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papa francisco

Mié 10 Mar 2021

Iglesia celebrará año especial dedicado a la ‘familia’

El próximo 19 de marzo la Iglesia universal celebra cinco años de la publicación de la exhortación apostólica 'Amoris laetitia' sobre la belleza y la alegría del amor familiar. Este mismo día, el Papa Francisco inaugurará el “Año 'Amoris laetitia'”, un periodo especial que se dedicará a la familia y que terminará el 26 de junio de 2022, con ocasión del X Encuentro Mundial de las Familias que se celebrará en Roma. En este contexto, monseñor Edgar de Jesús García Gil, obispo de Palmira y presidente de la Comisión Episcopal de Familia, ha extendido una invitación a todos los obispos del país y a los agentes de la pastoral familiar, para que en esta fecha se unan al acto de inauguración que se está preparando con este motivo. “Es una oportunidad y año de gracia para que nosotros podamos trabajar por la comunión de amor que es una familia y por la belleza que Dios nos ha regalado en los valores familiares que tanto necesita el pueblo colombiano”, expresó el prelado. El año dedicado a la familia fue anunciado a través de una carta enviada por el prefecto del dicasterio para los Laicos, Familia y Vida, Kevin Joseph Farrell, a las Conferencias Episcopales del mundo, en la que se invita a vivir de lleno esta experiencia de fe. La misiva enviada por este dicasterio señala que la experiencia de la pandemia “ha puesto de relieve el papel central de la familia como Iglesia doméstica y ha subrayado la importancia de los vínculos entre las familias". En este contexto animan para que, a lo largo de este año, en las parroquias, diócesis, universidades, movimientos eclesiales y asociaciones familiares, se realicen iniciativas de carácter espiritual, pastoral, cultural y formativo. Según lo ha indicado el dicasterio, con la animación de este año especial de la familia, se busca ofrecer a la Iglesia oportunidades de reflexión y profundización para vivir concretamente la riqueza de la exhortación apostólica 'Amoris laetitia'. Además, "hacer experimentar que el Evangelio para la familia es alegría que llena el corazón y la vida entera". Igualmente, es deseo dar una mayor participación de los matrimonios en las estructuras diocesanas y parroquiales “para establecer la pastoral familiar y una profundización en la formación de los agentes pastorales, seminaristas y sacerdotes para que, trabajando con las familias, estén a la altura de los desafíos del mundo actual”. Continúa el mensaje señalando que es importante "promover en las familias su natural vocación misionera creando momentos de formación para la evangelización e iniciativas misioneras", en ocasiones como la formación para los sacramentos de los niños, bodas, aniversarios o momentos litúrgicos importantes. Para vivir este año de la familia, el dicasterio ha elaborado un folleto informativo que brinda algunas sugerencias a seguir. Entre ellos: La realización de foros, conversatorios, elaboración de videos testimoniales, momentos litúrgicos, propuestas pastorales, catequesis, celebración de una jornada para los abuelos y las personas mayores, doce itinerarios con las familias para poner en práctica 'Amoris laetitia', entre otros. Carta del prefecto del dicasterio para los Laicos, Familia y Vida[icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar carta[/icon] Folleto informativodel dicasterio para los Laicos, Familia y Vida[icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar folleto[/icon]

Mié 3 Mar 2021

Papa anima a acudir al sacramento de la Reconciliación

En este paso de camino a la Pascua, el papa Francisco en su intención de oración para el mes de marzo, ha puesto de presente el sacramento de la Reconciliación. Invita a redescubrir la fuerza de renovación personal que tiene el sacramento de la confesión en la vida de todo católico. “Recemos para que vivamos el sacramento de la Reconciliación con renovada profundidad y para saborear el perdón y la infinita misericordia de Dios”. El Pontífice asegura que el centro de la confesión no son los pecados que se dicen, sino “el amor divino que recibimos y que siempre necesitamos (…) El centro de la confesión es Jesús que nos espera, nos escucha y nos perdona”. Invita para que este sacramento sea vivido a profundidad y se pueda “saborear el perdón y la infinita misericordia de Dios”. Agrega además, “Dios dé a su Iglesia sacerdotes misericordiosos y no torturadores”.

Dom 14 Feb 2021

Papa Francisco: "¡Gracias a Colombia, gracias!"

Como un gesto de comunión con la Iglesia colombiana, este 14 de febrero, al finalizar el rezo del Ángelus en el Vaticano, el Papa Francisco dedicó un momento para agradecer la implementación del Estatuto de Protección Temporal para los migrantes venezolanos presentes en el país, aprobado en los últimos días por el Gobierno Nacional. "Hoy, en particular, me uno a los obispos de Colombia al expresar reconocimiento por la decisión de las autoridades colombianas de implementar el Estatuto de Protección Temporal para los migrantes venezolanos presentes en el país, favoreciendo para ellos la acogida, la protección y la integración", afirmó. El papa reconoció los esfuerzos valiosos que se vienen haciendo en Colombia para enfrentar el fenómeno de la migración venezolana y dijo que, aún siendo un país con problemas de pobreza, enfrenta con valentía este proceso para ayudar a esta población. "Y esto no lo hace un país riquísimo, súper desarrollado, no. Lo hace un país con tantos problemas de desarrollo, de pobreza, de paz… casi 70 años de guerrilla. Pero, con estos problemas, ha tenido la valentía de mirar a aquellos migrantes y de hacer este estatuto. ¡Gracias a Colombia, gracias!", apuntó. Cabe recordar que la Iglesia colombiana, el pasado 10 de febrero se pronunció frente a este anuncio hecho por el Gobierno Nacional, del Estatuto de Protección Temporal para Migrantes Venezolanos, donde reconoce que se trata de una respuesta valiosa encaminada a fomentar la acogida, protección, promoción e integración de la población migrante. "Su implementación será un acto fraterno que abre las puertas para garantizar que esta población que llega a nuestro territorio pueda disfrutar de los derechos fundamentales de todas las personas y pueda acceder a oportunidades para una vida digna" [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Vie 12 Feb 2021

Mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma 2021

El Vaticano hizo público este 12 de febrero el Mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma de 2021, titulado “Miren, estamos subiendo a Jerusalén... (Mt 20,18). Cuaresma: un tiempo para renovar la fe, la esperanza y la caridad”. A pocos días de iniciar el tiempo de la Cuaresma el Papa Francisco en su mensaje, anima a renovar la fe, a saciar la sed con el “agua viva” de la esperanza y a recibir con el corazón abierto “el amor de Dios que nos convierte en hermanos y hermanas en Cristo”. Así mismo, invita además a renovar las promesas de nuestro Bautismo. En este contexto, observa que el ayuno, la oración y la limosna, son la expresión de una verdadera conversión que “permiten encarnar una fe sincera, una esperanza viva y una caridad operante". También recomienda acoger y vivir la Verdad que se manifestó en Cristo. "Esta Verdad no es una construcción del intelecto, sino que es un mensaje que recibimos y podemos comprender gracias a la inteligencia del corazón, abierto a la grandeza de Dios". El Papa exhorta para que en este tiempo de Cuaresma se viva el ayuno, pero como una 'experiencia de privación'. "Haciendo la experiencia de una pobreza aceptada, quien ayuna se hace pobre con los pobres y “acumula” la riqueza del amor recibido y compartido (...) Ayunar significa liberar nuestra existencia de todo lo que estorba, incluso de la saturación de informaciones —verdaderas o falsas— y productos de consumo, para abrir las puertas de nuestro corazón a Aquel que viene a nosotros pobre de todo, pero «lleno de gracia y de verdad» (Jn 1,14): el Hijo de Dios Salvador". También, en su mensaje se refiere a la esperanza como un manantial de "agua viva" que permite continuar el camino de todo cristiano. “En el recogimiento y el silencio de la oración, se nos da la esperanza como inspiración y luz interior, que ilumina los desafíos y las decisiones de nuestra misión: por esto es fundamental recogerse en oración y encontrar, en la intimidad, al Padre de la ternura”. Por último, se refiere a la caridad, señala que esta se evidencia viendo al prójimo crecer. "La caridad es el impulso del corazón que nos hace salir de nosotros mismos y que suscita el vínculo de la cooperación y de la comunión (…) Lo poco que tenemos, si lo compartimos con amor, no se acaba nunca, sino que se transforma en una reserva de vida y de felicidad". Finalmente, observa el momento de abandono, angustia y sufrimiento que viven muchas personas por causa la pandemia del Covid-19, advirtiendo que es ahí donde se puede expresar la caridad, cuidando de quienes se encuentran en estas condiciones de vulnerabilidad. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar mensaje[/icon]

Jue 28 Ene 2021

¡JMJ Portugal 2023 ya tiene himno!

El 27 de enero, a las 11 horas de Lisboa, se hizo la presentación a través de las redes sociales de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), del himno oficial de este encuentro programado para 2023. “Hay prisa en el aire” es el nombre de la canción que fue escrita por el padre João Paulo Vaz y la composición musical es de Pedro Ferreira, ambos de la diócesis de Coimbra en Portugal, inspirada en el lema propuesto por el Papa Francisco para esta cita con la juventud del mundo entero: “María se levantó y partió sin demora” (Lc 1, 39). “Cuando me llamaron a comunicarme que nuestra canción había quedado elegida, fue una alegría muy grande. Las jornadas mundiales de la juventud son un marco muy importante en mi vida. Comprender que la letra que había hecho iba a ser cantada por el mundo entero fue una enorme alegría”, declaró el padre João Paulo Vaz, en el portal web oficial del evento. Este tema fue grabado en varias versiones. En portugués, por ser la lengua oficial del país que acogerá este evento, y la versión internacional en 5 idiomas: portugués, inglés, español, francés e italiano. Es importante recordar que la JMJ es un acontecimiento que congrega a los jóvenes del mundo entero con el Santo Padre. Tiene lugar todos los años en las diócesis el Domingo de Ramos y cada tres años hay una peregrinación a una ciudad elegida por el Papa. La primera tuvo lugar en Roma, en 1986, convocada por San Juan Pablo II, reuniendo cerca 300 mil asistentes y la última fue en Panamá, en 2019, con el lema: “He aquí la sierva del Señor; hágase en mí según tu palabra” (Lc 1,38), con una participación de 800 mil peregrinos, en donde el Papa Francisco convocó a los jóvenes del mundo entero a reunirse en Lisboa, Portugal, en el año 2023.

Mar 26 Ene 2021

Tres encíclicas, tres relaciones

Por: Mons. Fernando Chica Arellano - Desde que fuera elegido Sumo Pontífice, en el año 2013, Francisco ha publicado tres encíclicas: Lumen fidei (2013), sobre la fe; Laudato Si’ (2015), sobre el cuidado de la casa común; y Fratelli tutti (2020), sobre la fraternidad y la amistad social. Pienso que puede ser útil detenernos a hacer una lectura combinada de estos tres escritos del Santo Padre, trazando un cierto hilo conductor entre ellos. Esto nos permitirá aclarar cómo podemos mejorar nuestras relaciones con Dios, con la creación y con los demás. La relación con Dios, el Creador Ya desde su mismo título, la encíclica Lumen Fidei (en adelante, LF) busca “recuperar el carácter luminoso propio de la fe” (LF 4), recordando que “la fe nace del encuentro con el Dios vivo, que nos llama y nos revela su amor” (LF 4). En realidad, “la fe es la respuesta a una Palabra que interpela personalmente, a un Tú que nos llama por nuestro nombre” (LF 8). Es claro que “Dios no se puede reducir a un objeto. Él es Sujeto que se deja conocer y se manifiesta en la relación de persona a persona” (LF 36). Ahora bien, “quien recibe la fe descubre que las dimensiones de su ‘yo’ se ensanchan, y entabla nuevas relaciones que enriquecen la vida” (LF 39). Por eso “la fe no es únicamente una opción individual que se hace en la intimidad del creyente, no es una relación exclusiva entre el ‘yo’ del fiel y el ‘Tú’ divino, entre un sujeto autónomo y Dios. Por su misma naturaleza, se abre al ‘nosotros’, se da siempre dentro de la comunión de la Iglesia” (LF 39). Es decir, que, “en la fe, el ‘yo’ del creyente se ensancha para ser habitado por Otro, para vivir en Otro, y así su vida se hace más grande en el Amor” (LF 21). Al ensancharse, “la fe se muestra universal, católica, porque su luz crece para iluminar todo el cosmos y toda la historia” (LF 48). “No se trata solo de una solidez interior, una convicción firme del creyente; la fe ilumina también las relaciones humanas” (LF 50), “ilumina todas las relaciones sociales” (LF 54) y la misma “vida en sociedad” (LF 55). Desde aquí es fácil ver la conexión con las otras dos encíclicas. Por un lado, la historia de la Modernidad nos ha mostrado que intentar construir la fraternidad “sin referencia a un Padre común como fundamento último, no logra subsistir. Es necesario volver a la verdadera raíz de la fraternidad” (LF 54). Por otro lado, la fe, al revelarnos el amor de Dios, “nos hace respetar más la naturaleza, pues nos hace reconocer en ella una gramática escrita por él y una morada que nos ha confiado para cultivarla y salvaguardarla” (LF 55). La relación con la casa común, la Creación Una de las convicciones centrales de la encíclica Laudato Si’ (en adelante, LS) es que “todo está relacionado, y que el auténtico cuidado de nuestra propia vida y de nuestras relaciones con la naturaleza es inseparable de la fraternidad, la justicia y la fidelidad a los demás” (LS 70). En otro momento, vuelve el Papa sobre este argumento indicando: “Todo está relacionado, y todos los seres humanos estamos juntos como hermanos y hermanas en una maravillosa peregrinación, entrelazados por el amor que Dios tiene a cada una de sus criaturas y que nos une también, con tierno cariño, al hermano sol, a la hermana luna, al hermano río y a la madre tierra” (LS 92). Por eso “el descuido en el empeño de cultivar y mantener una relación adecuada con el vecino, hacia el cual tengo el deber del cuidado y de la custodia, destruye mi relación interior conmigo mismo, con los demás, con Dios y con la tierra. Cuando todas estas relaciones son descuidadas, cuando la justicia ya no habita en la tierra, la Biblia nos dice que toda la vida está en peligro” (LS 70). Dicho ahora en positivo, esto “implica una relación de reciprocidad responsable entre el ser humano y la naturaleza” (LS 67). Pero, por lo mismo, necesitamos recuperar “una sana relación con lo creado como una dimensión de la conversión íntegra de la persona” (LS 218).Así, Su Santidad invita “a todos los cristianos a explicitar esta dimensión de su conversión, permitiendo que la fuerza y la luz de la gracia recibida se explayen también en su relación con las demás criaturas y con el mundo que los rodea, y provoque esa sublime fraternidad con todo lo creado” (LS 221). Y es que “no habrá una nueva relación con la naturaleza sin un nuevo ser humano” (LS 118). Dicho de otro modo: “no podemos pretender sanar nuestra relación con la naturaleza y el ambiente sin sanar todas las relaciones básicas del ser humano” (LS 119). Las relaciones de fraternidad, las criaturas La encíclica Fratelli Tutti (en adelante, FT) quiere impulsar una “fraternidad abierta, que permita reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite” (FT 1). Por eso, dice el Papa, “no puedo reducir mi vida a la relación con un pequeño grupo, ni siquiera a mi propia familia, porque es imposible entenderme sin un tejido más amplio de relaciones: no solo el actual sino también el que me precede y me fue configurando a lo largo de mi vida. Mi relación con una persona que aprecio no puede ignorar que esa persona no vive solo por su relación conmigo, ni yo vivo solo por mi referencia a ella. Nuestra relación, si es sana y verdadera, nos abre a los otros que nos amplían y enriquecen” (FT 89). De aquí se sigue que, de acuerdo con la visión cristiana, “el amor no solo se expresa en relaciones íntimas y cercanas, sino también en las macro-relaciones, como las relaciones sociales, económicas y políticas” (FT 181). Dos concreciones son la amabilidad y la solidaridad. Escuchemos al Sucesor de Pedro cuando afirma: “El cultivo de la amabilidad no es un detalle menor ni una actitud superficial o burguesa. Puesto que supone valoración y respeto, cuando se hace cultura en una sociedad transfigura profundamente el estilo de vida, las relaciones sociales, el modo de debatir y de confrontar ideas” (FT 224). Por otro lado, la solidaridad significa “luchar contra las causas estructurales de la pobreza, la desigualdad, la falta de trabajo, de tierra y de vivienda, la negación de los derechos sociales y laborales” (FT 116). Un aspecto de la mirada católica al mundo es la opción preferencial por los pobres. Así, procurar “la amistad social no implica solamente el acercamiento entre grupos sociales distanciados a partir de algún período conflictivo de la historia, sino también la búsqueda de un reencuentro con los sectores más empobrecidos y vulnerables” (FT 233). “Por consiguiente, un pacto social realista e inclusivo debe ser también un ‘pacto cultural’, que respete y asuma las diversas cosmovisiones, culturas o estilos de vida que coexisten en la sociedad” (FT 219). Conclusión En resumen, las tres encíclicas convergen en subrayar que “para una adecuada relación con el mundo creado no hace falta debilitar la dimensión social del ser humano y tampoco su dimensión trascendente, su apertura al ‘Tú’ divino. Porque no se puede proponer una relación con el ambiente aislada de la relación con las demás personas y con Dios” (LS 119). La misma Biblia nos muestra “que la existencia humana se basa en tres relaciones fundamentales estrechamente conectadas: la relación con Dios, con el prójimo y con la tierra” (LS 66). Ojalá que nunca lo olvidemos. Mons. Fernando Chica Arellano Observador Permanente de la Santa Sede ante la FAO, el FIDA y el PMA

Sáb 23 Ene 2021

Papa Francisco a los comunicadores: "Ponerse en marcha" para "ir y ver"

La Santa Sede ha hecho público el mensaje del Papa Francisco para la 55ª Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, que se llevará a cabo el próximo 16 de mayo, en la solemnidad de la Ascensión del Señor, con el lema: «Ven y lo verás» (Jn 1,46), comunicar encontrando a las personas donde están y como son. "Deseo, por lo tanto, dedicar el Mensaje de este año a la llamada a “ir y ver”, como sugerencia para toda expresión comunicativa que quiera ser límpida y honesta: en la redacción de un periódico como en el mundo de la web, en la predicación ordinaria de la Iglesia como en la comunicación política o social. «Ven y lo verás» es el modo con el que se ha comunicado la fe cristiana, a partir de los primeros encuentros en las orillas del río Jordán y del lago de Galilea", resalta el Pontífice. El Papa advierte del riesgo de una información siempre igual, por lo que exhorta a los periodistas a “desgastar las suelas de los zapatos”, y a salir del confort o del “aplanamiento” existente en los “periódicos fotocopia” o en los noticieros que son “sustancialmente iguales”. Anima, igualmente, a salir y buscar historias o verificar ciertas situaciones. Al referirse al tema de las innovaciones tecnológicas destaca que “cada instrumento es útil y valioso sólo si nos empuja a ir y a ver la realidad que de otra manera no veríamos”. En su mensaje, el Pontífice desarrolla cinco aspectos que fácilmente pueden ser aplicables en este tiempo de pandemia y que sirven de sugerencia para toda la expresión comunicativa de los profesionales inmersos en los medios de comunicación. Ellos son: Desgastar las suelas de los zapatos – Esos detalles de crónica en el Evangelio – Gracias a la valentía de tantos periodistas – Oportunidades e insidias en la web – Nada reemplaza el hecho de ver en persona. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar mensaje de la JORNADA[/icon]

Jue 21 Ene 2021

“Domingo de la Palabra de Dios”. Entrevista con el padre Francisco Mejía

Dedicar un domingo completamente a la Palabra de Dios. Con esta intención el papa Francisco estableció el “Domingo de la Palabra de Dios”, una jornada que la Iglesia celebra cada tercer domingo del Tiempo Ordinario. Este año se realizará el próximo 24 de enero y tendrá como tema: ¡Mantengan firme la Palabra de la Vida! (cf. Fil 2, 16), tomado de la Carta de San Pablo a los Filipenses. Para ayudarnos a entender mejor esta celebración, que por segundo año consecutivo la Iglesia católica colombiana anima, hemos invitado al padre Francisco Mejía, director del Departamento de Catequesis y Animación Bíblica de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), quien nos explicará el significado del Domingo de la Palabra y cómo lo podremos vivir desde nuestra fe. ¿Qué se celebra el este domingo y por qué el papa nos ha convocado a esta celebración? R/ El próximo domingo, nosotros los católicos celebramos el “Domingo de la Palabra”. Es el tercer domingo del Tiempo Ordinario y el papa ha querido instaurar esta celebración para que nosotros, como católicos, le demos una centralidad a la Palabra de Dios, una palabra de Dios que nos ha hablado en Cristo, pero que continúa hablándonos y diciéndonos aquello que es fundamental de la vida. Esa es la invitación para todas las parroquias de Colombia, para todas las 77 jurisdicciones eclesiásticas, para que este día preparemos y celebremos con entusiasmo y con alegría esto que nos recomienda el Santo Padre. ¿Hay algún tipo de subsidio preparado? ¿Cómo nos podemos vincular a la celebración? R/ Se ha preparado un subsidio pastoral a nivel de toda la Iglesia Universal, elaborado desde el Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, se le ha enviado a todos los señores obispos y a las parroquias del país. Son unos subsidios donde se encuentran algunas consideraciones prácticas para preparar la celebración. El material incluye una oración de fieles, unos comentarios, unas pistas para la celebración, incluso hay un rito de entronización de la Palabra durante la misa; incluye unas vísperas para celebrar el “Domingo de la Palabra de Dios”, que se puede hacer desde el sábado, y una lectio divina. También algunos materiales de acuerdo con la situación que estamos viviendo para que la celebración se haga en familia. Este documento lo pueden adquirir en la página de la CEC www.cec.org.co. ¿Cuál debe ser nuestra respuesta como creyentes a esta invitación del Santo Padre? R/ El Papa dice que ha escogido esta fecha por varios motivos. En primer lugar, porque en la liturgia del tercer domingo del Tiempo Ordinario, todos los evangelios en los ciclos A B y C, ya sea de san Lucas, san Marcos o san Mateo, nos hablan de la predicación del Señor, el comienzo del anuncio mismo, de parte de Cristo, de lo que era su mensaje. En segundo lugar, porque es un domingo en el que en cualquier año litúrgico podemos encontrar una referencia explícita de esa comunicación, de ese anuncio que el Señor hacía de la obra de Dios. Este domingo todos los cristianos tenemos que pensar en varias cosas: Entender que la Palabra tenemos que ponerla en el centro de nuestra vida y no se puede quedar la Biblia en un estante de nuestra casa a veces lleno de polvo, sino que tiene que ser un instrumento para despertar nuestra fe. El Papa Benedicto XVI lo decía en su momento: “La Palabra tiene que ser la brújula que oriente el camino que tenemos que seguir”. Esta realidad no aplica solo para este domingo, se extiende a todos los domingos del año, durante toda nuestra vida, en la cotidianidad. Poner la Palabra en el centro, leerla, orar con ella y que ella se vaya convirtiendo en luz, en un faro iluminador para nuestro camino. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar SUBSIDIO DOMINGO DE LA PALABRA DE DIOS [/icon]