Pasar al contenido principal

Iglesia

Mar 27 Feb 2018

Espiritualidad y emocionalidad, ejes para una educación con sentido social

En el desarrollo del III Encuentro de líderes de Pastoral, organizado por la Confederación Nacional Católica de Educación (CONACED), se destacó la importancia de profundizar en estos componentes que permiten una formación integral del niño y joven. “CONACED viene apostándole para que cada una de sus instituciones afiliadas expresen la diferencia por ser colegios católicos. Que se forme desde lo pastoral, a partir de la emocionalidad y la espiritualidad (…) teniendo en cuenta que solo aquel que es capaz de admirar, de emocionarse, puede también llegar a lo espiritual como base fundamental. Estas dos inteligencias paralelas ayudan a la formación del ser que realmente impacte en la sociedad”, explicó la hermana Gloria Patricia Corredor, presidenta de CONACED. Durante la jornada, que contó con participación de alrededor de 215 delegados de pastoral educativa, docentes de educación religiosa y directivos, se profundizó también en el llamado que el documento de Aparecida hace a la educación sobre la importancia de ser y formar discípulos misioneros “para generar y dar vida”. De otra parte, se destacó el interés de esta confederación y de sus miembros por responder a la invitación del Papa Francisco a no dejarse robar la alegría, a animar una cultura del encuentro para dar el segundo paso hacia una nueva sociedad. Acompañaron este encuentro, desarrollado en las instalaciones de la Conferencia Episcopal de Colombia los conferencistas: Óscar Pérez Sayago, José Daniel Puche y John Miller, quienes profundizaron en la misión de la educación en un contexto innovador, a partir del carácter pastoral. Encuentre las memorias de este evento en: https://goo.gl/NhwUvm Detalles del encuentro en el siguiente Facebook live

Mar 27 Feb 2018

Participa del concurso “Cántale a la Reina de Colombia”

Dando inicio con los preparativos del centenario de coronación de la Virgen de Chiquinquirá como Reina y patrona de Colombia, desde la basílica nuestra señora del rosario se han abierto las inscripciones para el concurso “Cántale a la Reina de Colombia”, que busca tener el tema oficial de esta celebración. Mediante el concurso “Cántale a la Reina de Colombia” se está invitando a todos los músicos profesionales, aficionados, a los distintos grupos de cuerda, mariachis, corales y de más manifestaciones artísticas musicales para se inscriban y participen en la composición de la canción oficial del centenario. “Cántale a la Reina de Colombia” es un concurso organizado en conjunto con las dos emisoras católicas de Chiquinquirá y tendrá como jurados a personajes expertos en composición, arte musical e historia mariana. Los interesados podrán ingresar al siguiente enlace https://goo.gl/bjbMWs e inscribirse antes del viernes 16 de marzo, fecha en que se cerrará la convocatoria. Cabe recordar en la historia que el acto público nacional de la coronación tuvo lugar en la capital de la República el 9 de julio de 1919 en el periodo presidencial de Marco Fidel Suárez. Miles de personas llegaron de toda Colombia a la plaza de Bolívar para presenciar dicho acto. La última salida del Lienzo Renovado de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, tuvo lugar en el mes de septiembre del año pasado, durante la visita del Papa Francisco a Colombia.

Lun 26 Feb 2018

Escucha…

Por: Mons. Mauricio Vélez García - Todas las personas necesitan ser escuchadas para sanar la mente, el corazón y el espíritu; se trata de abrir un espacio que nos permita acoger al otro, valorar su existencia y motivar, en quien nos busque, la necesidad de expresar lo que tiene en su corazón. Lo cierto es que estamos demasiado ocupados en el día a día; el tiempo para comunicarnos y encontrar personas que nos escuchen, se hace cada vez más dispendioso. Hoy, escuchar al otro es un arte, una ciencia, un valor… En nuestras parroquias debemos fortalecer la pastoral de la escucha, sin afanes, sin inmediatismos y sin ese acelere que afecta la calidez y el tiempo que les debemos deparar a quienes se nos acercan. De una buena escucha se desprenden los vínculos, el respeto, la dignidad humana, la salud y el bienestar. Si hay un servicio que debemos cuidar en nuestras parroquias es precisamente la pastoral de la escucha, la cual exige poner en práctica varios momentos: 1. Todos estamos llamados a comprender que la auténtica escucha es un acto de amor, con el cual valoro la existencia del otro y le doy la importancia que se merece. Es un reconocimiento al otro. 2. De una buena escucha se desprende una buena respuesta, y por ende, una buena orientación a quien se nos acerca. El solo caminar hacia el otro, si hace bien su tarea de escuchar, me libera de muchas tensiones y me da la posibilidad de sentir que algo bueno está por llegar a mi vida. 3. La pastoral de la escucha se hace en todo momento y enriquece a quienes hacen parte del diálogo. Todos estamos para ayudarnos y no sólo en lo material, sino también en lo espiritual; es así como la escucha me permite reconocer la historia de quien está a mi lado y me involucra en su caminar, en sus problemas, sueños y metas. 4. Escuchar es una labor pastoral que estimula al otro y recoge de su experiencia, enseñanzas que le dan valor a mi propia existencia. De una buena escucha surgen infinidad de estímulos y se generan puentes de confianza capaces de hacer comunidad y tener un rebaño en el cual todos nos reconocemos, nos valoramos y apoyamos. 5. La escucha hace amistad y le da rostro a la Iglesia. Para escuchar no necesitamos de una profesión, de un título, o de un diploma, basta querer, tener tiempo y valorar a quien nos busca. Una amistad se forja gracias a una buena escucha. Cada uno, según nuestro rol en la Iglesia, está llamado a escuchar, y para cumplir esta labor pastoral, debemos tener tiempo, sin apuros y sin prejuicios; sólo así, estableceremos vínculos capaces de hacer diferencia en una sociedad donde el otro cada vez es más distante y la sociedad se va llenando de miedos que nos impiden interactuar con el otro. Hoy muchos deseamos ser escuchados, sin embargo, pocos queremos escuchar. + Mauricio Vélez García Obispo Auxiliar de Medellín

Vie 23 Feb 2018

La parroquia

Por: Mons. Ismael Rueda Sierra - La CV Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano, celebrada al principio de este mes, tuvo como tema central el tema de la parroquia como corazón de la nueva evangelización. Fue un discernimiento muy ponderado, actual y necesario por cuanto la realidad de la comunidad parroquial, su renovación y adecuación en el servicio del anuncio misionero del evangelio, ocupa un lugar, sin duda, relevante a la hora de definir cualquier itinerario pastoral. Hay un legado fundamental que proviene del Concilio Vaticano II, que plantea el desafío de la renovación de la Iglesia y en ella de todas sus estructuras y comunidades concretas. Considerada la Iglesia como Pueblo de Dios, busca que la comunión y la participación como acción corresponsable de todos sus miembros, pastores y laicos, cada uno de ellos según su vocación y carismas, construya la iglesia misionera. De esta manera, inspirada en la eclesiología y espiritualidad de comunión, la Iglesia crece y se fortalece como comunidad de comunidades. Tanto el resultado de una evaluación previa que se hizo sobre la realidad de las parroquias en nuestro país, consultadas diversas jurisdicciones eclesiásticas, así como la presentación y discernimiento sobre la identidad y misión de la parroquia con base en los anteriores criterios, habida cuenta el contexto social y cultural en que estamos inmersos, fue motivo para el examen que hiciéramos los obispos, en la espera de contribuir a que esta estructura e institución fundamental, además tan antigua del Pueblo de Dios, despegue definitivamente hacia su plena renovación, asumiendo los retos de la ahora presente. Importante resaltar los énfasis que fueron apareciendo a la hora de precisar lo que en últimas define la identidad y misión de nuestras parroquias, a la luz de la misma identidad y misión de la Iglesia, empeñada en una nueva evangelización. En efecto, y con el ánimo de resumir estas características, podemos ver en primer lugar el anuncio del kerigma, es decir el gozoso anuncio del Señor que invita a la conversión y al encuentro con Él, sin el cual, resultaría difícil construir todas las demás notas que definen la parroquia. En segundo lugar, la parroquia promueve la iniciación cristiana que va trazando un camino de madurez en la fe y que partiendo del bautismo, conduce a los creyentes a la responsable opción de su vocación específica y a su convencida participación en la vida y misión de la Iglesia. Como tercer aspecto se puede señalar la dimensión comunitaria. No se puede construir Iglesia que no sea comunidad al mismo tiempo. Llamados a participar en la común- unión a la que el Señor nos invita, la parroquia se va construyendo como comunidad de pequeñas comunidades, grupos y movimientos, invitados todos a vivir la espiritualidad de comunión, además camino seguro de santificación. Por último aparece como esencial la dimensión misionera. Parroquias en salida misionera, con vocación de llevar el testimonio y la Palabra de la experiencia vivida en el Señor a otros ambientes y realidades donde el Evangelio no ha llegado o se ha enfriado el corazón de las personas. Todas y cada una de estas características, hechas vida y aplicadas a través de los planes pastorales convenidos para cada Iglesia particular, con un conocimiento permanente de la realidad y de los signos de los tiempos, serán también motivo de transformación social y contribución esencial para construir una cultura del encuentro, de la convivencia y de la paz. + Ismael Rueda Sierra Arzobispo de Bucaramanga

Vie 23 Feb 2018

Bancos de Alimentos, una obra que hace vida el Evangelio

Contribuir a la reducción del hambre y la desnutrición en el mundo, por medio de recepción de alimentos excedentarios y de acciones orientadas a mejorar la calidad de vida de la población más necesitada, es el objetivo de esta obra que nace en el seno de la Iglesia Católica. Un esfuerzo que une la voluntad de empresas, instituciones y personas generosas para hacerle frente al flagelo del hambre en el mundo, donde según cifras oficiales “cada seis segundos un niño muere a causa de la malnutrición o por circunstancias relacionadas”. “En Colombia el 42.7% de la población vive en condiciones de inseguridad alimentaria, lo cual indica que no cuenta con disponibilidad suficiente y estable de alimentos, el acceso y el consumo oportuno y permanente de los mismos en cantidad, calidad e inocuidad por parte de todas las personas, bajo condiciones que permitan su adecuada utilización biológica, para llevar una vida saludable y activa (Min. Salud Colombia 2016) (ENSIN 2010). Ante este panorama, los Bancos de Alimentos del país no cesan en su empeño de continuar fortaleciendo esta obra, que tiene como meta para el 2022 “socorrer con alrededor de 65 kilos por cada persona que ayudamos en el año; esto nos va a obligar a estar movilizando alrededor de unas 35 a 38 mil toneladas”, señaló el padre Daniel Saldarriaga Molina, sacerdote de la Arquidiócesis de Bogotá, director del Banco de Alimentos de Bogotá y presidente de ABACO (Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia). Intervención: Padre Daniel Saldarriaga Sobre las proyecciones, durante el encuentro nacional desarrollado en las instalaciones de la Conferencia Episcopal de Colombia, agregó: “Queremos que el Banco de Alimentos sea un trabajo mucho más integral donde haya promoción de las personas a las que socorremos para no favorecer una cultura de la mendicidad y se genere interacción tanto con las empresas como con la academia, para que quienes quieren hacer mejor lo que significa ayudar con los excedentes o con algunos productos que deciden dar de baja, porque no tuvieron la rotación que se esperaba, encuentren en nosotros unos aliados responsables que saben hacer el ejercicio sin que entren estos productos a la cadena comercial o se dejen vencer antes de repartirlos”. Finalmente, tras indicar que “durante el 2017 se entregó alrededor de 27 mil toneladas entre todos los Bancos de Alimentos del país, beneficiando a alrededor de 550 mil personas”, destacó que la Asociación se está preparando también para que en lo público sea considerada como actor válido, efectivo y confiable en la atención a la población vulnerable.

Vie 23 Feb 2018

“Pedimos que el voto sea consciente, responsable y libre”: Mons. Elkin Àlvarez

En entrevista concedida a la revista Ecclesia de España, monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, obispo auxiliar de Medellín y secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), expone los criterios que la Iglesia católica propone a los ciudadanos para tener en cuenta en los próximos comicios electorales. A continuación la entrevista completa: Colombia entera está inmersa en un proceso electoral que la llevará a decidir quiénes serán sus nuevos representantes en el Congreso así como quién será su nuevo presidente. El 11 de marzo se realizarán las elecciones legislativas que colocarán a 102 senadores en el Senado de la República y a 166 representantes en la Cámara de Representantes. Más adelante el 27 de mayo los colombianos volverán a las urnas para elegir a un nuevo Jefe de Estado. En este contexto los obispos de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) fueron los primeros en alentar la participación responsable y ética de los colombianos en todas las etapas del proceso electoral, “derrotemos la indiferencia y comprometámonos” indicaron en su mensaje denominado: “Construir juntos un país que sea patria y casa para todos”. Para monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, secretario general de la CEC, las elecciones del presente año se desarrollan en un momento definitivo y trascendental para el proceso histórico del país, “encontramos que hay muy buenas posibilidades de hacer un proceso serio que realmente nos deje gobernantes que necesitamos en este momento en Colombia o también que el proceso electoral puede tomar vías contrarias a esas necesidades” nos dice. En medio de las actividades que los candidatos sostienen en las plazas y lugares más representativos a lo largo y ancho del territorio nacional en busca del voto, las propuestas, la propaganda y el debate se mudan también de las calles a las redes sociales, en este sentido el también obispo auxiliar de Medellín anota “…particularmente encontramos un fuerte riesgo de polarización de que las campañas se conviertan en mutuas acusaciones y que se vayan a los extremos, cosa que no conviene en este momento cuando lo que necesitamos es un proyecto común de país”. La historia de las elecciones en uno de los países más grandes de la Comunidad Andina está marcada por un alto ausentismo en las urnas, la última vez sólo el 40% de los ciudadanos habilitados para participar acudieron a depositar su voto. De aquí que los obispos hayan invitado a todos los hombres y mujeres de buena voluntad a reflexionar sobre su participación en la vida democrática del país, ejerciendo su derecho al voto. Consultado sobre si en esta ocasión la participación tendría novedades, monseñor Elkin Álvarez apunta a que en estas elecciones podría ser diferente, “creemos y por eso nos anticipamos a enviar un mensaje con palabras claras”, “buscamos ante todo promover el voto joven” nos comenta y precisa que esta invitación especial a los jóvenes se viene realizando desde la Conferencia Episcopal y a través de las diócesis. “Colombia necesita ser gobernada por personas íntegras, honestas, dignas, competentes, capaces de vencer la corrupción y la violencia, que se preocupen por la salvaguarda de la casa común”, indicaron los obispos en su mensaje a razón de estas elecciones llamando a los colombianos a elegir “a quienes quieran afrontar las situaciones de injusticia, enfermedad, drogadicción, desempleo y falta de oportunidades que está padeciendo el país en las ciudades y en los campos”. “Nosotros hemos señalado unos problemas que nos parecen nucleares en la realidad colombiana y que si no los abordamos, no los enfrentamos con perspectiva del bien común, tarde o temprano generarán más problemas para vida del pueblo”, precisa monseñor Álvarez Botero en diálogo con ECCLESIA y destaca –de las propuestas de los candidatos- que se han puesto en el centro del debate pre electoral temas verdaderamente importantes para la vida del pueblo colombiano pero también advierte que se notan posiciones muy encontradas en torno a temas fundamentales del camino de Colombia -como la reconciliación y la paz-. “Esperamos que se puedan proponer de manera que el pueblo tenga la verdadera posibilidad de enterarse y de decidir. Ojalá que se continúe también trayendo al debate electoral aquellas realidades que realmente necesita discernir el país en este momento” expresa. Tras el Acuerdo de Paz firmado con las FARC, el desarme y el acuerdo de paz con el ELN es uno de los frentes abiertos de la sociedad colombiana. Para el obispo entrevistado este es un tema que va estar en primera plana en todo el debate electoral. “(…) hay partidos que rechazan de plano cualquier intento de negociación con la guerrilla del ELN, mientras que otros exigen que se pongan condiciones antes de continuar el diálogo”, nos trasmite y deja claro que en medio de este panorama los obispos insisten en la vía del diálogo. Guerrilla y Gobierno “deben mostrar la verdadera disposición de escuchar el clamor del pueblo colombiano de parar las acciones violentas -que dañan finalmente a los más pobres y necesitados- y encontrar caminos para poder concertar cosas, para poder realmente solucionar el conflicto armado” apunta. El acompañamiento de la Iglesia en el proceso de paz en Colombia no es nuevo además de su papel mediador en los momentos de conflicto. “La Iglesia acompaña los intentos de diálogo, se ha convertido de alguna manera en la que siempre anima a buscar la salida negociada y esperamos que finalmente se pueda tener pronto”, nos dice monseñor Elkin Álvarez subrayando que el cese a la violencia es vital si se quiere alentar la confianza entre las partes y detener el sufrimiento de la población. Así las cosas, los obispos colombianos esperan que los católicos participen en la construcción integral de la nación, que oren mucho por el buen fruto del proceso electoral “esto lo hemos invitado reiteradamente para que no haya violencia, para que el ejercicio democrático sea en paz”, nos recuerda el secretario general de la CEC y va más allá “buscamos coherencia en las opciones, que los fieles católicos piensen en cuanto creen y siguen para poder hacer una elección de un candidato”. También “pedimos que el voto sea consciente, responsable y libre” nos recuerda el obispo colombiano y con gran esperanza agrega “que nosotros acudamos a las urnas, al ejercicio de la democracia sabiendo que es una participación en el derrotero, en el itinerario de vida de una nación”, “porque somos cristianos y al mismo tiempo ciudadanos y debemos impregnar de nuestra fe todas las dimensiones de nuestra vida”, finaliza.

Vie 23 Feb 2018

Seamos signos visibles de la fe en Jesús, alienta arzobispo Barranquilla

Durante el acto de inicio del Año Pastoral 2018 en la Arquidiócesis de Barranquilla, el obispo de esta ciudad, Monseñor Pablo Salas Anteliz, alentó a los fieles a ser signos visibles de la fe en Cristo, que venció a la muerte y “actúa sobre nosotros”. El evento tuvo lugar el pasado 17 de febrero en el coliseo del Colegio Sagrado Corazón, allí participaron representantes de las 158 parroquias del Atlántico, entre ellos movimientos apostólicos, comunidades religiosas masculinas y femeninas, seminaristas y laicos. “Queridos hermanos, nosotros estamos aquí reunidos porque queremos hacer un signo visible de nuestra fe, de la fe en Jesús. Estamos aquí porque el Señor nos ha convocado por Su Palabra”, afirmó Mons. Salas. Asimismo, recordó a los fieles que lo verdaderamente importante es la promesa de vida que hizo Jesús a los hombres. “Esta promesa de vida es la victoria de Cristo sobre la muerte, es Jesucristo glorioso, resucitado que ya actúa sobre nosotros, y eso es lo importante. Por eso tu vida todos los días, tiene que ser para la Gloria de Dios y tienes que vivir como un resucitado”, señaló. Durante el encuentro arquidiocesano, el Prelado también alentó a los fieles a “tomar en serio las cosas de Dios”. “Porque te tienes que tomar en serio el lugar, el servicio que haces, la responsabilidad que te han confiado, porque el tiempo que Dios nos da es para convertirnos, es para que vivamos esta victoria sobre la muerte, para que camines como luz del mundo”, afirmó. En ese sentido, Mons. Salas Anteliz invitó a los presentes a ir “a sus parroquias entusiasmados, esperanzados, que enciendan en el fuego de Dios, lo que el Señor les ha mandado”. “Que todos los sacerdotes seamos garantes de esa comunión entre los hermanos que por caminos distintos buscan a Dios”, añadió. Año del Encuentro El Arzobispo de Barranquilla también explicó que este 2018, denominado del Encuentro, “es un año de esperanza, es la oportunidad de encontrarnos con la hermosura de Cristo vivo en nosotros, de manera que anunciemos a todos el gozo de ser testigos de su amor, así construiremos una Pastoral del Encuentro viva en el departamento del Atlántico”. Según informó la Arquidiócesis de Barranquilla, el Año Del Encuentro es una experiencia pastoral para incentivar el encuentro personal con Jesús y que de allí se fortalezca la evangelización de la Arquidiócesis de Barranquilla en el Departamento del Atlántico. La misión es vivir permanentemente espacios de encuentro con Cristo a partir de la oración, del servicio y de la caridad, para que ese encuentro nos lleve a ser discípulos misioneros que anuncian con alegría, el amor de Dios y la justicia social en tierra atlanticense. Estas vivencias en conjunto se realizan con el objetivo de poner en sintonía a todos los fieles católicos y personas de buena voluntad en la necesidad imperante de volver la mirada a Dios como modo de vida que inspire la construcción de una sociedad más justa, solidaria y fraterna, una sociedad que camina hacia la paz. Fuente: Arquidiócesis de Barranquilla y agencia católica Aciprensa Fotos: Oficina de comunicaciones Arquidiócesis de Barranquilla

Jue 22 Feb 2018

El Papa llamó a los jóvenes a no temer y confiar en la Iglesia

Con motivo de la XXXIII Jornada Mundial de la Juventud, que se celebrará en todo el mundo el próximo 25 de marzo, Domingo de Ramos, el papa Francisco dirigió un mensaje a los jóvenes, en preparación para el encuentro internacional de los jóvenes, que se llevará a cabo en Panamá en enero de 2019. “Queridos jóvenes: el Señor, la Iglesia, el mundo, esperan también su respuesta a esa llamada única que cada uno recibe en esta vida. A medida que se aproxima la JMJ de Panamá, los invito a prepararse para nuestra cita con la alegría y el entusiasmo de quien quiere ser partícipe de una gran aventura”, animó el Pontífice. En su mensaje, el Santo Padre les recuerda que esta Jornada Mundial 2018 es un paso más en el proceso de preparación de la Jornada Internacional en Panamá en enero 2019: “Esta nueva etapa de nuestra peregrinación cae en el mismo año en que se ha convocado la Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos sobre el tema: Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”, señaló Francisco, y consideró que es una buena coincidencia, ya que la atención, la oración y la reflexión de la Iglesia “estarán puestas en ustedes, los jóvenes, con el deseo de comprender y, sobre todo, de «acoger» el don precioso que representan para Dios, para la Iglesia y para el mundo”. El Santo Padre recordó además que el tema elegido para esta Jornada es la figura de María, “la joven de Nazaret, a quien Dios escogió como Madre de su Hijo, para que nos acompañe en este viaje con su ejemplo y su intercesión”. “Ella camina con nosotros hacia el Sínodo y la JMJ de Panamá”, destacó el Pontífice, y advirtió que “si el año pasado nos sirvieron de guía las palabras de su canto de alabanza: ‘El Poderoso ha hecho obras grandes en mí’, enseñándonos a hacer memoria del pasado, este año tratamos de escuchar con ella la voz de Dios que infunde valor y da la gracia necesaria para responder a su llamada: ‘No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios’”. Al igual que María, Francisco invitó a los jóvenes a no tener miedo: “María, como otros personajes de las Sagradas Escrituras, tiembla ante el misterio de la llamada de Dios, que en un instante la sitúa ante la inmensidad de su propio designio y le hace sentir toda su pequeñez, como una humilde criatura”, describió, y explicó que “es la ‘emoción’ que sentimos frente a las decisiones sobre nuestro futuro, señala el Pontífice, nuestro estado de vida, nuestra vocación. En esos momentos nos sentimos turbados y embargados por tantos miedos”. Y ustedes jóvenes, preguntó el Papa: “¿Qué miedos tienen? ¿Qué es lo que más les preocupa en el fondo? En muchos de ustedes existe un miedo de ‘fondo’ que es el de no ser amados, queridos, de no ser aceptados por lo que son”. “En los momentos en que las dudas y los miedos inundan nuestros corazones – consideró Francisco- resulta imprescindible el discernimiento. Nos permite poner orden en la confusión de nuestros pensamientos y sentimientos, para actuar de una manera justa y prudente. En este proceso, lo primero que hay que hacer para superar los miedos es identificarlos con claridad, para no perder tiempo y energías con fantasmas que no tienen rostro ni consistencia”. El Papa sostuvo que “el discernimiento se vuelve indispensable cuando se trata de encontrar la propia vocación”, y para esto, se necesita “el silencio de la oración para escuchar la voz de Dios que resuena en la conciencia”. El primer motivo para no tener miedo, afirmó el Santo Padre, es precisamente el hecho de que Dios nos llama por nuestro nombre. “Cuando Dios llama por el nombre a una persona le revela al mismo tiempo su vocación, su proyecto de santidad y de bien, por el que esa persona llegará a ser alguien único y un don para los demás”, señaló. “Jóvenes, la gracia de Dios toca el hoy de su vida, los ‘aferra’ así como son, con todos sus miedos y límites, pero también revela los maravillosos planes de Dios. Ustedes, jóvenes, tienen necesidad de sentir que alguien confía realmente en ustedes. Saben que el Papa confía en ustedes, que la Iglesia confía en ustedes. Y ustedes, ¡confíen en la Iglesia!”, llamó el Pontífice. “Los invito a seguir contemplando el amor de María, un amor atento, dinámico, concreto. Un amor lleno de audacia y completamente proyectado hacia el don de sí misma. Una Iglesia repleta de estas cualidades marianas será siempre Iglesia en salida, que va más allá de sus límites y confines para hacer que se derrame la gracia recibida”, concluyó. Leer mensaje completo de la Jornada Mundial de la Juventud Fuente: Agencia AICA Foto: Tomo de internet