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pandemia

Jue 21 Ene 2021

“Invitamos a todos los actores armados a convertir su corazón”: Obispo de Tumaco

Frente a la posible desaparición, desde el pasado 13 de enero, de once hombres que salieron en una lancha con rumbo al municipio de Mosquera (Nariño), el obispo de Tumaco, monseñor Orlando Olave Villanova, se refirió al tema e hizo un llamado a los alzados en armas a renovar su corazón y defender la vida de las personas. “Invitamos a todos los actores armados a convertir su corazón, a descubrir en su corazón el querer de Dios que nos pide renovarnos y cambiar de actitud. Él nos pide defender la vida de todas las personas”, aseguró. Monseñor Olave afirmó que esta región adolece de una comunicación eficaz entre los territorios, vía terrestre, telefónica y de internet, lo que ha hecho que se dé una serie de informaciones que no ayudan a clarificar lo que está pasando. “Hay distintas informaciones y comentarios, lo que sí es cierto y real es que hay once personas desaparecidas, y se han encontrado dos cadáveres que aún no están plenamente identificados”. El prelado denunció que en la costa pacífica nariñense se sigue padeciendo por la violencia. Las comunidades viven en medio de la zozobra y temores, hechos que lo llevan a insistir en un llamado a los grupos ilegales para que frenen todo acto violento y no se ensañen contra la población. Acciones pastorales de la Iglesia Al referirse al acompañamiento que esta Iglesia particular viene adelantando a la población vulnerable de estos territorios, informó que los sacerdotes, religiosos, religiosas y agentes de pastoral, siguen haciendo presencia permanente para apoyar a las comunidades. Finalmente, dijo que la pastoral social sigue avanzando con el desarrollo de proyectos que llevan a caminar en un ámbito de paz y reconciliación. El virus de la pandemia Aunque el prelado observó que, si bien el año pasado se presentaron algunos casos de contagio, hoy afortunadamente no hay ninguna persona que esté con el virus dentro del clero o los equipos de pastoral. “Con un sentido de responsabilidad común, la Iglesia sigue insistiendo en la adopción de medidas para prevenir la propagación del Coronavirus (…) Seguimos en la actitud del autocuidado, de pedirle a la comunidad que se cuide, porque de todas formas el virus sigue, está presente y sigue siendo peligroso”, puntualizó.

Mar 19 Ene 2021

“Esperanza, fortaleza y valentía”, pide monseñor Álvarez a colaboradores de la CEC

Esta fue la invitación de monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), en la eucaristía que presidió este 18 de enero para dar apertura de manera oficial a las labores de la institución. Recordando el Salmo 30: “Sean fuertes y valientes de corazón, los que esperan en el Señor”, animó a los colaboradores de la CEC para que hicieran suyas estas palabras y, desde el carisma que el Señor ha regalado a cada uno, inicien con fe y alegría este nuevo periodo laboral. El prelado dijo que el episcopado, dada la situación compleja que aún se sigue viviendo por cuenta de la pandemia, ha iniciado atendiendo sus labores en alternancia y siguiendo los protocolos de bioseguridad. Recordó, además, que esta es una oportunidad para mantener unidos los vínculos de la fraternidad espiritual entre quienes hacen parte de esta casa, lo cual exige de cada uno relacionarse con nuevos métodos en beneficio de los proyectos a ejecutar en estas circunstancias tan difíciles. “Cada día encontramos cosas nuevas que debemos afrontar, replantearnos aún en nuestras tareas. Deberíamos estar hoy reunidos allá en la Conferencia Episcopal dando curso a los trabajos del año, preparando una asamblea. No lo podemos hacer, pero por encima de todo esto el Señor nos quiere unidos en Cristo, confiados en él, decididos a vivir nuestra vocación cristiana, nuestra misión en la Iglesia y en el mundo con total certeza de la intercesión y el acompañamiento de Cristo nuestro hermano”, afirmó. Monseñor Álvarez, quien celebró la eucaristía desde la capilla de la curia diocesana de Santa Rosa de Osos, sede en la que recientemente asumió como obispo, confió a la Virgen María, bajo la advocación de Nuestra Señora de las Misericordias, a cada uno de los funcionarios de la CEC y el trabajo a emprender durante este año 2021. Aplazada Asamblea plenaria del Episcopado El secretario general informó que la Conferencia Episcopal tomó la decisión de aplazar, una vez más, la próxima Asamblea electiva de obispos que estaba programada para principios del mes de febrero. La nueva fecha fue reprogramada para la segunda semana de Pascua (abril), advirtiendo que se realizará si las condiciones se dan para que los obispos asistan a dicha Asamblea.

Vie 15 Ene 2021

“La enfermedad tiene un rostro”: Mensaje Jornada Mundial del Enfermo

Con el título: "Dar al que sufre el bálsamo de la cercanía", inspirado en el pasaje evangélico en el que Jesús critica la hipocresía de quienes «dicen, pero no hacen» (cf. Mt 23,1-12), el Papa Francisco presentó el escrito para esta Jornada, que se celebrará el próximo 11 de febrero. En el escrito recuerda la importancia de apoyar y acercarse a quienes sufren una enfermedad. “La cercanía, de hecho, es un bálsamo muy valioso, que brinda apoyo y consuelo a quien sufre en la enfermedad (...) estamos llamados a ser misericordiosos como el Padre y a amar, en particular, a los hermanos enfermos, débiles y que sufren (cf. Jn 13,34-35). Y vivimos esta cercanía, no sólo de manera personal, sino también de forma comunitaria: en efecto, el amor fraterno en Cristo genera una comunidad capaz de sanar, que no abandona a nadie, que incluye y acoge sobre todo a los más frágiles” recuerda. En su escrito, el Santo Padre afirma que esta Jornada "es un momento propicio para brindar una atención especial a las personas enfermas y a quienes cuidan de ellas, ya sea en los lugares destinados a su asistencia como en el seno de las familias y las comunidades". "Quienes sufren en todo el mundo los efectos de la pandemia del coronavirus" Al referirse al tema de la pandemia, señala que esta ha puesto en evidencia las insuficiencias en el sistema de la salud y la carencia de atención a las personas enfermas. “Esto depende de las decisiones políticas, del modo de administrar los recursos y del compromiso de quienes ocupan cargos de responsabilidad. Invertir recursos en el cuidado y la atención a las personas enfermas es una prioridad vinculada a un principio: la salud es un bien común primario”, afirma. Agradecimiento en atención a los enfermos El Pontífice hizo extensivo su agradecimiento al personal de la salud, voluntarios, sacerdotes, religiosas y religiosos, quien con su entrega profesional atienden a tantos enfermos y acompañan a los familiares de los pacientes. “Una multitud silenciosa de hombres y mujeres que han decidido mirar esos rostros, haciéndose cargo de las heridas de los pacientes, que sentían prójimos por el hecho de pertenecer a la misma familia humana”. La Jornada Mundial del Enfermo Fue instituida por el Papa San Juan Pablo II en el mes de mayo del año 1992. “Deseo comunicarle que he decidido instituir la Jornada mundial del enfermo, que se celebrará el 11 de febrero de cada año, memoria litúrgica de la Virgen de Lourdes. En efecto, creo muy oportuno extender a toda la comunidad eclesial una iniciativa que se está realizando en algunos países y regiones, con grandes frutos pastorales”. ¿Por qué el 11 de febrero? Dado que el 11 febrero de 1984, el Papa San Juan Pablo II publicó la carta apostólica: “Salvifici doloris” acerca del significado cristiano del sufrimiento humano. Con el Motu Proprio “Dolentium hominum” del 11 de febrero de 1985, El Pontífice en su momento instituyó la Pontificia Comisión para la pastoral de los Agentes Sanitarios, que con la “Pastor Bonus” de 1988 pasó a llamarse Pontificio Consejo para la pastoral de los Agentes Sanitarios. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Leer mensaje de la jornada[/icon]

Vie 15 Ene 2021

Arzobispo de Barranquilla: “Un cristiano no enfrenta la muerte solo”

En la Catedral Basílica de Santa Marta, monseñor Pablo Emiro Salas Anteliz, arzobispo de Barranquilla, presidió la eucaristía en la que se despidió a quien fuera el pastor de la Iglesia magdalenense desde agosto de 2014, monseñor Luis Adriano Piedrahita Sandoval. Junto con monseñor Salas estuvieron los obispos de la provincia eclesiástica de Barranquilla, a la que pertenece la diócesis de Santa Marta: Monseñor Luis Gabriel Ramírez Díaz, obispo de El Banco; monseñor Francisco Ceballos Escobar, obispo de Riohacha, y monseñor Óscar Vélez Isaza, obispo de Valledupar. También asistieron presencialmente varios sacerdotes del clero de Santa Marta, religiosos, religiosas y seminaristas, así como algunos agentes de pastoral y autoridades civiles, militares y de policía, con el cuidado de no sobrepasar el aforo permitido en la catedral. En el saludo a los presentes y a las más de dos mil quinientas personas que se unieron a la transmisión por redes sociales que originó la emisora Voces 89.4 FM de la diócesis de Santa Marta, el arzobispo Pablo Emiro expresó las condolencias de monseñor Óscar Urbina Ortega, presidente del episcopado colombiano, así como la voz de solidaridad de todos los obispos del país. Monseñor Salas,durante su homilía y tomando un pasaje del evangelio proclamado,“vengan benditos de mi Padre, reciban el reino preparado para ustedes”, recordó que un cristiano no enfrenta la muerte solo, ni siquiera“en las circunstancias en que murió Luis Adriano, en la soledad de una cama”. Aseguró que nadie está solo si ha tenido a Cristo en su vida. “Él no estaba solo, nadie está solo porque ese con quien hemos vivido nuestra vida está con nosotros, permanece con nosotros, nos consuela, nos reconforta y nos sostiene”. Evocó la última reunión que sostuvieron los obispos de la provincia eclesiástica, en el mes de diciembre, donde monseñor Luis Adriano les manifestó que solo le faltaba un año para su jubilación; pero él, aun faltándole un año para terminar su período de gobierno, quería vivirlos totalmente hasta el último momento en la misión encomendada. “Vivir en Cristo, entonces, significa no perder de vista lo esencial, no perder de vista lo importante y nosotros, los consagrados, nosotros los obispos, tenemos clara una cosa:no nos vamos a comprar el Covid en una tienda o no nos lo vamos a ganar haciendo tonterías en la calle, pero sí por el cumplimiento de nuestra misión nos acontece lo que le sucedió a Luis Adriano, nos damos por bien servidos (…) Nosotros todos los días tenemos que gastarnos en aquello que se nos ha confiado, tenemos que donarnos en aquello que se nos ha confiado, tenemos que servir en aquello que se nos ha pedido; la vida no la podemos banalizar porque los días pueden ser muchos, pero también pueden ser pocos”,afirmó. El prelado dijo, además, que no hay duda que monseñor Luis Adriano, desde su lecho de dolor, vivió también su propia pascua y su momento de pasión, recordando así el último mensaje de Navidad, ofrecido por este obispo a su clero y feligresía en general, estando ya hospitalizado. “El ofreció su enfermedad, la incomodidad de una enfermedad de estas, los malestares que ocasionan, las complicaciones que originan y todo ello lo vivió en esa dimensión sobrenatural, donde el dolor se redimensiona, donde el dolor se vuelve salvífico, donde el dolor humano unido al dolor de Cristo se vuelve redentor y así vivió él esos días, ofreciendo todo por su propia santificación y por la santificación de la Iglesia que le habían confiado, especialmente de sus sacerdotes”. Finalmente, animó al clero diocesano y a la comunidad para que el ejemplo de este pastor sirva para seguir edificando una Iglesia viva, en medio de las circunstancias del momento especial que tendrá que vivir esta Iglesia particular.“Ponemos en la presencia de la Santísima Virgen María las intenciones de todos sus sacerdotes, de todo su pueblo, de todas sus comunidades parroquiales, ponemos en sus manos los sufrimientos de tantos que siguen enfermos, ponemos en las manos de la Virgen el dolor de aquellos que todavía padecen las ausencias de los que ya partieron, para que ella y su Hijo sean nuestro consuelo y nuestra esperanza”. Saludo de condolencia del nuncio apostólico de Colombia Por su parte, el nuncio apostólico de Colombia, monseñor Luis Mariano Montemayor, se hizo presente con un saludo de condolencia a la comunidad diocesana de Santa Marta, resaltando de monseñor Luis Adriano su sencillez y don gente, quien no escatimó esfuerzos, aún en medio de la pandemia, para estar presente dentro de sus comunidades. “En su enfermedad monseñor se ha identificado íntimamente con los sufrimientos de Cristo, experimentando en su carne lo que viven tantos de nuestros hermanos, familiares y amigos a quien Dios visita estos días con un amor de predilección misterioso, pero profundamente real”. “Monseñor a quien hemos conocido como un hombre naturalmente bueno, afable, sencillo dotado de un espontaneo don de gente, y un gran respeto por las personas, no escatimó esfuerzos durante su vida pastoral, ni siquiera durante la pandemia, para estar cerca de aquellos a quien el Señor le confió (…) Siguiendo el ejemplo del Maestro quien nos enseñó que nadie tiene mayor amor que aquel que da la vida por sus hermanos”. “De hecho, aun encontrándose en un momento de enfermedad, no midió sus energías y no dudo en arriesgar su salud por el bien de sus ovejas”, puntualizó el nuncio apostólico en su mensaje.

Lun 11 Ene 2021

Fallece obispo de Santa Marta por covid-19

El obispo de la diócesis de Santa Marta, monseñor Luis Adriano Piedrahita Sandoval, murió tras permanecer hospitalizado 19 días por covid-19 en la clínica Avidanty. La noticia fue confirmada a través de un comunicado de prensa emitido por esta Iglesia particular. "Con profunda pena y dolor, pero con la esperanza puesta en Nuestro Señor Jesucristo vecedor de la muerte y del pecado, comunicamos a ustedes que a las 5:15 p.m. nuestro obispo, Monseñor Luis Adriano Piedrahita Sandoval, ha sido llamado a la Casa del Padre". La misiva, suscrita por monseñor Dairo Navarro Escobar, vicario general, y el padre José Díaz Hernández, canciller diocesano, animaron al clero para que como signo y señal de duelo se toquen las campanas de los templos, anunciando a los fieles del fallecimiento de este prelado que desde el 8 de Octubre de 2014 venía asumiendo este encargo episcopal. "A María Santísima encomendamos a nuestro Obispo, Luis Adriano para que lo presente a Dios nuestro Señor y le sea concedido el descanso eterno". [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar Biografía de monseñor Piedrahita[/icon]

Sáb 9 Ene 2021

El Bautismo de Jesús, una fiesta para redescubrir al Dios encarnado

Al conmemorar la Iglesia la fiesta del Bautismo de Jesús, el vicario apostólico de San Andrés Islas, monseñor Jaime Uriel Sanabria Arias, haciendo referencia al momento que vive la humanidad por cuenta de la pandemia y los desastres naturales, advirtió que esta fiesta debe motivar en los fieles un deseo de renovación y cambio verdadero. “En medio de la pandemia y los desastres naturales, ha surgido el deseo por purificarse, reorientar la existencia y comenzar una vida más digna. Pero el solo deseo no basta, porque pronto el paso del tiempo nos devuelve a la mediocridad de siempre”, afirmó. Con ocasión de esta fiesta, el prelado destacó tres propósitos que considera son fundamentales para aplicar en la vida de toda persona: Escuchar lo que el Espíritu dice. Los primeros cristianos vivían convencidos de que para seguir a Jesús era suficiente un bautismo de agua. Es necesario vivir empapados de su Espíritu. “Ante semejante estrujón que estamos viviendo hoy, necesitamos estar agarrados fuertemente al Espíritu de Jesús. No basta tener la vacuna para la pandemia, tenemos que revisar como estamos acogiendo su Espíritu. Necesitamos parecernos más a Jesús. Dejarnos trabajar por su Espíritu. Solo Jesús puede darnos un rostro nuevo”. Atacar la mediocridad espiritual. Advirtió que en esta época de pandemia y de desastres naturales, de poco sirve recuperar el trabajo y la economía si no hay una experiencia viva de Dios. “Tenemos que redescubrir una y otra vez que solo en Dios, encarnado en Jesús, está la verdadera fuerza. En pandemia y desastres naturales hablamos mucho de Dios, pero, ¿dónde y cuándo escuchamos a Dios? En nuestro programa diario debe estar Dios, debe haber tiempo para vivir con él, lo cual será garantía de cambio real”. Trabajar en la renovación interior. El prelado dijo que ante la inmediatez que vive hoy la humanidad, se hace urgente trabajar en la interioridad del ser y la espiritualidad. “Privados de alimento interior, sobrevivimos cerrando los ojos olvidando nuestra alma, revistiéndonos de proyectos, ocupaciones e ilusiones. Necesitamos ese Espíritu que nos enseñe a pasar de lo puramente exterior a lo que hay más íntimo en el ser humano”.

Sáb 9 Ene 2021

Iglesia acoge medidas del Gobierno Nacional frente a incremento de contagios

La Conferencia Episcopal de Colombia, a través del padre Jorge Enrique Bustamante Mora, Director de los Departamentos de Doctrina y de Promoción de la Unidad y el Diálogo, ha expresado que, ante la gravedad de la situación de la pandemia en estos momentos y siguiendo las directrices establecidas en la circular conjunta de los Ministerios de Salud y del Interior, en la cual se establecen normas de confinamiento y restricción de la movilidad y la circulación en los municipios con alta ocupación de las unidades de cuidados intensivos (UCI), invita a los fieles al cumplimiento de las normas establecidas por los mandatarios locales y exhorta a los creyentes a elevar continuas y fervientes oraciones a Dios para que con su misericordia podamos superar prontamente este momento difícil que vivimos. Igualmente, el sacerdote recuerda que "corresponde a cada Obispo en su respectiva jurisdicción, según las medidas que se hayan adoptado por las autoridades locales, determinar los procedimientos a seguir y brindar el acompañamiento espiritual a toda la comunidad”. En la Arquidiócesis de Bogotá Por su parte, Monseñor Luis José Rueda Aparicio, Arzobispo de Bogotá y Primado de Colombia, en un comunicado dirigido a los sacerdotes de su jurisdicción, ha dado instrucciones para que se cierren las puertas de los templos ante el creciente número de contagios, atendiendo las disposiciones impartidas por el Gobierno Nacional y la Alcaldía Mayor de la capital del país. El Prelado pide a los sacerdotes mantener los templos cerrados, mientras dure la declaratoria de "restricción total de Ia movilidad", es decir, desde el jueves 7 de enero a medianoche, hasta el martes 12 de enero a las 4 de la mañana. Indica que, luego de esta fecha, sólo se podrán reabrir las iglesias en las localidades que no se encuentren en estricta cuarentena. Por otra parte, para el caso de las exequias, recuerda que éstas se podrán seguir realizando con los debidos protocolos de bioseguridad ya establecidos por la arquidiócesis. Monseñor Rueda Aparicio invita a los sacerdotes a cuidarse y a cuidar la salud de todas las personas, por lo que les anima a continuar con sus tareas pastorales y las celebraciones eucarísticas valiéndose de los medios virtuales “de modo que todos los fieles se sientan acompañados y fortalecidos espiritualmente en este tiempo de confinamiento”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Mié 6 Ene 2021

Obispo emérito de Santa Marta hospitalizado por Covid

Según informe de la oficina de comunicaciones de la diócesis de Santa Marta, el obispo emérito de esta jurisdicción eclesiástica, monseñor Ugo Puccini Banfi, tuvo que ser internado en la Clínica Medihelp de Cartagena por presentar síntomas de Covid-19. Se agradece a la comunidad católica y personas de buena voluntad unirse en oración por la salud de monseñor Puccini, quien fuera obispo de Santa Marta de 1988 a 2014, fecha en que se retiró de su cargo al cumplir el límite de edad para ejercer esta responsabilidad.Así como también por la salud del padre Luis Alfonso Valencia, párroco de Taganga, Igualmente, se indicó que monseñor Luis Adriano Piedrahita Sandoval, obispo titular de la diócesis de Santa Marta, quien se encuentra desde el pasado 22 de diciembre hospitalizado en la clínica Avidanti, también por Covid, presenta un estado de salud estable. Foto: Diario El Magdalena