Pasar al contenido principal

Nuncio apostólico

Sáb 21 Nov 2020

Obispo de Pasto toma posesión de su sede

En la fiesta de la presentación de la Bienaventurada Virgen María, fecha que conmemora hoy la Iglesia católica, tomó posesión de su sede el nuevo obispo de la diócesis de Pasto, monseñor Juan Carlos Cárdenas Toro. En su homilía centró la atención señalando que la figura de la Santísima Virgen María marcará la ruta de camino en esta nueva etapa de su vida diocesana. “De la mano de María Santísima, cuyo amor está profundamente arraigado en los nariñenses, nos sentimos llamados esta mañana a continuar “remando mar adentro”. Iluminado por la Palabra de Dios, el prelado propuso tres aspectos que considera animarán el caminar de esta jurisdicción: 1. «¡Alégrate y goza, hija de Sión!, que yo vengo a habitar dentro de ti» Este pasaje bíblico impregnaba un clamor, que en su momento invitaba al pueblo de Dios a levantarse en la alegría para asumir con esperanza su liberación. En este contexto se refirió al momento inusual que está viviendo el mundo por cuenta de la pandemia, incluyendo a la Iglesia, que ha tenido que continuar su caminar de fe con nuevos métodos. Observó que esta emergencia sanitaria está haciendo que la humanidad toque terrenos desconocidos y hostiles que nunca hubiera llegado a imaginar, o, que tal vez, daba por sentados tener seguros. Resaltó aspectos como la pérdida del empleo, la ausencia de bienes, el abrigo en los templos, los abrazos, la cercanía de los seres queridos y amigos que fallecieron sin haberles podido estrechar una mano o sepultar y hacer el duelo como es costumbre. "Como en aquel pueblo, hoy resuena en nosotros, nuevo pueblo de Dios que peregrina en estos tiempos pandémicos, el llamado a levantarnos con la certeza que Dios está en medio de nosotros, y su presencia –Él no es ausencia–, nos debe impulsar a romper, si no los confinamientos físicos, aquellos espirituales para abrirnos desde la esperanza a continuar contagiando a nuestros hermanos y hermanas de “la alegría del Evangelio”, a decirles con palabras y gestos que no están solos". Igualmente animó para que, a pesar de las dificultades, se camine de la mano con María y se elija buscar nuevos caminos. "Que ella nos ayude a abrirnos a la confianza filial, a sentirnos defendidos en nuestras tribulaciones e impulsados a ser comunidad cercana a los humildes y necesitados, consuelo para los que sufren". 2. «Estos son mi madre y mis hermanos. El que cumple la voluntad de mi Padre del cielo» Explicó como este texto presenta a María como la primera mujer que cree y hace la voluntad de Dios. Así mismo muestra a Jesús pasando las fronteras para presentar a los discípulos como miembros de la gran familia del Señor. Así también, resaltó la larga labor pastoral que la diócesis de Pasto ha recorrido, promoviendo un importante número de comunidades cristianas “evangelizadas y evangelizadoras, preocupadas por encarnar en la vida cotidiana las enseñanzas de Jesús (…) Escuchando las palabras del Señor, podemos decir que en ese esfuerzo se van tejiendo los vínculos de una gran familia. Desde esta perspectiva, la familia está llamada a ser primerísima comunidad creyente, Iglesia doméstica, y la comunidad eclesial debe afianzarse como familia de familias”. Monseñor Cárdenas dijo, además, que es importante seguir fortaleciendo los lazos que unen como hermanos a esta tierra nariñense, poniendo al servicio común de todos los talentos que Dios les ha regalado para servir a los más necesitados, ellos son: “las víctimas de las diferentes formas de violencia, los migrantes, los pobres, los que lloran la pérdida de sus seres queridos, los que han perdido su trabajo, entre otros”. 3. «Por tu Palabra echaré las redes» En este pasaje bíblico de Pedro, que presenta la escena de la pesca milagrosa, se inspiró el lema del nuevo obispo, quien dijo que “la auténtica alegría la experimentamos cuando en conciencia procuramos honestamente obedecer a Dios”. Advirtió que la tarea de la Iglesia no es “un proyecto personal o individual; es la respuesta a un llamado de alguien a quien respondemos, obedecemos y con quien nos comprometemos a sumar fuerzas caminando juntos”. “Parafraseando a María y a Pedro, le decimos al Señor esta mañana: aquí estamos, que se haga en nosotros según tu Palabra, tomamos en nuestras manos la red y seguimos bregando en este mar de la historia, con la certeza de que tú vienes con nosotros y será la confianza en ti y la docilidad a ti, lo que hará fructífera la misión”, puntualizó. Al finalizar la prédica pidió la intercesión de Nuestra Señora de La Merced, patrona y gobernadora vitalicia de Pasto. Nuncio Apostólico presenta recomendaciones pastorales al nuevo obispo Por su parte, monseñor Luis Mariano Montemayor, Nuncio Apostólico en Colombia, dirigió unas palabras al nuevo obispo, recordándole que el papa Francisco, al pedirle ser el pastor de esta Iglesia particular, le encomienda también unas acciones pastorales guiadas por el Espíritu Santo y en atención al contexto social y cultural del pueblo pastense. Cercanía y fraternidad con el clero y los fieles Invitó al nuevo obispo a cultivar una figura paterna y cercana con el clero y los fieles, tanto en la dimensión espiritual como pastoral, mostrando una actitud de escucha, alegre y comprensiva, que impregne en este público un nuevo entusiasmo para la vivencia cotidiana del Evangelio y la vida misionera de la Iglesia. Proyección de las obras diocesanas Al resaltar su formación académica, pastoral y administrativa, le encomendó liderar y gestionar los procesos necesarios en el mejoramiento y proyección de las obras que esta Iglesia particular tiene, advirtiéndole que son el pilar fundamental de la acción evangelizadora y caritativa de esta jurisdicción. Sensibilidad hacia lo social Al evidenciar la situación socio-económica y la inseguridad que azotan estas tierras de Cauca y Nariño, le recordó que es su tarea tener una sensibilidad particular hacia lo social. "El pueblo fiel espera encontrar en usted un defensor de los derechos de los más vulnerables, un guía experto de la comunidad diocesana, con una respuesta eficaz hacia las problemáticas más apremiantes que debe afrontar la pastoral de la diócesis". "En la mente del papa Francisco, que lo ha elegido y confiado en usted, los últimos, los excluidos, los desplazados, los alejados, los indiferentes, los no creyentes, en fin, todo el espectro de lo que se ha llamado las ‘periferias existenciales’, son encomendadas preferencialmente a su corazón de pastor". Atención a la crisis familiar Frente a esta problemática advirtió que la crisis familiar afecta a la sociedad contemporánea, pues fragiliza el tejido social y debilita la transmisión de los valores humanos y religiosos necesarios para sostener la vida de la comunidad. Al referirse a los jóvenes advirtió que la drogadicción, la criminalidad, el desempleo y la falta de oportunidades ha permitido que ellos no se proyecten hacia un futuro próspero. "Por eso, señor obispo, el acompañamiento pastoral y el sostén de la realidad familiar y juvenil de la diócesis exigen intensa presencia amorosa". Acogida a los migrantes Lo animó a seguir en marcha con los procesos que se adelantan en los municipios y ciudades del país, en atención a los migrantes, de manera particular a los venezolanos. "Le pido perseverancia en la generosa acogida de los hermanos venezolanos y le exhorto a poner en marcha una pastoral de migrantes capaz de abordar evangélicamente todas las dimensiones de este fenómeno". La pandemia. Propuestas pastorales novedosas Le recordó que la incertidumbre causada por la pandemia del Covid-19, con un futuro incierto, le exigen respuestas nuevas e inéditas "es el momento de la creatividad del espíritu y de la docilidad generosa a los signos de los tiempos para poder responder con altura evangélica a los retos del momento". Finalmente, le invitó para que en este nuevo caminar experimente la cercanía maternal de la Santísima Virgen María y la dulzura amorosa del Sagrado Corazón de Jesús, bajo cuya protección ha sido puesta la diócesis de Pasto. Siguiendo los cuidados de bioseguridad, al acto de posesión asistieron monseñor Luis Mariano Montemayor, Nuncio de Su Santidad en Colombia, un grupo reducido de arzobispos y obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, seminaristas, representantes laicales; el Gobernador de Nariño, Jhon Rojas; el alcalde de Pasto, Germán Chamorro De la Rosa; autoridades civiles, militares y de policía, y medios de comunicación.

Vie 17 Jul 2020

Comunicado de prensa de la Conferencia Episcopal de Colombia

Comunicado de prensa de la Conferencia Episcopal de Colombia [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Mar 3 Sep 2019

Nuncio observa implementación de los Acuerdos de Paz en el Catatumbo

El viernes 30 y sábado 31 de agosto, el Nuncio Apostólico del Papa Francisco en Colombia, Monseñor Luis Mariano Montemayor, estuvo en Norte de Santander, preocupado por el cumplimiento de los Acuerdos de Paz y para alentar la atención migratoria. "Estuve visitando Caño Indio, la sede de los antiguos miembros del Frente 33 de las FARC” (...) Es parte del recorrido que estoy haciendo, para verificar las condiciones de aplicación del Acuerdo de Paz y el estado de ánimo de los ex combatientes”, afirmóMontemayor, durante su visita a esta zona del país, en compañía del Obispo de Tibú, Monseñor Omar Sánchez Cubillos. El Nuncio aseguró que lo que pasó con Iván Márquez “lo veníamos venir”, pero constata que ha estado en cinco Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (ETCR), donde ninguno de los ex combatientes tiene ganas de volver, “de ahí no va a volver la mayor disidencia”. Finalizado su paso por Tibú, expresó: “venimos a decirles que no están solos, bien sea que se cumplan o no por parte del Estado todos los compromisos”, recalca en que en cualquier circunstancia, acompañarán a quienes dejaron las armas. En el ETCR de Caño Indio, Catatumbo, los ex guerrilleros reafirmaron su responsabilidad para dar cumplimiento a los Acuerdos de Paz, aseguran que seguirán en el proceso de reincorporación a la vida civil. Visita a la Casa de Paso ‘Divina Providencia’ El representante de Su Santidad, aseguró en su visita a Norte de Santander, que no podía dejar de ir a la Casa de Paso, ya que desde que llegó al país a asumir su rol, inmediatamente empezó a preocuparse por la frontera a causa de las migraciones de los venezolanos. El Nuncio manifestó su preocupación por la inestabilidad que vive Venezuela y “el colapso que nos causa a nosotros en Colombia. Ustedes saben que yo no soy Nuncio Apostólico en Venezuela, sino en Colombia, pero hasta la frontera me toca a mí, así que en cuanto ponen un pie aquí, esa es mi responsabilidad”. Destacó la labor del Obispo de la Diócesis de Cúcuta, Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, a quien alienta a expandir este servicio, el cual ya ha alcanzado grandes resultados. Monseñor Luis Mariano, testifica que “esta Casa es un milagro”, suceso que desglosa en tres milagros: 1. Nació por una iniciativa espontánea. 2. Hace posible que exista gracias a los voluntarios, sino sería inmanejable y nos permite expandirnos, porque tenemos la seguridad que el servicio lo podemos prestar. 3. No falta el arroz y el aceite, que es lo que pedimos siempre; y hasta ahora el milagro de las vasijas que no se vacían, se cumple. Destaca que llegan los recursos, los cuales no han sobrado, pero tampoco han faltado. Incluso, relata que la Cruz Roja, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), entre otras organizaciones internacionales, “no pueden creer que podamos dar la cantidad de almuerzos completos para desayunos y almuerzos, con poco presupuesto”. “Hay una administración eficiente y eso es un ejemplo a nivel internacional, eso hace que los organismos internacionales y agencias humanitarias quieran colaborar con la Casa de Paso; hasta el Estado Americano quiere trabajar con nosotros y nosotros estamos dispuestos a trabajar con quien quiera verdaderamente ayudar a los venezolanos, esa es nuestra preocupación”. Subraya la colaboración que siempre se ha recibido de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), “ha estado desde el principio y ha seguido, nosotros tenemos que reconocerlo y agradecerlo”. Otra cara de las migraciones es la salud, un tema que el Nuncio ve “marginado” por parte del Estado, y, aunque el campo de la salud no es el de la Iglesia, se han aprovechado los recursos que la caridad provee para dar asistencia sanitaria y pediátrica. “He constatado que hoy vienen muchas más mujeres embarazadas y con niños, que antes”. Mientras tanto, reveló que la Orden de Malta, la cual está conectada con la Santa Sede, está “pensando en hacer un esfuerzo por la salud aquí (…) su especialidad es propia de este campo”. Monseñor es realista con la situación e insiste en que Colombia no debe cerrar fronteras, “una solución a este problema no se resuelve porque se vaya Maduro (presidente de Venezuela), ni en seis meses o un año. Primero deben llevar a cabo elecciones legítimas, reconstruir la economía, y eso lleva a lo menos, una década”. Por esto, lamenta la falta de previsión del Estado colombiano en su sistema de salud, porque “los que más han sufrido son los cucuteños, han dejado de recibir la asistencia correcta” por el colapso en las entidades médicas. A pesar de esto, “admiro la paciencia y tolerancia del pueblo colombiano, en permitir que el venezolano sea asistido”. El mayor impacto del fenómeno migratorio se da en la frontera y desata una crisis, la cual, “no ha sido peor, gracias a la Iglesia colombiana, que ha sido de las primeras instituciones y de las más eficaces en ayudar”. Resalta el Nuncio que el Santo Padre apoya fuertemente el esfuerzo de la Iglesia en Colombia por dar este gesto de solidaridad a los hermanos venezolanos.

Vie 9 Ago 2019

Ceremonia de elevación del vicariato de San Vicente del Caguán a diócesis

En una ceremonia eucarística presidida por monseñor, Luis Mariano Montemayor, Nuncio Apostólico en Colombia, el sábado 10 de agosto, el vicariato apostólico de San Vicente del Caguán será elevado a diócesis, según designio de la Santa Sede. Monseñor Francisco Múnera Correa, quien hasta el momento se ha desempeñado como vicario, tomará posesión canónica como obispo diocesano. Durante la ceremonia el Nuncio Apostólico proclamará el Mandato Pontificio, conocido como la Bula, en el que se eleva el vicariato a diócesis. La eucaristía se realizará en la catedral Nuestra Señora de Las Mercedes, de esta ciudad, con la participación de los obispos de la región amazónica y de otras zonas del país, sacerdotes, religiosos, religiosas y la comunidad de fieles. Los actos previos a la ceremonia inician el viernes 9 de agosto, en horas de la noche, con un acto mariano de consagración a la Virgen de Las Mercedes como patrona y titular de esta Iglesia Particular. Por disposición del papa Francisco, el 30 de mayo de 2019, el vicariato apostólico de San Vicente del Caguán, departamento del Caquetá, fue elevado a diócesis y nombrado a monseñor Francisco Múnera Correa como obispo de esta nueva jurisdicción eclesiástica. El vicariato está conformado por 14 parroquias, distribuidas en tres zonas pastorales, comprendiendo un territorio de aproximadamente 37.000 Km2. Abarca las áreas de los municipios de San Vicente del Caguán, Cartagena del Chairá y un área rural de Puerto Rico (Caquetá). La población estimada es de alrededor de 110 mil personas, en su inmensa mayoría colonos ya arraigados en la región, aunque no deja de fluir el movimiento permanente de personas entre las áreas rurales y urbanas. Los dos centros urbanos (San Vicente y Cartagena) crecen aceleradamente, dada la dinámica económica pujante que ambos tienen y también gracias al mejoramiento de vías terciarias y al avance de la interconexión eléctrica en varios caseríos del área rural. También hacen presencia en el territorio algunas comunidades indígenas (de los pueblos Nasa, Embera- Chamí, entre otros), unas ubicadas en las áreas rurales y otras que se integran en las zonas urbanas. Grupos pequeños de población afro también están presentes y organizados.

Mar 2 Jul 2019

“Los momentos de crisis, son el lugar privilegiado de la fe”: Nuncio Apostólico

Siguiendo el texto del Evangelista San Mateo, que increpa a los discípulos con la pregunta “¿Por qué tienen miedo, hombres de poca fe?”, el Nuncio Apostólico de Colombia, monseñor Luis Mariano Montemayor, durante la eucaristía del segundo día de la Asamblea, invitó a los obispos a tener confianza como Iglesia ante los momentos de crisis. “Me atrevo a decir, que los momentos de crisis son el lugar privilegiado de la fe. Si se quiere pasar a la otra orilla, tenderemos que exorcizar el miedo al abismo impetuoso y el miedo a la misma muerte. Y es lo que hace el Señor, que duerme y se despierta, que muere y resucita para romper definitivamente el muro que separa nuestra realidad humana de muerte, del su amoroso deseo de darnos vida y vida en abundancia”, afirmó. “¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?” Dijo entonces Jesús a sus discípulos y nos dice también hoy a nosotros. Miedo y confianza son dos sentimientos opuestos que se disputan el corazón del hombre. El primero lo paraliza y el segundo lo hace caminar. Si crece el uno, el otro decrece y viceversa. La confianza en cambio, proviene de la conciencia que Dios es Padre y tiene en cuenta todo lo que Él puede hacer por nosotros. La barca del Evangelio es entonces la comunidad de los creyentes, la Iglesia donde Jesús está siempre en medio de los suyos” dijo el prelado. “Cada uno de nosotros hoy, examine su actitud de confianza en el Señor, que Jesús no tenga que decirnos ¿por qué tenéis miedo, hombres de poca fe? Recordemos continuamente en nuestro corazón, como María, que todo es posible para aquel que cree Mc 9, 23. Es el mismo Señor quien nos ha dicho: Os aseguro que el que cree en mi hará también las obras que yo hago, incluso otras mayores”, finalizó el obispo.

Mar 7 Mayo 2019

Nuncio Apostólico preocupado por líderes sociales y Venezuela

En el marco del IX Encuentro de la Red de Universidades Católicas de Colombia, el Nuncio Apostólico, monseñor Luis Mariano Montemayor, se refirió a la preocupante situación de las amenazas y asesinatos de líderes sociales en el país. “Creo que tenemos que tomar en serio el tema de la paz, porque el tema de la paz no es opcional. Colombia no puede seguir en esta violencia extrema de la eliminación del adversario y de quien piensa diferente, el trabajo de una mentalidad inclusiva es esencial. O nos salvamos todos o nos hundiremos todos”, afirmó. El prelado expresó que el tema de la paz no puede ser indiferente para los colombianos, ni para la comunidad internacional, ante el incremento de fuerzas organizadas y criminales “que están en contra del cese de violencia en el país y hay que combatirlas con eficacia”. Aseguró que si bien es tarea del Estado proteger a los ciudadanos, pidió también a la sociedad civil aportar en este proceso de salvaguardar la vida de los líderes sociales. Monseñor Montemayor también se refirió a la crisis de Venezuela. El representante del Vaticano dijo que es importante que en este país no se de una guerra civil, porque los primeros en sufrir las consecuencias serían los colombianos. “Masas de venezolanos que pueden huir de frentes de guerra, yo viví eso en la República Democrática del Congo y sé cómo es. Tratemos de dar iniciativas que no empeoren los problemas. Parémonos con paciencia porque este es un problema que vamos a cargar por mucho tiempo”, explicó. Resaltó la tarea de acompañamiento que está realizando la Iglesia colombiana en las zonas fronterizas. Solo en Cúcuta la diócesis está entregando 12 mil almuerzos diarios a los refugiados. “Mil almuerzos en Arauca, quinientos en Valledupar y así en otras zonas del país; no son los únicos también el sector empresarial está apoyando”. Foto: Fundación Universitaria Juan de Castellanos (Tunja)

Mar 5 Feb 2019

“A los que tienen fe en él, Jesús les da la salvación”: Nuncio Apostólico

En su homilía al abrir el segundo día de la CVII Asamblea Plenaria del Episcopado de Colombia, el Nuncio Apostólico en Colombia, monseñor Luis Mariano Montemayor, llamó a seguir el camino de la salvación. Para ello, haciendo referencia a un pasaje del evangelio del día, en el cual una mujer, en medio de una multitud, se cura tocando el manto de Jesús, el Obispo identificó “una clara invitación a meternos también nosotros entre el gentío como Jesús: dispuestos a atender las concretas necesidades de los fieles, dispuestos a ser salpicados por la suciedad de la calle de la vida en la que ellos se encuentran y viven”. Dirigiendose a los Obispos reunidos para esta asamblea plenaria, el nuncio dijo que son muchos los fieles que esperan en estos días esta enseñanza vital: “A nosotros también nos circundan multitudes sedientas de vida y de Dios. Permitanme decir, hermanos en el episcopado, que creo que Colombia está entrando en un momento de agítación y de necesidad. En estas circunstancias, el pueblo colombiano tiene derecho a esta cercanía afectiva y a la voz sapiente de sus pastores.” Esta salvación, según monseñor Montemayor, no es algo abstracto y lejano. “A los que tienen fe en él, Jesús les da la salvación, pero ya desde ahora, no solo al fin de esta vida”, agregó.

Dom 23 Dic 2018

Tres toneladas de alimento dona Nunciatura Apostólica a la Diócesis de Cúcuta

El Nuncio Apostólico de su Santidad, el Papa Francisco, Monseñor Luis Mariano Montemayor, Arzobispo titular de Illici, arribó a la ciudad de Cúcuta desde este viernes 21 de diciembre, para conocer la situación de los migrantes venezolanos y evidenciar el apoyo de la Iglesia. El día sábado 22 la cita fue en la Casa de Paso ‘Divina Providencia’ en el corregimiento La Parada, Villa del Rosario, donde se encontró con los Obispos de Cúcuta y San Cristóbal (Venezuela), Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid y Monseñor Mario del Valle Moronta, respectivamente; quienes lo ilustraron sobre la situación migratoria y lo acompañaron en su recorrido por la Casa. Monseñor Luis Mariano entregó mercados a los servidores venezolanos de la Casa de Paso y les dio su bendición, asimismo ayudó en el servicio de los alimentos a la hora del almuerzo y conoció algunos casos de personas con enfermedades graves, que necesitan seguir contando con las atenciones médicas que hasta el momento han recibido. De esta manera, el Nuncio aseguró que desde la Santa Sede seguirán trabajando para que no falten los recursos y reconoció el esfuerzo de muchas asociaciones católicas y agencias internacionales que han expresado su solidaridad y generosidad con esta obra de caridad. El Obispo de San Cristóbal exaltó la actitud de la Iglesia en Cúcuta al ayudar al hermano venezolano: “es una bendición de Dios el poder tener un Obispo, unos sacerdotes y unos laicos que sin ningún interés están ayudando a tantos hombres y mujeres venezolanos”. Por su parte, Monseñor Luis Mariano pidió a esta Iglesia particular que no se canse de perseverar, expresó que “el Santo Padre agradece de corazón el gran esfuerzo que están haciendo, agradece a Colombia por su política de puertas abiertas… somos todos pueblos hermanos y a mí como argentino me duele en el alma ver un pueblo latinoamericano tan abatido como el venezolano”. Los prelados también se dirigieron al puente Internacional Simón Bolívar, junto con Víctor Bautista Olarte, director de Fronteras de Colombia, enviado por el Ministerio de Relaciones Exteriores, quien también le amplió el panorama al Nuncio sobre la situación económica y social que está atravesando en este momento el país y afectando directamente a la frontera en Norte de Santander. Allí mismo en Villa del Rosario, también se acercaron al Centro de Evangelización padre Luis Variara, donde Monseñor Luis Mariano entregó más mercados, que, sumados con los donados en la Casa de Paso, fueron tres toneladas de alimentos que dispuso la Nunciatura Apostólica para la Diócesis de Cúcuta. La agenda del Nuncio continuará hasta mañana domingo; estará presente en la Sagrada Eucaristía a las 9:00 a.m. en la Catedral San José; visitará el Centro de Migraciones de la Diócesis de Cúcuta y el Hogar Casa de Nazareth de las Hermanas Misioneras de la Caridad, Santa Teresa de Calcuta, entre otros. Finalmente, partirá al caer la tarde con destino a la ciudad de Bogotá. Fuente: Of. comunicaciones diócesis de Cúcuta