nítidas, sencillas y constatables” (Muéstranos al Padre I, pág. 36). La fe inicial permite la acogida del misterio que se anuncia: amor del Padre y su misericordia y la persona de Nuestro Señor Jesucristo, que en su misterio pascual nos ha mostrado el camino para salvarnos. Con el acto de fe, está en el mismo nivel el inicio de la conversión que involucra a la persona con una respuesta en donde reconoce que el anuncio lo está transformando desde dentro. La acción misionera tiene su propia pedagogía que parte de la experiencia que se tiene del amor de Dios, reconociendo que en ese amor están todos los tesoros que una persona puede aspirar a tener en su vida y quiere comunicarlo a otros mediante el testimonio personal y comunitario, que se va transmitiendo como algo que brota del corazón y se va manifestando en la caridad y la alegría que experimenta la persona que empieza a creer en Dios. El Papa Francisco expresa esta realidad cuando afirma: “Cuando la vida interior se clausura en los propios intereses, ya no hay espacio para los demás, ya no entran los pobres, ya no se escucha la voz de Dios, ya no se goza la dulce alegría de su amor, ya no palpita el entusiasmo por hacer el bien” (EG 2). De tal manera que, el amor de Dios testimoniado por un creyente, mediante la acción misionera, lleva a que del corazón brote el fruto maduro de la caridad y experimente la alegría de los hijos de Dios. Pero hay que dar un paso más en esta experiencia de fe, porque el testimonio del creyente no se agota en su forma de vivir, en la caridad que realiza o en la alegría que manifiesta con el Evangelio recibido, sino que del corazón brota el fervor misionero, esto significa que quien está verdaderamente evangelizado percibe la urgencia por anunciar lo que ha visto, oído y experimentado que es el amor de Dios en su vida. El Documento de Aparecida expresa esta verdad cuando afirma: “El reto fundamental es mostrar la capacidad de la Iglesia para promover y formar discípulos misioneros que respondan a la vocación recibida y comuniquen por doquier, por desborde de gratitud y alegría, el don del encuentro con Jesucristo. No tenemos otro tesoro que este. Este es el mejor servicio que la Iglesia tiene que ofrecer a personas y naciones” (DA #14). Todo esto reclama de cada uno de nosotros un celo misionero que siempre nos tenga en salida misionera para transmitir la fe a otros, sin perder el celo por el anuncio de Jesucristo. Al respecto el Papa Francisco afirma: “A veces perdemos el entusiasmo por la misión al olvidar que el Evangelio responde a las necesidades más profundas de las personas, porque todos hemos sido creados para lo que el Evangelio nos propone: la amistad con Jesús y el amor fraterno. Cuando se logra expresar adecuadamente y con belleza el contenido esencial del Evangelio, seguramente ese mensaje hablará a las búsquedas más hondas de los corazones" (EG #265). El comienzo de la Cuaresma tendrá que ser una oportunidad para que la acción misionera con los gestos de la ceniza, del ayuno y la penitencia, nos ayude a experimentar el amor de Dios y su misericordia infinitas. Caminemos juntos en la acción misionera. En unión de oraciones, caminemos juntos, renovando nuestra fe. + José Libardo Garcés Monsalve Obispo de la Diócesis de Cúcuta

Lun 27 Feb 2023

Ecuador acoge la tercera Asamblea Regional de la fase continental del sínodo en América Latina y el Caribe

En continuidad con las dos Asambleas Regionales realizadas en El Salvador y República Dominicana para las regiones Centroamérica-México (CAMEX) y Caribe, respectivamente, en el marco de la Fase Continental del Sínodo de la Sinodalidad, este lunes 27 de febrero se dio inicio en Quito (Ecuador) a la tercera Asamblea Regional para los países Bolivarianos. El encuentro se realiza en la Casa Salesiano de Espiritualidad San Patricio, a las afueras de la ciudad, donde han llegado durante el día anterior los representantes de Colombia, Bolivia, Ecuador, Perú y Venezuela. Agenda del primer día La jornada iniciaró con el acto de apertura que tuvo lugar a las 9:00 a.m., en el auditorio Juan Bottasso. Luego, durante la mañana, los participantes vivieron un retiro espiritual, el cual fue animado por la comisión de espiritualidad de la Asamblea. En horas de la tarde, como insumo para las jornadas que vendrán, se ha tenido la introducción sobre la relación entre la fase continental del Sínodo y la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe. Asimismo, se está presentando el método de conversación espiritual que marcará la pauta para los trabajos de escucha mutua y discernimiento durante toda las semana. El primer día de la Asamblea culminará con la eucaristía inaugural que se celebrará a las 6:30 p.m., presidida por Mons. Miguel Cabrejos Vidarte, Presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam). Tanto el acto de apertura como la eucaristía inaugural y la conferencia sobre la articulación entre el Sínodo y la Asamblea Eclesial, están siendo transmitidas a través de las redes sociales del Celam en alianza con Radio María Ecuador para Radio María Hispanoamérica. Fuente: ADN Celam

Vie 17 Feb 2023

ECOS DE LA ASAMBLEA: ¿Qué es el estilo sinodal en la Iglesia?

Para iluminar la reflexión de la 114 Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano, que tuvo lugar los pasados días (06 al 10 de febrero), el Departamento de Doctrina del SPEC, en compañía del Comité Teológico Consultivo, realizó el documento “El estilo sinodal de los organismos eclesiales de participación” que los Obispos de Colombia recibieron en el mes de enero como una anticipación del tema que concentraría la atención durante su Asamblea y que ahora podrá ser leído y estudiado por quien desee profundizar en este aspecto (texto y audio al final del artículo). Los organismos de participación eclesial, tanto en el nivel de las jurisdicciones eclesiásticas (vicariatos, diócesis y arquidiócesis) como en el de las parroquias están contemplados en el Código de Derecho Canónico: los colegios de consultores, los consejos episcopales, presbiterales, pastorales, de asuntos económicos y los sínodos; el estilo sinodal ilumina el modo como estos organismos deben vincular a los laicos, especialmente a los jóvenes y a las mujeres para dinamizarlos y relanzarnos como estructuras de servicio en favor de la pastoral integral. La reflexión en torno a este tema, ocupó a los Obispos de Colombia durante la pasada Asamblea, además de otros asuntos de especial importancia como el cuidado de la casa común, la reconciliación y la paz en el país, y la cultura del cuidado en la Iglesia; todos estos temas tienen estrecha relación con el Camino Sinodal que actualmente vive la Iglesia. Actualmente, el Sínodo sobre la sinodalidad 2021-2024 concentra la atención de la Iglesia Universal en torno a los modos como la comunión y la misión se realizan a través de una vinculación – participación de todos los miembros del Pueblo de Dios y no solo de unos pocos. En América Latina, la etapa continental se está llevando a cabo a través de cuatro Asambleas Regionales, la primera de las cuales, tendrá lugar en El Salvador del 13 al 17 de febrero para la región Centroamérica-México; luego, será el turno de la región Caribe reunida en Santo Domingo (República Dominicana) del 20 al 24 de febrero. Para la región a la que pertenece Colombia (Región Bolivariana) la cita será en Quito (Ecuador), del 27 de febrero al 3 de marzo, y finalmente, la Asamblea para la Región Cono Sur tendrá lugar en Brasilia del 6 al 10 de marzo. Luego de estas cuatro Asambleas Regionales, en Bogotá, donde se encuentra la sede del CELAM, se llevará a cabo una reunión de los delegados de cada región de modo que, junto al Equipo coordinador de la fase continental en América Latina, se redacte la síntesis continental que hará parte de la iluminación de la Asamblea Ordinaria del Sínodo que se reunirá en Roma en el próximo mes de octubre de 2023 y que tendrá una segunda sesión en octubre de 2024. DESCARGAR DOCUMENTO AQUÍ

Dom 12 Feb 2023

MEMORIA: Encuentro Equipo Nacional de Delegados de Pastoral Familiar 2023

Los días 3 y 4 de febrero se llevó a cabo en la sede de la Conferencia Episcopal de Colombia, el Encuentro del Equipo Nacional de Delegados de Pastoral Familiar, que tuvo como propósito el de resaltar el amor familiar como vocación y camino de santidad, para comprender y compartir el significado profundo y salvífico de las relaciones familiares en la vida cotidiana. Durante el encuentro, organizado por el Departamento de Matrimonio y Familia del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC), se exaltó ‘la alegría de ser familia’, es decir, la belleza del sacramento del matrimonio y la gracia en todas las situaciones de la vida tanto positivas en la fraternidad y en el compartir; como aquellas que se constituyen en prueba como el sufrimiento, el perdón y la aceptación de la cruz. Con la presencia de monseñor Marco Antonio Merchán, presidente de la Comisión Episcopal de Matrimonio y Familia; y de monseñor Edgar de Jesús García, monseñor Miguel Fernando González y monseñor Rubén Darío Jaramillo miembros de esta Comisión Episcopal y la significativa participación de las regiones eclesiales Cundiboyacense, Orinoquía-Amazonía, Caribe, los Santanderes, Antioquía-Chocó, Tolima grande, Sur-occidente, Eje Cafetero y los movimientos Laicales Familiares, “revisamos nuestro caminar como equipo nacional, a la luz de la experiencia vivida en los últimos años –marcados por el año de la familia, los encuentros a nivel mundial, nacional y local – y, a partir de esto, elaboramos juntos una proyección del camino a seguir en este trienio que responda a las urgencias y necesidades que han emergido como prioritarias” afirmó el padre Nelson Ortiz, Director del Departamento en el SPEC. En una jornada llena de escucha y discernimiento, se retomó el camino de actualización del Plan Nacional de Pastoral familiar, a la luz de lo vivido en el año de Amoris Laetitia y el Encuentro Mundial de las Familias del año anterior; se revisó el documento ‘Hacia una Iglesia Sinodal’ de la Primera Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe; también se realizó la evaluación del Encuentro Nacional de Agentes de Pastoral Familiar y se asumió con alegría ‘El Itinerario Catecumenal para la Vida Matrimonial’ como una clave de la renovación pastoral del acompañamiento a los jóvenes, matrimonios y familias. Finalmente, se hizo un ejercicio juicioso sobre las iniciativas que han venido desarrollando las jurisdicciones eclesiásticas de cada una de las regiones, las fortalezas y debilidades del Departamento de Matrimonio y Familia y se exploraron líneas de trabajo para futuros encuentros regionales y nacionales de cara al Jubileo de las Familias en 2025.

Vie 3 Feb 2023

Episcopado colombiano se prepara para celebrar la 114 Asamblea Plenaria

Del 6 al 10 de febrero de 2023 estarán reunidos en Bogotá los obispos de Colombia para celebrar su 114 Asamblea Plenaria, donde seguirán avanzando en la reflexión del Sínodo de la sinodalidad convocado por el Papa Francisco, además analizarán aspectos de la realidad del país. En sintonía con el Proceso Sinodal que vive actualmente la Iglesia Universal, la Presidencia de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), ha trazado tres “Opciones para caminar juntos”, la primera de las cuales tiene que ver con la Iglesia que vive la comunión y la participación: “Optamos por ser Iglesia en Colombia que escucha, discierne y decide como Pueblo de Dios, bajo la guía del Espíritu Santo, para ser signo de esperanza”. En sintonía con lo anterior, durante cinco días los obispos escucharán los actuales clamores recogidos en las etapas nacional y continental del Sínodo sobre la Sinodalidad y reflexionarán sobre el estilo sinodal y corresponsable que deben tener los organismos de participación eclesiales a nivel parroquial y diocesano, sobre todo en la vinculación de los laicos, especialmente de las mujeres y los jóvenes. Además, durante la agenda de esta Asamblea Plenaria, habrá un especial encuentro de los señores obispos con la junta directiva de la CEAMA (Conferencia Eclesial de la Amazonía), presidida por el señor Cardenal Pedro Barreto, arzobispo de Huancayo (Perú), quien desarrollará el tema de la articulación de la Conferencia Episcopal Colombiana con este importante estamento de participación eclesial. Igualmente, la junta directiva de la REPAM (Red Eclesial Panamazónica) hará presencia durante la Asamblea. Las otras dos “Opciones para caminar juntos” serán desarrolladas en las siguientes Asambleas Plenarias. En julio de 2023 se tratará el tema de la Iglesia Misericordiosa con la perspectiva del compromiso en el desarrollo humano integral, la defensa de la casa común y la búsqueda de la reconciliación y la paz. Finalmente, en la Asamblea CXVI de febrero de 2024 se abordará el tema de la Iglesia Misionera, en consonancia con el Año Misionero en Colombia que conmemorará los cien años del Primer Congreso Misionero (1924-2024) y que preparará al Congreso que sobre la materia se llevará a cabo en Bogotá, en el mes de octubre de 2024. Compromiso por la búsqueda de la paz Los prelados quienes siempre han manifestado su compromiso de seguir trabajando por la paz y la reconciliación acompañando a las comunidades en los distintos territorios, abordarán temas importantes sobre la realidad social del país.

Jue 2 Feb 2023

JORNADA VIDA CONSAGRADA: CRC agradece a religiosas y religiosos por su servicio misionero

Este 02 de febrero, fecha en que la Iglesia celebra la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, la Conferencia de Religiosos de Colombia (CRC), hizo llegar un mensaje de felicitación a cada religiosa y religioso, agradeciendo su "servicio místico, profético y misionero" en los distintos ambientes pastorales. Este ente eclesial que congrega a los Institutos de Vida Consagrada del país, recuerda el momento que vive la Iglesia, un ambiente de sinodalidad, por ello agregan "nos urge seguir siendo conscientes que caminamos juntos. Hombres y mujeres que atesoramos en la fragilidad el gran regalo de la experiencia de encuentro con Dios". En este contexto, animan a la vida consagrada a reconocer el llamado del Señor, de estar con él en medio de las adversidades, pruebas y desafíos que en todos los ámbitos tocan a la sociedad y, en ella, a todas las obras pastorales donde hacen presencia. La invitación fue a sembrar la esperanza en el corazón herido de la humanidad. "Somos religiosas y religiosos que creemos en un porvenir para nuestros pueblos. Consagradas y consagrados enviados a construir el reino de Dios para que nuestros hermanos y hermanas tengan vida en abundancia", concluye el mensaje. DESCARGAR EL MENSAJE AQUÍ

Jue 2 Feb 2023

Un año sinodal

Por: Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez - De nuevo mi saludo en el inicio del año 2023. Deseo a todos lo mejor de lo mejor. Dios los acompañe. Como dice el salmo 36, “encomienden sus caminos al Señor, confíen en Él y él actuará”. En general cuando se da inicio a un nuevo año son muchas las ilusiones, los proyectos, los deseos que pasan por las mentes de todos. Ese “confiar en el Señor” es clave para entender que nuestro destino está en las manos de Dios, y él no nos deja solos. Sin duda que el contexto actual en el que nos encontramos no es fácil. Si hablamos de lo económico, los índices de pobreza son altos, la afectación que tendrá el incremento de los salarios, para muchos, es grande. Nadie puede negar que todo sube y los aumentos de los salarios rápidamente se esfuman. Por otro lado, la problemática social también es compleja. Muertes, violencia, abusos de toda índole, desempleo, desplazamientos y otros fenómenos hacen parte de las noticias cotidianas. En lo político, seguimos confiando en la consolidación de los programas prometidos en orden a la paz, la justicia social, la erradicación de la corrupción y la protección de la dignidad humana de hombres y mujeres de todas las edades. A todo lo anterior, hay que agregar la afectación negativa que ha tenido en la economía local y nacional la ola invernal con los desastres que han ocasionado, que ha llevado, como bien se sabe, a la declaración de la calamidad pública por parte de las administraciones civiles ante la evidencia de las vías cerradas, deslaves que destruyen casas, familias que han perdido todo por las inundaciones, carestía de los alimentos, etc. Sin que cerremos los ojos a estas realidades, debemos recordar lo que el Señor nos dice en su evangelio: “Todo es posible para quien tiene fe”. Así es. Los invito para que el nuevo año no sea el de la desesperanza, sino el de la esperanza. Si sabemos que Dios está con nosotros, vale la pena tener presente lo que durante la pandemia el papa Francisco nos decía cuando nos invitaba a remar juntos, a sentirnos parte de la misma barca. Nadie se salva solo, lo ha dicho el Papa en varias ocasiones. Así, nadie piense que solo va a salir airoso de lo que estamos viviendo. Necesitamos poner en práctica la sinodalidad. Es necesario repetirlo una y mil veces, que la clave para lograr superar las adversidades es estar unidos, caminar juntos, sentir que estamos participando todos de una misma realidad que estamos llamados a convertirla en oportunidad de vida. Por eso este año será el de la sinodalidad, no solo desde la perspectiva eclesial, sino desde lo social. Cuando como ciudadanos aprendamos a vivir sinodalmente, seguro que todo va a ser mejor. Este es el aporte que la Iglesia siempre ha hecho, es el aporte que ahora queremos hacer todavía más visible. Para la Arquidiócesis también será el año de la sinodalidad. Varios eventos vamos a tener en esta línea: pre-sínodos con los jóvenes, con las familias y las parroquias. Una gran asamblea sinodal arquidiocesana tendremos en el segundo semestre, en consonancia con el Sínodo que el papa ha convocado en Roma, que tendrá como tema "Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión". Oremos para que dejándonos guiar por el Espíritu Santo, seamos capaces de aprender a desaprender, y caminemos sinodalmente, mirando el futuro con ilusión. + Luis Fernando Rodríguez Velásquez Arzobispo coadjutor de Cali