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vida

Mar 6 Mar 2018

Católicos reflexionan sobre su responsabilidad en la participación ciudadana

Bajo el lema “Caminos para edificar una sociedad reconciliada y armonizada en la justicia y en el amor”, se realizó el 3 de marzo la primera jornada de formación ProVida y católica, en la Conferencia Episcopal de Colombia. Brindar herramientas prácticas para la formación de formadores en la cultura de la vida frente a los retos y dinámicas actuales que desafían la pastoral, fue el objetivo del encuentro liderado por el departamento de Promoción y Defensa de la Vida. El compromiso de la participación de los católicos en los ámbitos de la sociedad a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia – Principalmente en la política para la construcción del Bien común; análisis de la realidad política y de la comunidad internacional; y acción eclesial en el contexto de la Doctrina Social de la Iglesia hicieron parte de las temáticas analizadas durante la jornada, que contó con la participación de 40 asistentes y más de 5000 visitas en durante la transmisión Facebook live.

Lun 4 Dic 2017

CELAM llama a católicos a no ser indiferentes ante ataques a la vida y familia

El Departamento de Familia, Vida y Juventud del CELAM, llamó a los católicos a no permanecer impasibles o silenciosos ante los ataques que sufren la vida y la familia en América Latina y que responden a “una agenda de minorías ideologizadas, con poder económico”. En un mensaje difundido este 29 de noviembre, el Departamento de Familia, Vida y Familia del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), señaló que la Iglesia en el continente “no puede permanecer ajena e insensible ante esta cruda realidad”. “Bien mencionaba su Santidad el Papa Francisco en su homilía en Bogotá el pasado 8 de septiembre ‘Las tinieblas del irrespeto por la vida humana que siega a diario la existencia de tantos inocentes, cuya sangre clama al cielo’, ‘es un llamado apremiante a la Iglesia y a la Sociedad a instaurar la cultura de la vida frente a la anti cultura de la muerte’”, señaló. El documento fue emitido al final del Encuentro Latinoamericano y del Caribe de Agentes de Pastoral de la Vida que se realizó del 20 al 24 de noviembre en la capital colombiana. El texto señaló que los ataques contra la vida y la familia en el continente responden a “una agenda de minorías ideologizadas, con poder económico, con un eje conceptual (la ideología de género) y un eje operativo (los derechos sexuales y reproductivos), cuyo conjunto fractura la persona humana y todas sus dimensiones relacionales”. Esta agenda, advirtió, busca producir “profundos cambios en el estado de derecho, en la tradición jurídica de nuestras distintas naciones, originando efectos legales contra la vida, la familia, la libertad religiosa y objeción de conciencia”. El mensaje recordó que en 2018 se cumplirán 50 años de la Encíclica Humanae Vitae, del Beato Pablo VI, que “describió con precisión inquietante y profética las realidades que vivimos en nuestro tiempo, algunas de las cuales han herido a la persona humana, a la procreación y a la vida”. Por ello, insistió en su llamado a los fieles a no permanecer “impasibles y en algunos casos silenciosos o silenciados”. “Es hora de despertar, como aconseja el apóstol Pablo”, indicó. “El Señor cuando pregunta a Caín ‘¿Qué has hecho?’, se dirige al hombre de hoy, particularmente a nosotros, ante un cambio real de la cultura”. En ese sentido, el Departamento de Familia, Vida y Juventud del CELAM invitó a “conformar una Red Panamericana, para que acoja cada realidad nacional, en la protección de la vida, familia, persona, libertad religiosa, democracia, Derechos Humanos y medio ambiente, mediante una agenda común, liderando estrategias a corto, mediano y largo plazo”. “Es nuestro deseo que siguiendo el ejemplo de tantas Conferencias Episcopales que han conformado la Comisión Episcopal de Vida, alentamos a que tengan un lugar especial para desarrollar la tarea no solo de acompañamiento pastoral, sino de liderazgo en análisis de la realidad de las naciones, asesoradas por expertos de las diferentes disciplinas, fortaleciéndose con comités de bioética con enfoque personalista, a partir de experiencias y espacios de formación de laicos, sacerdotes y seminaristas”. El mensaje también alienta a acoger a las “mujeres embarazadas en dificultad y realizar un acompañamiento misericordioso a aquellas personas que han sufrido un aborto”. Fuente: Agencia católoca ACIPRENSA Foto: Imagen referencial / Foto: Pixabay (Dominio Público)

Jue 7 Sep 2017

“Seguiremos luchando con tesón para implantar la justicia y la paz”

Con estas palabras el cardenal colombiano Rubén Salazar Gómez, cerró los actos programados con el Papa Francisco en la ciudad capitalina, recordando que la Iglesia seguirá trabajando por el cuidado de las víctimas, la lucha contra la pobreza, la injusticia y la violencia. “La pobreza y miseria de amplios sectores de la población, fruto en gran parte de la injusticia y la violencia impiden el acceso de millones de colombianos a los derechos humanos fundamentales, como la nutrición, la salud, el techo el trabajo, la tierra y todo aquello que hace la vida digna y plenamente humana”, afirmó. El también presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), prometió al Sumo Pontífice acatar cada uno de sus mensajes y recomendaciones, velando por la protección y defensa de los derechos humanos, defendiendo la vida desde el momento mismo de su concepción hasta la muerte natural. “Le prometemos Santo Padre que su palabra, la palabra del Evangelio de la vida, estará siempre en nuestro corazón. Allí se convertirá en fuente permanente de inspiración para encontrar juntos los senderos del respeto, aceptación, cuidado, protección de la defensa y promoción de la vida en todas sus etapas, desde la concepción hasta la muerte natural, desde la niñez y la juventud hasta la ancianidad”, afirmó el prelado. Finalmente, el jerarca de la iglesia colombiana agradeció la presencia y cariño manifestados por el Papa y dijo que orará para que “el Señor lo ilumine, fortalezca, proteja y le permita guiar siempre a la Iglesia por los caminos del Evangelio”.

Mié 9 Ago 2017

Celebremos la vida, recemos la Novena por la Vida

El Departamento de Promoción y Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) pone a disposición de los fieles la cartilla Novena por la Vida. [tabs class="horizontal"][tab title="PRESENTACIÓN" icon="Icon name 1"] La Novena por la Vida, un material que permitirá ambientar la preparación espiritual previo al lanzamiento de la Campaña Fecundar Vida, porque todos somos hijos que promueve el departamento de Promoción y Defensa de la Vida.. [/tab][tab title="DETALLE" icon="icon name 2"] Autor(a):Departamento de Promoción y Defensa de la Vida Catálogo: Cartilla Idioma: Español Número de Páginas: 24 Editora: Conferencia Episcopal de Colombia Año de publicación:2016 Dimensiones: 21.5 x 19.5 [/tab][tab title="COMENTARIOS" icon="Icon name 1"] (function(d, s, id) { var js, fjs = d.getElementsByTagName(s)[0]; if (d.getElementById(id)) return; js = d.createElement(s); js.id = id; js.src = "//connect.facebook.net/es_LA/sdk.js#xfbml=1&version=v2.5"; fjs.parentNode.insertBefore(js, fjs); }(document, 'script', 'facebook-jssdk')); [/tab][/tabs] Mayores informes: PBX: 437 55 40 Ext. 264 Celular: 3138808447 Correo electrónico: [email protected]

Mar 1 Ago 2017

¿Quién mató a Pedrito? II

El feto oye, ve experimenta, recuerda e incluso aprende en el útero... Y lo más importante, ¡siente! Estos son los maravillosos resultados de las últimas investigaciones sobre la vida prenatal. Las investigaciones de la fetología y la psicología prenatal, las más jóvenes ramas de la medicina, han demostrado que el niño intrauterino es un ser hipersensible, mucho más consciente y receptivo de lo que nos podíamos imaginar. El feto oye, ve, entiende, recuerda y responde. En el útero se comporta como un ser humano que es. Cuando se aburre se chupa el dedo o salta a la cuerda con el cordón umbilical. A las 10 semanas, su personalidad es tan acusada que se podría hacer la tarjeta de identidad, puesto que tiene huellas digitales, únicas e irrepetibles. A las 12 semanas, es capaz de sostener una pelota entre las manos, facultad que pierde y no recuperará hasta cinco meses después de nacer. Tan persona como el recién nacido y el lactante, sólo que es una etapa distinta de la vida. Gracias a las tecnologías de finales de los años 60 y 70, afirma thomas verny, psiquiatra canadiense y autor de la obra “la vida secreta del niño antes de nacer”, se ha podido estudiar al bebe intrauterino en su hábitat natural sin perturbarle. Lo que ha dado una imagen espectacularmente distinta del feto, que nada tiene que ver con el ser pasivo y sin mente de los textos tradicionales de pediatría. Según las investigaciones de los neurólogos y obstetras estudiosos, escuchemos lo siguiente: • El feto puede oir, ver, degustar, experimentar e, incluso, aprender en el útero. Pero, lo más importante es que puede sentir. • Como consecuencia: lo que el niño siente y percibe comienza a modelar sus actitudes y las expectativas que tiene con respecto a sí mismo. • La principal fuente de estos mensajes formadores es la madre del niño. Esto no significa que toda preocupación, duda o ansiedad fugaces que una mujer experimenta durante el embarazo repercutan en su hijo. Lo importante son los patrones de sentimientos profundos y constantes. • Lo que un hombre siente hacia su mujer y el niño no nacido, es uno de los factores más importantes en el éxito o fracaso de un embarazo. No más abortos, por favor. No más pedritos tirados en cajas de cartón. No más asesinatos a creaturas indefensas. Permitamos que la vida surga y no matemos la vida de un inocente. Siempre que ocurre un aborto en la ciudad, ocurre el asesinato de unos padres, de unos hermanos, de una familia. Se asesina nuestra propia sociedad, nuestra cultura y nuestra dignidad. [icon class='fa fa-download fa-2x'] ¿Quién mató a Pedrito? I[/icon]

Lun 17 Jul 2017

¿Quién mató a Pedrito? I

Escrito por: Mons. Gonzalo Restrepo - “El martes 11 de noviembre de 1999 fue encontrado un recién nacido en una caja de cartón, detrás de un almacén de nuestra ciudad. Aparentemente el bebito nació ese mismo día y cuando fue encontrado, a las 9:30 de la noche, había estado muerto alrededor de ocho horas o más. La autopsia reveló que el niño había sido acuchillado siete veces, sufrió un fuerte golpe en la cabeza y fue estrangulado con un cierre (cremallera). En la caja se encontró la placenta y el cordón umbilical roto. Aparentemente el bebito nació sin asistencia médica”. No es un caso extraño ni excepcional. Casos como éstos encontramos muy frecuentemente en nuestro medio. No fue encontrado en un almacén fantasma y en una ciudad lejanísima, sino en un almacén muy conocido, de mucho prestigio y en nuestra propia ciudad. Como este caso hay muchos casos. Pero, ¿quiénes serán sus padres? ¿dónde estará su mamá? Pedrito no alcanzó a nacer. Fue abortado y tirado a la calle en una caja de cartón. Fue tratado como cualquier cosa, como uno tira un mueble viejo, como se bota la basura al cesto. Pedrito fue asesinado, y ahora, nadie es culpable. Un nuevo crímen ha quedado en el anonimato. Una personita que no se le ha permitido vivir, mejor no se le ha permitido seguir desarrollando su vida, porque pedrito comenzó a vivir desde la concepción, desde que el óvulo de mamá y espermatozoide de papá se unieron para propiciar el inicio de una nueva vida, fruto del amor. ¿Qué podemos hacer? ¿Quién podrá responder? Si alguien quiere reconocer el cadáver de pedrito, lo tenemos en el anfiteatro de la ciudad. Todavía él conserva la esperanza de que sus padres vengan a reconocerlo y le brinden el cariño que le faltó desde su concepción hasta la muerte. No más abortos, por favor. No más pedritos tirados en cajas de cartón. No más asesinatos a creaturas indefensas. Permitamos que la vida surja y no matemos la vida de un inocente. Siempre que ocurre un aborto en la ciudad, ocurre el asesinato de unos padres, de unos hermanos, de una familia. Se asesina nuestra propia sociedad, nuestra cultura y nuestra dignidad. + Gonzalo Restrepo Restrepo Arzobispo de Manizales

Mar 14 Feb 2017

“Ley de donación de órganos no es perversa pero exige reglamentación”

La ley 1805 aprobada por el Congreso de la República en agosto pasado y ratificada recientemente, que establece la donación de órganos en Colombia con carácter obligatorio, no tiene nada de “perversa”, así lo afirmó monseñor Juan Vicente Córdoba Villota, obispo de Fontibón y presidente de la Comisión Episcopal de Vida. El prelado manifestó que la posición de la Iglesia católica sobre esta Ley “no tiene contradicción con la doctrina, ni afecta la dignidad de la persona, sino todo lo contrario, está a favor de la vida, es una obra de caridad y de amor ante alguien que necesita un órgano”. Monseñor Córdoba Villota pidió ser estrictos con los controles de la nueva reglamentación en la donación de órganos, para evitar que existan intereses particulares que se puedan beneficiar con ello. Por eso el llamado o posición de la Iglesia es un “No” rotundo frente al tráfico de órganos. Por último el obispo dijo que un ejemplo de estas irregularidades se podría dar en el sector rural, ya que muchas personas no tienen acceso a las Notarías, por lo que planteó la necesidad de acercar estas entidades a la comunidad para que en caso de no querer ser donante, puedan expresarlo sin problemas. La ley 1805 de 2016 aprobada por el Congreso de la República establece que la donación de órganos en Colombia es obligatoria, esto con el propósito de aumentar la disponibilidad de órganos y tejidos en el país y satisfacer la necesidad de más de 3 mil personas que están a la espera de un donante. Según la Ley los colombianos que no quieran ser donantes deberán informarlo previamente a su EPS al momento de afiliarse, o enviar una expresión de voluntad notariada y radicada ante el Instituto Nacional de Salud. Fuente: Of. comunicaciones arq. de Bogotá Foto: Tomada de internet

Mié 25 Ene 2017

Y el tiempo no se detiene…

Por: Mons. Jaime Uriel Sanabria Arias - Como todos los años, para comenzar se hacen muchas promesas, que generalmente se quedan en eso, porque están movidas por la emoción del momento, y en un contexto que normalmente e stá fuera de lo cotidiano. Por eso, ahora que estamos más tranquilos los invito a pensar más en serio el año que hemos comenzado. Hay dos maneras de enfocar la vida: como derecho, algo que se nos debe; o como un don, un regalo que hemos recibido. ¿Qué sucede cuando pensamos que la vida es un derecho, algo que se nos debe? Cuando creemos que la vida es algo que se nos debe, entonces nos sentimos propietarios de nosotros mismos. Pensamos que la manera más acertada de vivir es organizarlo todo en función de nosotros mismos. Yo soy lo único importante. ¿Qué importan los demás? Algunos no saben vivir sino exigiendo. Exigen y exigen siempre más. Tienen la impresión de no recibir nunca lo que se les debe. Son como niños insaciables, que nunca están contentos con lo que tienen. No hacen más sino pedir, reivindicar, lamentarse. Sin apenas darse cuenta, se convierten poco a poco en el centro de todo. Ellos son la fuente y la norma. Todo lo han de subordinar a su ego. Todo ha de quedar instrumentalizado para su provecho. La vida de la persona se cierra entonces sobre sí misma. Ya no se acoge el regalo de cada día. Desaparece el reconocimiento y la gratitud. No es posible vivir con el corazón dilatado, sino con el corazón endurecido. Se sigue hablando de amor, pero “amar” significa ahora poseer, desear al otro, ponerlo a mi servicio. Esta manera de enfocar la vida conduce a vivir cerrados a Dios. La persona se incapacita para acoger. No cree en la gracia, no se abre a nada nuevo, no escucha ninguna voz, no sospecha en su vida presencia alguna. Es el individuo quien lo llena todo. Por eso es tan grave la advertencia del evangelio de San Juan: “La Palabra era la luz verdadera que alumbra todo hombre. Vino al mundo… y en el mundo no la conoció. Vino a su casa, y los suyos no la recibieron”. Nuestro gran pecado es vivir sin acoger la luz. ¿Qué sucede cuando entendemos la vida común don, un regalo que hemos recibido? Vivimos eternamente agradecidos porque reconocemos que no somos nosotros quienes hemos decidido nacer. No nos escogimos a nosotros mismos; no elegimos a nuestros padres ni nuestro pueblo. Todo nos ha sido dado por Dios, y con la intervención de nuestros padres. Vivir es ya, desde su origen, recibir para dar. La única manera acertada es también ofrecerme, donarme con todas mis capacidades y mi tiempo por el bien de los demás, vaciarme de mis riquezas para enriquecer a quienes me rodean y al mundo donde vivo. “Hay más alegría en dar que en recibir”. + Jaime Uriel Sanabria Arias Vicario Apostólico de San Andrés y Providencia