Pasar al contenido principal

asamblea de obispos

Dom 3 Feb 2019

Se reúnen en asamblea obispos colombianos

Este lunes 4 de febrero iniciará la versión 107 de la Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano, en la que se reflexionará sobre la dimensión social de la evangelización. “Se trata de volver a tomar el mensaje cristiano que nos invita a incidir, desde nuestra fe, en la realidad social en todos los ámbitos de la vida humana, es decir, buscar el bienestar integral y el bien común de los pueblos”, así lo expresó monseñor Elkin Álvarez Botero, obispo auxiliar de Medellín y secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC). El prelado recordó que la vida del cristiano no es solamente de carácter espiritual, sino que debe expresar la caridad y el amor con acciones concretas que ayuden en la transformación de la realidad. La Asamblea, que se extenderá hasta el 08 de febrero, también abordará momentos propios de la vida eclesial y de la realidad nacional. Por último, monseñor Álvarez Botero pidió “orar para que el Espíritu Santo asista con su luz a todos los obispos en las deliberaciones de la Asamblea”.

Mié 14 Feb 2018

Parroquia y situación nacional

Por: Mons. Libardo Ramírez Gómez - Temas de la reciente Asamblea de la Conferencia Episcopal de Colombia (5 al 9-02-18), fueron “Parroquia en el corazón de la Nueva Evangelización”, y “mirada a la actual situación nacional”. Se reflexionó sobre esa institución eclesial, con origen en los mismos inicios de la Iglesia, que ha sido piedra estructural en su organización, en todas las épocas anclada en la situación circundante en un país, llamada a dar valioso aporte a su vida nacional. Fueron días de trabajo intenso del Episcopado, en búsqueda de ideas motoras de una pastoral eficaz, que encauce labores concretas que lleven a los mejores resultados. Se echó una mirada sobre el nombre mismo de “parroquia”, y su historial a lo largo de los siglos, como “casa del pueblo”. Jesús, cumplida su misión de entregar lo básico de su Buena Nueva, una vez ofrecido al Padre su propio sacrificio con la subsiguiente Resurrección, al despedirse de sus Apóstoles los envío a llevar adelante la obra iniciada por Él, y llevar su enseñanza “a todas las naciones” (Mc. 16,15), les dio grandes poderes (Lc. 10,16 y 22,19 Jn. 20,23), pero, en lo organizativo, solo estableció el primado de Simón al quien llamó “Pedro”, constituyéndolo como “piedra” sobre la cual edifica su Iglesia, y le confía las llaves de la dirección de ella (Mt.16, 18-19). Al despedirse, el Señor, ordena a los Apóstoles volver a Jerusalén, y, allí, recibir al Espíritu Santo que les iría iluminando detalles organizativos (Hech. 1,7-8). Cumplida esa gran promesa, en Pentecostés, los directivos de la Iglesia, con Pedro a la cabeza, fueron dando pasos en el servicio de los pobres (Hech.6), y dan prescripciones a los fieles que se van organizando en pequeñas comunidades (Hech. 2,42-47 y 4,32-35). A través de los siglos, la Iglesia fue organizándose en lo territorial según las necesidades y asistencia del Espíritu Santo. Fue así como, surge la figura de la “parroquia”, más de lleno hacia el Siglo IV, como parte de una Diócesis encomendada a un Presbítero. Más definida aún quedó en tiempo de Carlo Magno (742-814), y, en la época del feudalismo, vino a adquirir el estilo de “feudo”, con desfiguración de su objetivo espiritual y pastoral. En medio del mismo ambiente feudal de Europa hubo edificantes pastores de almas, dedicados a las tareas propias de un Párroco, atento a sus fieles como ovejas puestas bajo su cuidado. Después vinieron órdenes como las dadas en el Concilio de Trento de crear parroquias con funciones bien definidas. En el primer Código de Derecho Canónico (1917), quedó definido el lineamiento de una parroquia, y en el Código actual (de 1983), aparece su figura con el sentido de “comunidad eclesial” destinada a agrupar a los fieles, prestándoles servicios espirituales, en ambiente comunitario. Se pidió dejar el sentido de “beneficio” para explotación del Párroco, por el más pastoral de “servicio” al pueblo de Dios. Los Papas de los últimos decenios han dado señalamiento de parroquia ideal “en salida” y no encerrada (Papa Francisco), que sean de verdad “casa del pueblo”, fontana de bondades inspiradas en el Mandamiento del Amor (Jn. 13,34). Hubo, en la Asamblea, profundización en magistrales exposiciones de prestantes Prelados, y dialogo abierto sobre procesos de avances parroquiales de actualización para servir a la Colombia de hoy en los aspectos que le son propios, con proyección hacia lo social, lo económico y político, con reclamo del deber ciudadano de participación, en forma consciente y libre, en próximos comicios electorales. Lo anterior inspiró el Mensaje final, con llamado a corregir, a la luz del Evangelio, tantas fallas que le impiden el progreso y la paz. Que la parroquia, debidamente renovada, cumpla su misión, y se corrijan desfiguraciones, para que contribuya a un mundo más amable y fraterno, como “casa para familia humana”. Libardo Ramírez Gómez E-mail: [email protected]

Lun 5 Feb 2018

Parroquias cercanas y con puertas abiertas: Mons. Urbina

Durante su homilía en la celebración anterior a la inauguración de la CV Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano, el Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Monseñor Oscar Urbina Ortega, recomendó que las parroquias del país sean cercanas y se inspiren en lo que el Papa Francisco llama un “hospital de campaña”. Según Mons. Urbina, la Iglesia “nació misionera en el cenáculo y fue enviada a ir a las periferias geográficas y existenciales, las del misterio del pecado, del dolor, de la injusticia, de la ignorancia, de la falta de fe, y la de toda forma de miseria.” Para cumplir con esta tarea, se requiere de párrocos cercanos a la gente, que tienen la disposición de escuchar y de caminar para ir en cualquier momento a sus hermanos y generar el sentido de la gratuidad. Audio: Homilía Monseñor Oscar Urbina Ortega Para esta apertura, el también Arzobispo de Villavicencio recomendó acercarse a la juventud y a nuevos espacios de la sociedad. Aprender el lenguaje de los jóvenes que sufren orfandad y carecen del calor del hogar; saber llegar a los diversos ambientes de la vida de hoy y tener la audacia de explorar nuevos caminos; y aprender nuevos lenguajes, nuevas formas de cercanía para dilatar la alegría del evangelio, se convierte en una tarea indispensable. El prelado recordó que pese a tantos cambios en la sociedad, la misión de las parroquias sigue vigente. Como espacio generador de encuentros con Jesucristo vivo, capaces de enrutar la existencia por caminos nuevos, para vivir encuentros auténticos, transparentes, comprometidos con los hermanos, para convertirse cada uno en un kerigma que camina por los diversos espacios de los hombres: La parroquia es la casa del santo pueblo de Dios, donde se anuncia, se explicita la pedagogía y la vivencia de la comunión y se convierte “en hospital de campaña, que revela una y otra vez el corazón misericordioso de Dios que nos lleva a generar encuentros auténticos de reconciliación, de perdón y de paz, que necesitará por tantos años nuestra nación.” Así la parroquia es espacio y comunidad que vive la cultura del encuentro sin perder de vista cuál es, según el presidente de la Conferencia Episcopal, su principal propósito. “El tesoro más grande que nos dejó el señor, y el tesoro más grande que custodia la parroquia, es la eucaristía, cúlmen de la evangelización, presencia de cristo buen pastor.”

Jue 30 Jun 2016

Obispos de Colombia se reunirán en Asamblea Plenaria

En el marco de la CI Asamblea Plenaria de Episcopado y ante los últimos acontecimientos del país en relación a los acuerdos firmados en La Habana, los obispos de la Iglesia católica se reunirán en Bogotá del 04 al 08 de julio para hablar de paz y reconciliación. En un ambiente de oración y discernimiento, los 83 prelados de todo el país se congregarán para profundizar desde el evangelio, la responsabilidad actual que deben asumir para la construcción de un nuevo país, reconciliado y en paz. Durante una semana los jerarcas presentarán y analizarán las causas y los actores de violencia en cada una de sus regiones. Esto con el fin de generar acciones concretas y viables, para asumir la responsabilidad que les corresponde como obispos comprometidos con la reconciliación y la paz.