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iglesia católica colombiana

Jue 13 Jul 2023

Diócesis de Santa Rosa de Osos designa administrador

Tras las sentidas honras fúnebres y exequias de monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, celebradas durante los últimos días en los municipios de Santa Rosa de Osos y El Retiro (Antioquia), este miércoles, 12 de julio, el Colegio de Consultores de la Diócesis de Santa Rosa de Osos nombró al padre Luis Alfonso Urrego Monsalve como Administrador Diocesano de esta Iglesia particular. El presbítero ha dicho que asume esta misión con dolor por la partida de su pastor, pero también con responsabilidad, compromiso y sinodalidad, dando continuidad al importante camino pastoral en favor de la vida, la reconciliación y la paz, trazado por monseñor Elkin, quien, con gratitud, será siempre recordado. El sacerdote de 48 años de edad, oriundo del municipio de Liborina, venía desempeñándose como párroco en el templo María Inmaculada de Yarumal y vicario episcopal de la zona pastoral norte. Además de acompañar parroquias de varios municipios, ha sido vicario general, director administrativo, canciller y delegado de diversas pastorales de la diócesis, así como rector y formador en el Seminario Diocesano Santo Tomás de Aquino. Esta es la segunda vez que el padre Luis Alfonso presta dicho servicio, pues en diciembre del año 2019 ya había sido elegido por sus hermanos sacerdotes como administrador, luego que monseñor Jorge Alberto Ossa Soto, quien pastoreó esa jurisdicción durante ocho años, tomara posesión como Arzobispo de Nueva Pamplona.“Asumirlo ahora por la pérdida, por el deceso de nuestro pastor, quien apenas comenzaba su pastoreo, que también se vislumbraba demasiado fecundo para el tiempo corto que logró estar, es muy triste” ha dicho el sacerdote. “Que siempre mantengamos los ojos fijos en Jesús para no perder el horizonte ni desviarnos del camino", recordó el presbítero a propósito de las múltiples enseñanzas de monseñor. Este nombramiento por parte del órgano conocido como Colegio de Consultores se da conforme a lo establecido en el Código de Derecho Canónico. Quien asume como administrador, en este caso, el padre Luis Alfonso Urrego Monsalve, se hace cargo interinamente del gobierno de la diócesis mientras la sede esté vacante, es decir, hasta que el Papa nombre un nuevo obispo para la Iglesia particular. Biografía El padre Luis Alfonso Urrego Monsalve nació en el municipio de Liborina (Antioquia) el 11 de mayo de 1975. Hijo de la señora Berta Monsalve García y del señor Emiro Arturo Urrego Vásquez; es el menor de ocho hermanos. Fue ordenado sacerdote para la Diócesis de Santa Rosa de Osos el 21 de noviembre de 2000 en la Parroquia Catedral Santa Rosa de Lima de Santa Rosa de Osos por S.E. Mons. Jairo Jaramillo Monsalve. Realizó sus estudios de primaria en la Escuela Urbana de Liborina, su secundaria la cursó en el Seminario Menor Santo Tomás de Aquino, de Santa Rosa de Osos. Estudió filosofía y teología en el Seminario Diocesano Santo Tomás de Aquino. Hizo su Licenciatura en Filosofía y Educación Religiosa en la Fundación Universitaria Católica del Norte. Entre sus oficios pastorales, se destacan: Vicario parroquial de Nuestra Señora de los Remedios en el municipio de Remedios; rector, profesor y ecónomo del Seminario Diocesano Santo Tomás de Aquino, promotor vocacional diocesano, párroco de Nuestra Señora del Carmen en El Bagre, párroco de Jesús de la Buena Esperanza de Amalfi. Fue delegado diocesano de Pastoral Social, delegado de pastoral infantil; director administrativo y ecónomo de la Diócesis de Santa Rosa de Osos, coordinador regional de Pastoral Social, director Pro-vivienda y Bienestar Social; delegado de la vida consagrada; párroco de Nuestra Señora Del Rosario en Donmatías. Así mismo, fue gerente de la Cooperativa Fraternidad Sacerdotal; miembro del Consejo Presbiteral, del Consejo de Asuntos Económicos y el Colegio de Consultores; Vicario General y Canciller. Recientemente venía desempañándose como párroco de María Inmaculada en Yarumal y Vicario Episcopal de la zona pastoral norte de la diócesis.

Mié 12 Jul 2023

Fallece hermano de monseñor Joselito Carreño Quiñones

La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) expresa sus más sentidas condolencias a monseñor Joselito Carreño Quiñones, Vicario Apostólico de Inírida, por el sensible fallecimiento de su hermano, el señor José Marcelino Carreño Quiñones. El episcopado colombiano, al elevar plegarias por su eterno descanso, manifiesta también su compañía y solidaridad con la familia de monseñor Joselito.

Mié 12 Jul 2023

Obispos del Valle del Cauca piden cesar hostigamientos y atentados en sus comunidades

Ante la grave crisis social y humanitaria que padecen múltiples comunidades en el Valle del Cauca, a través de un comunicado, el arzobispo de Cali y los obispos de Palmira, Cartago, Buga y Buenaventura, piden a los actores armados ilegales detener todo tipo de hostigamiento y atentado contra la vida y bienes de las personas y familias de la región, así como contra la naturaleza. En este mensaje, monseñor Luis Fernando Rodríguez Velásquez, monseñor Édgar de Jesús García Gil, monseñor César Alcides Balvín Tamayo, monseñor José Roberto Ospina Leongómez y monseñor Rubén Darío Jaramillo Montoya, dan continuidad al llamado general hecho por todos los obispos al pueblo colombiano al cierre de su más reciente Asamblea Plenaria, titulado “Apártense del mal y hagan el bien, busquen la paz y corran tras ella” (1 Pedro 3, 11). Esta urgencia está enmarcada en la “dolorosa situación de incertidumbre, zozobra y miedos que buena parte de nuestra población está sufriendo a causa de los atentados, asesinatos, secuestros, desplazamientos, desapariciones, reclutamientos forzados, extorsiones y amenazas de diversa índole, especialmente contra jóvenes -hombres y mujeres- y empresarios pequeños y grandes”, así lo han dicho los prelados, quienes también evocan varias situaciones concretas que se han presentado recientemente en municipios como Tuluá, Buenaventura, Jamundí y Cali. Además, en el mensaje, los cinco pastores de la Iglesia que peregrina en el Valle del Cauca, recuerdan que el “respeto de la vida humana no es asunto religioso, ni un capricho de la Iglesia Católica, sino un “derecho fundamental que supera creencias y posiciones políticas, religiosas, ideológicas, sociales o culturales”. Por esto, han renovado su compromiso con orar, trabajar y continuar estableciendo puentes para la paz.

Dom 9 Jul 2023

Monseñor Luis José Rueda Aparicio, designado nuevo Cardenal de Colombia

El arzobispo de Bogotá y actual presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), monseñor Luis José Rueda Aparicio, será el nuevo Cardenal de Colombia. El Consistorio para su creación como purpurado se llevará a cabo el próximo 30 de septiembre. Así lo anunció el papa Francisco desde el balcón del palacio apostólico del Vaticano luego de realizar el rezo mariano del Ángelus este 9 de julio. Tras recibir la noticia a primera hora de la mañana en Colombia y encomendarse a Dios, a la Santísima Virgen del Rosario de Chiquinquirá y a San José, monseñor Rueda Aparicio, envió un mensaje en el que expresa que “esta designación es misericordia pura de Dios”. Afirmó que asume la nueva misión con responsabilidad, alegría, gratitud, humildad y disposición de servir. El Primado de Colombia pide la guía del Espíritu Santo en este nuevo encargo y afirma que espera que esta designación sirva para que todos los colombianos asuman un compromiso con el trabajo por la paz, la vida y la reconciliación. “Que cese la guerra, que cese la violencia, que se acaben los secuestros, que podamos trabajar en unidad, que se acaben las polarizaciones y juntos caminemos en fraternidad, que Colombia pueda tener esperanza todos los días”, precisó monseñor Luis José. Monseñor Rueda expresó su gratitud con el Santo Padre, con los formadores que han estado en todas las etapas de su vida, así como con sus hermanos obispos, que, según ha dicho, han sido también ejemplo para su vida. En el mensaje, monseñor Luis José aprovechó para presentar nuevamente al Señor la vida de monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, obispo de Santa Rosa de Osos, quien falleció este 8 de julio, envió consuelo para su familia y para su diócesis. En contexto: Durante la ceremonia, conocida como Consistorio, que se llevará a cabo el 30 de septiembre, monseñor Luis José Rueda Aparicio, junto a los otros 20 nuevos cardenales que tendrá la Iglesia Católica universal en esta oportunidad, recibirán el título y la bendición por parte del Papa. En la actualidad la Iglesia colombiana tiene tres cardenales. Se trata de monseñor Pedro Rubiano Sáenz, monseñor Rubén Salazar Gómez y monseñor Jorge Enrique Jiménez Carvajal. Sin embargo, por su edad, en un posible cónclave podrían participar con voz pero sin voto. Escuche el mensaje de monseñor Luis José Rueda Aparicio: Biografía: Monseñor Luis José Rueda Aparicio nació en San Gil (Santander) el 3 de marzo de 1962, en un hogar cristiano conformado por el señor Luis Emilio Rueda Joya (q.e.p.d.) y la señora Socorro Aparicio Mejía (q.e.p.d.). Es el décimo entre once hermanos: Martha, Helí, Gilberto (q.e.p.d.), Gilma, Edilia, Gloria, Ana Luisa, Nelly, Gilberto, Edgar. Estudios Cursó los estudios primarios entre 1969 y 1974, en escuelas de San Gil. Los estudios secundarios los realizó entre 1975 y 1980, en el Colegio Nacional San José de Guanentá Integrado de San Gil, donde obtuvo el título de Bachiller Técnico en Metalistería. Antes de ingresar al Seminario encontró en el trabajo un buen ambiente de formación humana. Laboró con su padre, don Luis Emilio, en construcción. Varios oficios breves entre los que recuerda especialmente su servicio a SEPAS vendiendo el periódico José Antonio, y sus programas deportivos en la Emisora Armonías de San Gil, ocuparon el tiempo en el año 1981. Durante el año 1982 trabajó en la fábrica Cementos Hércules S. A. como operante en el laboratorio, hasta el día de su ingreso al Seminario. El 31 de enero de 1983 inició sus estudios de Filosofía en el Seminario Conciliar San Carlos de San Gil, institución que durante diez años permaneció cerrada y que fue reorganizada por el Obispo de Socorro y San Gil, en aquel tiempo, monseñor Víctor Manuel López Forero. Los estudios de Teología los adelantó en el Seminario Arquidiocesano de Bucaramanga, desde 1986 hasta 1989. Realizó estudios de especialización (septiembre de 1992 a julio de 1994) en la Academia Alfonsiana de Roma, donde obtuvo el título de Licenciado en Teología Moral. Órdenes Recibió las Sagradas Órdenes de manos de su Obispo, monseñor Jorge Leonardo Gómez Serna, O.P., en la Catedral de San Gil; el diaconado el 23 de noviembre de 1988 y el presbiterado el 23 de noviembre de 1989. Celebró su primera Eucaristía en el templo de su parroquia natal, María Auxiliadora de San Gil, el 24 de noviembre de 1989. Servicios en la Diócesis de Socorro y San Gil Párroco de Albania (hoy diócesis de Vélez) de enero de 1990 hasta enero de 1992. Párroco de Curití, de enero de 1992 hasta agosto del mismo año, cuando fue enviado a Roma para realizar sus estudios de especialización. A su regreso de Roma fue nombrado formador del Seminario, desde agosto de 1994 hasta enero del 2000. Los dos últimos años de ese servicio los vivió también como párroco de Pinchote (enero de 1999 hasta enero de 2001), donde había iniciado la experiencia de Año Propedéutico de los seminaristas con énfasis en la inserción en parroquia. Vicario parroquial de Mogotes de enero de 2001 hasta enero de 2003. El Arzobispo Emérito de Manizales, monseñor José de Jesús Pimiento Rodríguez, en su condición de administrador apostólico de la diócesis de Socorro y San Gil, lo nombró párroco de Barichara en enero de 2003; allí permaneció hasta enero de 2004. El obispo de Socorro y San Gil, monseñor Ismael Rueda Sierra, lo nombró Vicario de Pastoral y Vicario Episcopal de San Gil, desde enero de 2004 hasta el año 2009, cuando monseñor Ismael fue nombrado arzobispo de Bucaramanga. El Arzobispo Emérito de Bucaramanga, monseñor Víctor Manuel López Forero, en su condición de administrador apostólico de Socorro y San Gil, lo ratificó en sus cargos y, además, le confió temporalmente, el servicio de subdirector de SEPAS y rector del IDEAR. El Obispo de Socorro y San Gil, monseñor Carlos Germán Mesa Ruiz lo nombró Vicario de Pastoral y Vicario Episcopal de San Gil, en mayo de 2010, servicio que prestó hasta marzo de 2012. Episcopado El 2 de febrero de 2012, Su Santidad Benedicto XVI lo nombró obispo de Montelíbano (Córdoba). Recibió la Ordenación Episcopal en la Catedral de San Gil, el 14 de abril de 2012 y tomó posesión canónica de la diócesis de Montelíbano el 28 de abril de 2012. El 19 de mayo de 2018, Su Santidad Francisco lo nombró arzobispo de Popayán (Cauca); la posesión canónica se efectuó el 7 de julio de 2018. El 29 de junio de 2018, en Roma, en el marco de la celebración de la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, recibió de manos del papa Francisco el Palio Arzobispal, distintivo de los arzobispos. El 25 de abril de 2020, Su Santidad Francisco lo nombró arzobispo metropolitano de Bogotá, tomando posesión el 11 de junio del mismo año. Desde el 13 de mayo de 2021 hasta el 25 de junio de 2022, fue Administrador Apostólico de la Diócesis de Soacha (Cundinamarca). El 6 de julio de 2021 fue elegido como Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia para el trienio 2021-2024. El 9 de julio de 2023 el papa Francisco anunció que sería nuevo Cardenal de Colombia.

Sáb 8 Jul 2023

Los arzobispos de Bogotá, Medellín y Manizales representarán a la Iglesia colombiana en el Sínodo

Monseñor Luis José Rueda Aparicio, monseñor Ricardo Tobón Restrepo y monseñor José Miguel Gómez Rodríguez, arzobispos de Bogotá, Medellín y Manizales, respectivamente, serán los encargados de representar al episcopado y transmitir el sentir de toda la Iglesia que peregrina en Colombia durante la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que se llevará a cabo del 4 al 29 de octubre de 2023. Así lo oficializó la Santa Sede este viernes 7 de julio, cuando hizo pública la lista de participantes. Los tres prelados colombianos habían sido elegidos por sus hermanos obispos durante la CXIV Asamblea Plenaria celebrada en el mes de febrero del presente año. Sobre la esencia del Sínodo, monseñor Ricardo Tobón explicó que se trata de una experiencia eclesial en “donde en la oración, la reflexión y el diálogo se va encontrando el camino de Dios para la Iglesia”, con la guía del Espíritu Santo. Por su parte, monseñor José Miguel dijo que a través del Sínodo de los Obispos se pueden abordar, aclarar y ampliar las doctrinas del Concilio Vaticano Segundo, así como “seguir dialogando con el mundo en todos los aspectos”. El arzobispo de Manizales agregó que representa también una ocasión muy importante para reunirse con representantes de toda la Iglesia Universal y “para analizar para el Papa y con el Papa el tema de la sinodalidad en la vida de la Iglesia”. Recordando también al papa Francisco, monseñor Rueda afirmó que este Sínodo es una oportunidad para que como Iglesia podamos mirar hacia adentro y revisar cómo estamos, “como se decía en el Concilio: Iglesia, ¿Qué piensas de ti misma? Y en este tiempo, en el año 2023, y luego lanzarnos porque el Papa quiere que nosotros vivamos la fraternidad y la espiritualidad del servicio, y esa fraternidad nos lleva a abrir las puertas, a ensanchar la tienda, a que todos nos sintamos hijos del mismo Padre”, precisó el arzobispo de Bogotá. El presidente del episcopado agregó que este Sínodo también será una oportunidad para profundizar en la fraternidad y para llevarla a la práctica, usando la metodología de la conversación espiritual, la misma bajo la cual reflexionaron y trabajaron los obispos colombianos durante su Asamblea CXV, encuentro que finalizó este viernes 7 de julio. “De tal manera que va a ser una posibilidad de escucharnos desde los distintos lugares, con las preocupaciones que tenemos y también con las esperanzas (…) Hacer silencio, orar y pedirle al Espíritu Santo que nos muestre el camino. Y esa va a ser la pregunta: ¿Qué nos está pidiendo el Espíritu Santo a nosotros como Iglesia en este momento histórico de la humanidad?” explicó monseñor Rueda. A propósito de esta Asamblea General del Sínodo, el Vaticano ha informado que dos colombianos más han sido elegidos por parte del Santo Padre para participar, se trata de la hermana Gloria Liliana Franco Echeverri, presidenta de la Confederación Caribeña y Latinoamericana de Religiosas y Religiosos (CLAR), así como monseñor Juan Usma del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos. Conozca más detalles sobre el Sínodo y la participación de los arzobispos colombianos en el video:

Jue 6 Jul 2023

"No nos resignamos a la violencia": Obispos de Colombia

Este jueves 6 de julio, en el marco del cuarto día de la CXV Asamblea Plenaria del Episcopado, en el que han tenido la reconciliación y la paz como tema central de discernimiento y trabajo, los obispos dieron a conocer su mensaje final dirigido al pueblo colombiano. En él, afirman que no se resignan a la violencia, “aparentemente interminable”, pero también recuerdan que no se puede alcanzar la paz si no existe conciencia de la injusticia social y de las estructuras de pecado que terminan provocándola. Agregan que para lograr transformaciones y “afrontar con responsabilidad y esperanza la crisis humana, social, política, económica, cultural y ambiental” que vive la nación, es necesario un cambio de mentalidad y una renovación interior, caminando en la verdad y en la justicia. Así mismo, reafirmando su propio compromiso con apartarse del mal, hacer el bien y buscar la paz, los prelados recuerdan que esta es una tarea de todos. Por esto, piden vencer la indiferencia y asumir la búsqueda de la unidad nacional, superando la polarización. En el comunicado, los pastores colombianos también exhortan a los creyentes a “intensificar la evangelización, reavivar la oración por Colombia y trabajar incansablemente por el bien común”. Transmisión de la rueda de prensa en la que se dio lectura del comunicado:

Lun 3 Jul 2023

“Somos los primeros necesitados de la misericordia”: monseñor Luis José Rueda

Bajo el propósito central de profundizar y fortalecer el carácter misericordioso de la Iglesia Católica en Colombia , este lunes 3 de julio los obispos del país dieron inicio a su CXV Asamblea Plenaria en Bogotá. Durante la apertura, monseñor Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), invitó a sus hermanos pastores a seguir manteniendo una voz profética para el país, que acompañe y aliente frente a las preocupaciones de la realidad actual. Recordó que también son seres humanos y ciudadanos desafiados por esta realidad; además, que son los primeros necesitados de misericordia y consolación pastoral. Monseñor Rueda inició su mensaje recordando que la reflexión de esta asamblea se configura dentro de una de las tres opciones que han tomado para caminar juntos, “con las cuales nos hemos propuesto vivir y servir como Iglesia en Colombia, con la mirada puesta en el Jubileo de la Esperanza del 2025 y del gran Jubileo de la Redención del 2033”, precisó. Se trata de la tercera opción, a través de la cual proponen ser “una Iglesia misericordiosa que se conmueve, se detiene y ayuda al otro, cuantas veces sea necesario”. Por esto, dijo, “el desarrollo de cada jornada será, ante todo, una experiencia espiritual, en un ambiente de oración, diálogo y discernimiento”. La alocución del primado de Colombia se enmarcó en cuatro aspectos centrales: 1. La realidad humana como lugar de encuentro con Dios. 2. La experiencia de la desolación espiritual. 3. La desolación como oportunidad para crecer y madurar. 4. La consolación pastoral. “Los obispos en colegialidad somos una voz profética necesaria para Colombia” Monseñor Luis José Rueda afirmó que todas las realidades humanas le interesan a la Iglesia y que, aunque son plenamente conscientes que, como obispos, no tienen la solución a las diversas problemáticas que vive Colombia, se sienten “enviados por el Señor a acompañar, como pastores y como servidores, todas las situaciones de la vida del Pueblo fiel de Dios”, especialmente “desde el testimonio, con la presencia y el acompañamiento a las comunidades, en diálogo social evangelizador como camino para encontrar las salidas a los duros conflictos que vivimos”, remarcó. Así mismo, el presidente de la CEC recordó a los demás prelados la necesidad del profetismo, inspirado en el Evangelio y en la enseñanza social de la Iglesia, “en cercanía con fe y amor, asumiendo las actitudes de Jesús, Buen Pastor”. Sobre esto, precisó: “el momento histórico de nuestro país nos pide a los obispos estar en permanente ejercicio de discernimiento evangélico, reflexionar la realidad desde las regiones con actitud profética, en nombre de Dios, sin dejarnos ahogar en lo coyuntural, con visión de futuro, con realismo esperanzado, sin la beligerancia que alimenta polarizaciones, con humildad y a la vez sin ingenuidad”. “Los obispos somos seres humanos y ciudadanos, desafiados por los problemas propios de la Iglesia y solicitados por todos los problemas sociales” El Arzobispo de Bogotá recordó a sus hermanos en el episcopado que su realidad eclesial y su realidad personal están íntimamente tejidas con la realidad social de Colombia, que constantemente lo externo se mezcla con lo interior, y que esto hace que su vida se convierta en una especie de campo de combate y un camino exigente y que, ante esto, la fuerza y la guía la encuentran en el Señor. “Somos frágiles y somos los primeros necesitados de la misericordia” Seguidamente, monseñor Luis José Rueda reconoció que, aunque, como obispos, tienen la gracia del ministerio sacerdotal en primer grado, son los primeros necesitados de la misericordia de Dios y que es ella la que los levanta y pone nuevamente en el camino. Al tiempo, el prelado recordó que más allá de este momento complejo que vive el país y de las pruebas que los agobian, el papa Francisco les ha pedido no desanimarse ni rendirse ; a “hacer una pausa para estar en la presencia de Jesús, a quien encontramos siempre fiel en nuestro camino, cercano y atento a nuestra vida, para ofrecernos la necesaria consolación pastoral”. Se trata de una consolación que tiene la fuerza del Espíritu Santo, que “acude en ayuda de nuestra debilidad” (Rm 8,26), para propiciar nuestro progreso como obispos en la adoración, en la gratitud, en la humildad misionera y en una más esperanzada relación con el Señor y con todos los miembros del Pueblo fiel de Dios”, remarcó. “¡Preferimos una vida de obispos y de Iglesia “deshilachada en el servicio” (EG 96), en vez de presentarnos como maestros espirituales que señalan desde fuera” A propósito de esta consolación pastoral, el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia dijo que con ella recibirán el don de la alegría espiritual para lanzarse a la misión de manera renovada, “nos robustecerá en el dinamismo evangelizador centrado en Jesucristo, con el “aire puro del Espíritu Santo”, que nos libera de la mundanidad manifestada en “embelecos” y “vanaglorias” doctrinales y estadísticas que nos distancian del Pueblo fiel de Dios”. Los obispos vivirán esta CXV Asamblea Plenaria a través de una metodología conocida como la conversación espiritual que consiste en una escucha atenta de lo que el Espíritu les quiere decir por medio de las intervenciones de todos los participantes. Sobre ella, monseñor Rueda dijo que, vivida en fraternidad y cercanía con el Señor y con María, los ayudará a progresar en “la misión de Iglesia misericordiosa, capaz de contemplar, conmoverse y detenerse para servir”. Durante este primer día de encuentro los obispos estarán enfocados en su retiro espiritual y con él los pastores de la Iglesia que peregrina en Colombia, buscarán establecer las bases para que dicha propuesta de conversación espiritual “se convierta en la mejor manera de aproximarnos con fe a la realidad social, eclesial y personal, como auténtico lugar de encuentro con Dios”, así lo afirmó monseñor Luis José Rueda Aparicio al cierre de su discurso.

Dom 2 Jul 2023

Vicepresidente del episcopado rechaza el ataque contra diácono y laico en Caldono

Ante los graves hechos ocurridos en la madrugada de este domingo 2 de julio en el casco urbano del municipio de Caldono (Cauca), en los que el diácono Fredy Muñoz y el laico Eider Bototo resultaron gravemente heridos tras ser víctimas de un ataque mientras se desplazaban en un vehículo al servicio de la parroquia provenientes de la vereda La Esmeralda, monseñor Omar Alberto Sánchez Cubillos, arzobispo de Popayán y vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), ha emitido un comunicado en el que lamenta y rechaza con vehemencia este atentado. De acuerdo con el prelado, este ataque da cuenta de la degradación del conflicto en ese territorio. Afirma, además que aunque, milagrosamente, las lesiones sufridas por estos dos miembros de la Iglesia que adelantan su misión pastoral en la Parroquia San Lorenzo de Caldono no amenazan hoy su vida,son el reflejo de las heridas de toda la sociedad civil del Cauca, en la que sus habitantes "son víctimas permanentes de esta violencia armada salida de todo principio de racionalidad y respeto al Derecho Internacional Humanitario". Pese a la situación, en el mensaje, monseñor Sánchez ratifica el compromiso indeclinable de la Iglesia Católica colombiana con la búsqueda de la reconciliación y la paz. "Cada hecho violento en nuestros territorios nos reclama mayor compromiso en este propósito; no podemos seguir postergando este profundo anhelo", agrega el arzobispo. DESCARGUE EL COMUNICADO AQUÍ