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Paz

Mar 8 Ago 2017

En programa de TV Gente Solidaria: Semillero de paz en Chiquinquirá

Bogotá, agosto 04 de 2017. El capítulo Semillas de Paz del programa de televisión Gente Solidaria presentará en la emisión del miércoles 9 de agosto a las 8:30 p.m. por el Canal Cristovisión, tres historias que mostrarán cómo un grupo de jóvenes del municipio de Chiquinquirá ha encontrado en prácticas deportivas y de formación una mejor opción para no caer en el consumo de sustancias psicoactivas y escapar de la violencia. Semillas de Paz es un proyecto que se acompaña desde el programa construcción de paz e incidencia del Secretariado Nacional de Pastoral Social, apoyando el trabajo de la diócesis y la Pastoral Social de Chiquinquirá. Este programa se ha orientado a dinamizar las acciones teniendo como punto de partida la transformación de conflictos. Es un trabajo con niñas, niños y jóvenes habitantes del barrio Cerros de la Alameda, uno de los sectores más vulnerables de Chiquinquirá. Desde esta intervención se busca facilitar opciones diferentes a las violentas en el trámite de los conflictos y en el fortalecimiento del tejido social de este grupo poblacional. La metodología que se utiliza es la transformación de relaciones en aras de contribuir a la construcción de Paz. Sumado a esto, se encuentra estrechamente ligada con la estrategia de intervención del SNPS la cual ha venido realizando el acompañamiento en los últimos dos años. Adicionalmente, a través de otros tipos de espacios como el taller de tareas, cine al parque, el comedor comunitario y el patrocinio para algunos jóvenes, Semillas de Paz contribuye a la construcción de la paz creándoles espacios sanos donde ellos encuentran un ambiente diferente al de la violencia, el consumo y la pobreza. Este episodio tendrá repetición el domingo 13 de agosto en el mismo horario. El próximo capítulo que abordará el tema de la atención sicosocial a víctimas del conflicto en el Caribe colombiano, se podrá ver el miércoles 23 de agosto a las 8:30 p.m. El programa Gente Solidaria narra historias sobre quienes desde las jurisdicciones de pastoral social trabajan en iniciativas comunitarias en beneficio de sus comunidades.

Vie 4 Ago 2017

Vaticano expresa de nuevo “profunda” preocupación por Venezuela

Los Obispos católicos de Colombia, en profunda comunión con el Santo Padre, se unen al mensaje enviado por el Vaticano en relación a la crisis social, económica y política de Venezuela. Así mismo, expresan su apoyo a las diferentes diócesis que trabajan permanentemente por nuestros hermanos venezolanos. En el comunicado, enviado este viernes por la Secretaria del Estado del Vaticano, el Papa Francisco manifiesta su enorme preocupación ante la situación que vive el pueblo venezolano y que se ha visto agravada por las recientes elecciones a la Asamblea Nacional Constituyente. Así mismo, “la Santa Sede pide a todos los actores políticos, y en particular al Gobierno, que se asegure el pleno respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales, como también de la vigente Constitución”. Este es el texto completo del comunicado: La Santa Sede manifiesta nuevamente su profunda preocupación por la radicalización y el agravamiento de la crisis en la República Bolivariana de Venezuela, por el aumento de los muertos, de los heridos y de los detenidos. El Santo Padre, directamente y a través de la Secretaría de Estado, sigue de cerca dicha situación y sus implicaciones humanitarias, sociales, políticas, económicas e incluso espirituales. Asimismo, asegura su constante oración por el País y por todos los venezolanos, mientras invita a los fieles de todo el mundo a rezar intensamente por esta intención. Al mismo tiempo, la Santa Sede pide a todos los actores políticos, y en particular al Gobierno, que se asegure el pleno respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales, como también de la vigente Constitución; se eviten o se suspendan las iniciativas en curso como la nueva Constituyente que, más que favorecer la reconciliación y la paz, fomentan un clima de tensión y enfrentamiento e hipotecan el futuro; se creen las condiciones para una solución negociada de acuerdo con las indicaciones expresadas en la carta de la Secretaría de Estado del 1 de diciembre de 2016, teniendo en cuenta el grave sufrimiento del pueblo a causa de las dificultades para obtener alimentos y medicamentos, y por la falta de seguridad. La Santa Sede dirige, finalmente, un apremiante llamamiento a toda la sociedad para que sea evitada toda forma de violencia, invitando, en particular, a las Fuerzas de seguridad a abstenerse del uso excesivo y desproporcionado de la fuerza.

Sáb 22 Jul 2017

“Ciudadanos del Reino”

Por: Mons. Omar Mejía Giraldo - Cuando hablamos de ciudad necesariamente tenemos que mencionar la necesidad de unos principios que regulen la convivencia ciudadana; es decir, que organice las relaciones mutuas para lograr que haya paz, fraternidad y respeto entre todos. Desde siempre el ser humano se concibe como un ser en relación, por lo tanto el entendimiento se logra con lo básico y fundamental: “ser racionales”. Para entender el planteamiento basta comprender un simple pensamiento de la antigüedad, Sócrates por ejemplo nos dice que es necesario el dominio de sí mismo como base de la moral, para conformar hombres de bien, a Sócrates como buen maestro, le interesaba los problemas éticos de la convivencia entre los ciudadanos. Jesús, el Señor, es Maestro y como tal enseña y le interesa sobre manera la convivencia de la gente. Dice la Palabra que Jesús enseñaba a la gente, su actitud era la de siempre ir enseñando; El tenía la misión de dar a conocer el misterio del “Reino de los Cielos”. Para hacerse entender, Él se acerca a la gente y unas veces les habla a los oídos o en privado y muchas otras les habla desde las azoteas y desde las orillas del lago e incluso desde las barcas; en fin, Jesús es el Maestro y busca la mejor manera pedagógica de hacer comprensible su mensaje. La liturgia de la Palabra del domingo anterior, la de hoy y la del próximo domingo, nos presenta en su conjunto el capítulo 13 de San Mateo, donde el escritor sagrado nos ofrece la enseñanza de Jesús en siete parábolas con las cuales Él compara el Reino de los Cielos. Específicamente hoy nos dice: “El Reino de los Cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo…; El Reino de los Cielos se parece a un grano de mostaza…; El Reino de los Cielos se parece a la levadura…” Semilla, mostaza, levadura, tres ejemplos sumamente sencillos a través de los cuales el Reino de los Cielos se compara con la simplicidad, con lo original, con la vida cotidiana, con el desenvolverse del acontecer de todos los días. Aquí no hay filosofía, no hay argumentos, no hay disertaciones, no hay discusiones; lo que si existe es vida y vida en abundancia, que es precisamente lo que Jesús viene a traer. Jesús es Maestro y Señor, es cercano y comparte la vida privada con sus apóstoles; ellos le piden que les explique la parábola de la semilla y Él dice: “El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del Reino; la cizaña son los partidarios del Maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles.” Para efecto de nuestra enseñanza y para comprender mejor el mensaje del presente domingo vamos a observar cinco actitudes fundamentales para regular la convivencia entre nosotros. No se nos olvide lo siguiente: Jesús, el Maestro y Señor, nos ha sembrado la semilla de la Palabra en el mundo y nosotros como buenos discípulos de Él debemos sabernos los “ciudadanos del Reino”; por lo tanto, los invito a observar las siguientes actitudes para nuestra convivencia fraterna y para la construcción de la paz entre nosotros: 1. Sembrar Como personas de fe debemos sembrar las virtudes propias del evangelio: el amor, la fraternidad, la humildad, el perdón, la honestidad… Debemos sembrar buena semilla y para poder realizar el acto de sembrar hemos tenido que cosechar. Si observamos el pasado, no nos resta sino dar gracias a Dios por el testimonio de nuestros padres y familiares por el ejemplo de honradez y fidelidad a la palabra con la cual ellos han vivido y nos han formado. Nos corresponde a nosotros conservar las virtudes y valores que hemos recibido en herencia de nuestros mayores. Preguntémonos por lo tanto: ¿Estamos sembrando virtudes y valores en las nuevas generaciones? ¿Qué cizaña debemos erradicar de nuestra vida para poder ser testimonio de honestidad, fraternidad y paz? Pregunta desafiante, para pensar: ¿Cuándo fue la última vez que fuimos honestos? Si no sembramos virtudes y valores en los niños y jóvenes, no soñemos con buenos ciudadanos, es decir, no soñemos con “ciudadanos del Reino”, por lo tanto, no soñemos con paz. 2. Paciencia Dice la Palabra de Dios: “Dios es lento a la ira y rico en clemencia.” El texto de hoy nos cuenta que el sembrador al recibir la noticia que había cizaña en el campo junto con el trigo le pide a los segadores que tengan paciencia, que no se afanen a erradicar la cizaña todavía, porque corren el riesgo de arrancar también el trigo. “Todo tiene su tiempo” (Eclesiastés 3). Dios es misericordia y misericordioso, sabe que siempre hay una alternativa. Dice la Palabra: “De estas piedras Dios puede sacar hijos de Abraham”, es decir, “para Dios nada es imposible.” Con la fuerza de Dios la misma cizaña, podría ser transformada en trigo (milagro), pero se necesita entrar en el misterio de Dios. Con Dios lo humanamente imposible se hace posible por el poder de su gracia. Siempre hay una alternativa: La conversión, volver a la originalidad con la cual salimos del corazón de Dios. La gran enseñanza para nosotros es la de poseer fe y esperanza en la misericordia de Dios. Tantas cosas que no logramos comprender hoy, pueden ser posible de asumir mañana, cuando nos abramos plenamente al poder de Dios. Un ejemplo sencillo: “El buen ladrón”, éste hombre al final de la jornada comprendió quien era Jesús y en el último instante de su vida se ganó la salvación. Siempre hay una última oportunidad. El secreto está en no asustarnos por la simplicidad del Reino de Dios, recordemos que es tan pequeño como un grano se mostaza y es como la levadura que se disuelve en la masa para poderla fermentar. Como discípulos de Jesús nuestra tarea es ser pacientes y darnos siempre la oportunidad de estar en actitud de crecimiento; además, de dar la oportunidad de crecimiento también a los demás. Muchas veces somos ansiosos frente a las responsabilidades de los otros y poco exigentes con las responsabilidades nuestras. La Palabra nos invita a poseer la paciencia de Dios, en lo práctico, entendamos la paciencia del campesino, que sale a sembrar y sabe que su semilla se demora días, meses y hasta años para poder dar su fruto, lo importante es que finalmente dé un buen fruto en el tiempo justo y razonable. 3. Libertad “Déjenlos crecer juntos hasta la siega.” Qué bueno entender la importancia de la libertad. Sin libertad no hay buenos frutos. No podemos imaginarnos un campesino yendo todos los días al huerto a observar cómo va la plantica o arrancándola para ver si en otro como reacciona fuera de la tierra. La planta se deja crecer con libertad y al final vendrán los resultados. Igual pasa con las personas…, padres de familia, maestros…, eduquen a sus hijos, fórmenlos, pero por favor, déjenlos crecer con libertad. Sin libertad será imposible construir la paz entre nosotros, pero la libertad no es decir y hacer lo que se nos venga en gana. Lo primero que nos exige la libertad es nuestra capacidad racional y nuestra capacidad de escucha para luego discernir y obrar con ética, respeto y honestidad. Vale la pena hacer una mención aquí a la gran responsabilidad que tenemos hoy de usar bien las redes sociales. Qué tristeza ver hoy como nos destruimos a través de los medios de comunicación, creemos que libertad es decir y hacer lo que se nos venga a la mente o lo que se nos ocurra. Si de verdad queremos vivir como ciudadanos civilizados, aún más si queremos de verdad comportarnos como “ciudadanos del Reino”, tenemos que empezar por respetar la libertad de los otros y por hacer respetar nuestra libertad. Libertad, según las sagradas escrituras es “ser lo que se es”; somos humanos, vivamos como humanos; somos racionales, antes de obrar pensemos; somos comunicativos, antes de hablar conectemos nuestro cerebro; somos hijos de Dios, obremos como hijos de Dios. Como “ciudadanos del Reino”, no nos podemos dar el lujo de ser corruptos, deshonestos, tramposos…; es decir, no podemos ser cizaña, tenemos que ser trigo y buen trigo, trigo dorado… 4. Discernimiento La palabra discernir es definida así: “Distinguir por medio del intelecto una cosa de otra o varias cosas entre ellas.” El evangelio nos permite observar que en un principio el trigo y la cizaña poseen un cierto parecido, hasta tal punto que no es justo arrancar la cizaña inmediatamente porque se puede arrancar también el trigo. El discernimiento nos permite ir observando el momento justo para actuar de acuerdo a las necesidades del momento, teniendo en cuanta la mayor conveniencia y buscando siempre el bien común. El discernimiento nos ayuda a ver si se es trigo o cizaña. Hoy es urgente recuperar en nuestra cultura el discernimiento espiritual. Desde el concilio vaticano II la iglesia nos viene insistiendo en la necesidad del discernimiento de los signos de los tiempos. “Hoy lo llamamos lectura de la realidad”, que consiste en estar continuamente atentos a los ritmos del mundo para desde el evangelio juzgar la realidad y poder dar respuestas acertadas y esperanzadoras. El llamado es a los padres de familia, a los maestros, a los líderes sociales, políticos y religiosos, para que estemos atentos a saber discernir lo que acontece entre nosotros; pongo un ejemplo: Tenemos que preocuparnos más por la situación de desenfreno moral y ético de nuestra cultura; deberíamos preocuparnos más por nuestros niños y jóvenes, sus adiciones, sus situaciones, sus esclavitudes… 5. Juicio Al final el texto del evangelio nos dice: “el Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y arrancarán de su Reino a todos los corruptores y malvados y los arrojarán al horno encendido.” La seguridad que hemos de tener es que el juicio final y definitivo lo hará el Señor. Dios nos ha creado para el bien y puede ser que en algún momento de nuestra vida le hayamos permitido al maligno que sembrara cizaña en nuestra vida, esto nos ha hecho perder el norte y nos ha desorientado. Pero tengamos en cuenta que de ninguna manera podemos sentirnos como causa perdida, ni tampoco podemos sentir a los otros como definitivamente perdidos. Es necesario entender que ninguno de nosotros podemos dar juicios definitivos, éstos son objeto única y exclusivamente de Dios. Él es quien realmente conoce el corazón del hombre, es Él quien en definitiva conoce las intenciones y los sentimientos. Por eso, el juzgar es propio únicamente de Dios. Cuidémonos de dar juicios, aportemos, pero siempre buscando el bien y nunca el mal. Seamos trigo dorado que aporta vida y no cizaña que trae muerte. + Omar Mejía Giraldo Obispo de Florencia

Lun 17 Jul 2017

Sembremos semillas de perdón, reconciliación y paz

La Palabra de Dios es luz para nuestro diario vivir. Hoy nos exhorta a ser sembradores de la semilla de su Reino anunciado por Jesús. Semillas de perdón, reconciliación y paz; de justicia con sabor a misericordia divina. Seamos tierra fértil para dar frutos de paz. Lecturas [icon class='fa fa-play' link='']Primera lectura: Sb 12,13.16-19[/icon] [icon class='fa fa-play' link='']Salmo: Sal 86(85),5-6.9-10.15-16a (R. 5a)[/icon] [icon class='fa fa-play' link='']Segunda lectura: Rm 8,26-27[/icon] [icon class='fa fa-play' link='']Evangelio: Mt 13,24-43 (forma larga) o Mt 13,24-30 (forma breve)[/icon] [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link=''] CONTEXTO BÍBLICO[/icon] Contexto bíblico 1.1 ¿Qué dice la Sagrada Escritura? El libro de la sabiduría es una mirada contemplativa sobre la historia del pueblo de Israel, que observa con asombro la manera indulgente de un Dios que no condena a quienes practican la injusticia contra el pueblo elegido, sino que los acoge. El autor sapiencial, da la impresión, que no entiende como Dios permite la idolatría y más aún, espera y acoge con tolerancia a quienes la promueven e incluso les prodiga perdón, como en su tiempo a los cananeos, (Ex 23,28; Dt 7,11.20). El autor sapiencial desvela una faceta profunda de la justicia de Dios. No se deja llevar por su poder universal, con el cual puede destruir al idólatra, a sus consecuencias, sino que da tiempo, permite que su tiempo y el del hombre se sincronicen de tal manera que en el encuentro resplandezca el rostro del verdadero Dios y se ilumine la oscuridad de quien buscándolo se ha extraviado del verdadero camino. La paciencia de Dios frente a la condenación del pecado permite ver con fuerza escatológica, que la voluntad de Dios es “esperar” el arrepentimiento del pecador (1 Tim 2,3-6). En conclusión, el texto resalta la misericordia de Dios en el castigo de los pecados para dar lugar al arrepentimiento. El salmo 85, es el reflejo “desarticulado” de la realidad sufriente de una persona que confía su situación a la misericordia de un Dios que no le abandona, sino que el orante, espera que ese Dios a quien clama, desborde sobre él su infinita ternura. En el centro del salmo hay un cántico, en el que se mezclan sentimientos de gratitud con una profesión de fe en las obras de salvación que Dios realiza delante de los pueblos (cf. vv. 8-13). No cabe duda, una oración en medio de la idolatría, exige, reconocimiento de la grandeza de Dios, fe en su infinita misericordia y la esperanza que todos en algún momento de la existencia, pondremos a Dios como el Señor de nuestra vida. En Romanos (8,26-27), el apóstol pone de manifiesto que la oración va más allá de métodos y de técnicas; no basta la simple intención humana para sumergirse en la gracia de Dios por medio de la oración, que puede desfallecer a causa de la fragilidad humana. El apóstol pone de manifiesto la acción del Espíritu Santo que da fuerza a la voluntad humana para permanecer en la oración en medio de las dificultades. El apóstol anuncia que el Espíritu Santo es dinamismo de acción, como también de oración, es el mediador eficaz del anuncio de la salvación obrada por Cristo y la garantía del auténtico testimonio cristiano. El Evangelio según san Mateo, en la llamada parábola del sembrador, nos ofrece la oportunidad de acercarnos al corazón de Jesús y contemplar lo que él sentía y pensaba sobre el Reino de Dios que anunciaba y nos explica el misterio de su vida: “es el misterio del reino, el mismo de su Palabra en nosotros”. El capítulo 13 de san Mateo, le ofrece al lector orante del evangelio, cuatro parábolas que tienen como destinatario al pueblo y de ese pueblo hay un grupo, los discípulos, a quienes les entrega también en cuatro parábolas los elementos para el verdadero discernimiento. Es la oportunidad para que los discípulos, entren en el ámbito de Dios y se apropien de los elementos con los cuales Dios actúa en la historia, la manera como fija su mirada misericordiosa en la realidad y puedan hacer una “teología de la historia”, es decir, interpretar los signos de los tiempos cargados de conflictos, con estructuras de violencia, con la misericordia de Dios y evitar que la realidad los inhabilite para llegar a ser justos como Dios es justo. La Parábola revela la existencia del Reino de Dios, pero no ha llegado a su plenitud, y debemos enfrentar la resistencia que surge frente al anuncio del Reino y tener claridad que nos encontramos en la fatiga de la siembra y de la pesca y tenemos la esperanza de celebrar el banquete de la justicia que reconcilia y nos permite vivir en paz. 1.2 ¿Qué me dice la Sagrada Escritura? La Palabra de Dios como luminaria en el camino, indica que si queremos ser verdaderamente “justos”, nuestra justicia se debe inspirar en la justicia de Dios, que ante el pecador, le entrega su ternura y comprensión y frente al pecado es radical, y esa simbiosis, aparentemente contradictoria, le permite al ciudadano de a pie, entender que “el hombre justo debe ser humano para poder ser hombre de esperanza” (v. 19). El fruto maduro del hombre justo a imagen de Dios, es sembrar la dorada semilla de la esperanza de la conversión de los hermanos. [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']ADQUIERE EL PLAN DE PREDICACIÓN[/icon]

Jue 13 Jul 2017

Periodistas alemanes visitan Colombia para conocer panorama de reconciliación y paz

Por estos días un grupo de periodistas alemanes y representantes de la organización católica alemana Adveniat, visitan Colombia con el propósito de conocer la realidad territorial actual, saber más sobre los procesos de búsqueda de reconciliación y paz que se adelantan en el país y hablar con los voceros de la Iglesia para entender el rol que desempeña ésta en la mediación y facilitación de dichos procesos. La primera jornada de actividades de la visita se llevó a cabo este miércoles 12 de julio en la Capital Colombiana e inició con un encuentro especial entre la delegación y el Arzobispo Metropolitano de Villavicencio y recién electo presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Monseñor Óscar Urbina. Durante este, los periodistas, que en su mayoría se desempeñan como corresponsales en diferentes países latinoamericanos como Brasil, México y Argentina, tuvieron la oportunidad de formular diversas preguntas sobre el contexto colombiano al máximo representante del episcopado quien es, además, Presidente de la Comisión de Conciliación Nacional (CCN). “El camino que hemos emprendido, fruto del diálogo, es el que debemos seguir”, afirmó Monseñor Urbina a propósito de la postura de la Iglesia frente a las salidas negociadas al conflicto armado que adelantan en la actualidad entre el Gobierno Nacional y grupos guerrilleros como FARC-EP (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y ELN (Ejército de Liberación Nacional). Sin embargo, fue enfático en que el camino hacia la reconciliación y la paz también requiere una pedagogía del encuentro y del diálogo dirigida a todos los colombianos, que haga énfasis en la necesidad de adoptar principios como la humanidad, la verdad y la solidaridad con el otro. Para el Presidente de la CEC es además fundamental pensar en la construcción de un nuevo país desde la reconciliación con el territorio, bajo el cuidado del medio ambiente y la generación de oportunidades de desarrollo para los campesinos en esta nueva etapa que vive la Nación. “La experiencia entra por los pies, por los territorios que uno camine”: fue el mensaje que al final entregó a los periodistas, para animarlos en la visita que realizarán el próximo viernes 14 de julio a la comunidad de Mesetas (Meta) y a la Zona Veredal Transitoria de Normalización (ZVTN) Mariana Páez, ubicada en esa región. La segunda cita del día fue con el Señor Embajador de Alemania en Colombia, Michael Bock, quien presentó a sus compatriotas algunos fenómenos específicos del panorama nacional actual y su opinión sobre ellos, desde el enfoque internacional. Temas como la implementación del Acuerdo de Paz alcanzado entre el Gobierno y las FARC, los diálogos con el ELN, la situación del Pacífico Colombiano, el escenario preelectoral, los asesinatos a líderes sociales y defensores de derechos humanos y el narcotráfico fueron allí protagonistas. Tras casi dos horas de reunión, en entrevista con periodistas de la CCN, el Diplomático ratificó el compromiso de su país con el apoyo a la búsqueda de paz en Colombia y calificó de maravillosa esta experiencia que tendrán los periodistas, como factor clave para la comunicación efectiva de esta realidad en el exterior. La jornada se completó con un encuentro entre los visitantes y el Secretario General de la Comisión de Conciliación Nacional, el padre Darío Echeverri. El sacerdote explicó a los periodistas los principales elementos de la misión de la Comisión en el horizonte de la reconciliación nacional y en representación de la Conferencia Episcopal: instrumento humanitario, puente de diálogo entre los actores armados ilegales y el Gobierno, y facilitador de los procesos de construcción de paz en las regiones, a través de las Comisiones de Conciliación Regional y de las actividades que se realizan en regiones históricamente afectadas por el conflicto armado, como los Diplomados para la Reconciliación y la Paz. En este sentido, destacó además el importante aporte que realiza Alemania para la consecución de estos esfuerzos, a través del apoyo solidario de la Embajada y de organizaciones como Adveniat, la Asociación de Cooperación para el Desarrollo (AGEH) y la Fundación Konrad-Adenauer-Stiftung (KAS). A propósito de su percepción sobre los diálogos entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional, y de la visita apostólica del Papa a Colombia programada para el mes de septiembre, el Padre Echeverri afirmó: “sería de esperarse que con la visita del Papa se dé el primer paso firme para que el proceso de paz con el ELN se haga irreversible”. Recordó la existencia de otros grupos insurgentes como el EPL (Ejército Popular de Liberación) y de bandas criminales en los territorios. Agregó además que aunque hay muchas cosas que no le gustan del Acuerdo, “hay otras que son buenas, como el tema de tierras. Si se llegara a implementar como está previsto, a favor por ejemplo de la deuda histórica institucional que se tiene con los pobres del país, Colombia podría obtener grandes transformaciones desde el campo y convertirse incluso en un futuro banco de alimentos para el hambre del mundo”, puntualizó. La comitiva se reunirá este jueves con el Arzobispo de Bogotá y Cardenal Primado de Colombia, Rubén Salazar Gómez. En la tarde, partirá hacia la ciudad de Villavicencio para continuar con las actividades programadas en los Llanos Orientales, entre los que también se encuentra su asistencia al primer evento privado de lanzamiento de la más reciente publicación de la Comisión de Conciliación Nacional, “A mí me educó un árbol: Psicagogía del amor. Disposiciones políticas, culturales, psicológicas y armadas en torno al despojo de la niñez mediante el crimen del reclutamiento y la utilización de niños, niñas y adolescentes en contextos de guerra y criminalidad”, elaborada gracias al apoyo solidario de la Embajada de Alemania, en el marco del proyecto pedagógico para la reconciliación y la paz denominado “Acciones Conscientes”. La presencia de esta delegación alemana se hace realidad gracias a la organización católica alemana Adveniat, que coopera con los pueblos y la Iglesia de América Latina y el Caribe, para poner en marcha proyectos sociales y humanitarios que contribuyan al desarrollo de las regiones. Los seis periodistas alemanes, acompañados por representantes de esa organización, estarán por estos días en Bogotá y municipios del departamento del Meta como Villavicencio, Granada y Mesetas. Fuente: Of. comunicaciones Comisión de Conciliación Nacional

Mié 21 Jun 2017

"Con fraternidad construiremos un país mejor":Cardenal Rubén Salazar

El cardenal Rubén Salazar Gómez llamó a los colombianos a solucionar los problemas del país con base a la unidad y no a la polarización. Así lo manifestó en declaraciones que brindó a los medios de comunicación que participaron del Foro: "Visita Apostólica del Santo Padre Francisco", organizado por Casa Editorial El Tiempo y la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), este miércoles 21 de junio. El prelado recordó que el papa Francisco viene a Colombia a invitarnos a la fraternidad, solidaridad, el diálogo y la construcción de un país como todos anhelamos. Así también, explicó que el papa Francisco reitera su invitación para que los colombianos blindemos la paz; es decir, sentar las bases sólidas con base a la justicia y la equidad. “La paz se blinda con fraternidad, solidaridad y justicia”, recordó el purpurado. El también presidente del Celam, insistió que se debe trabajar por una paz sólida y no fragmentada. “El papa nos conoce, tiene muchas esperanzas en los recursos espirituales y los valores de los colombianos”, comentó Salazar Gómez. En relación al atentado que se efectuó en el Centro Comercial Andino y el secuestro de periodistas, el prelado afirmó que con estas acciones el país está lejos de conseguir la paz, por ello insistió que el compromiso de todos los colombianos debe ser para edificar la paz sin ninguna excepción. “Tenemos que afianzar nuestro compromiso por la paz”, puntualizó.

Mar 13 Jun 2017

La visita no es política

Por: Padre Juan Álvaro Zapata Torres - Desde el día en que fue confirmada la visita del Papa Francisco a Colombia este año, muchos expresaron su alegría y esperanza por lo que su presencia puede generar en el país. No obstante, un menor grupo de personas interpretaron este acontecimiento como un hecho político y comenzaron a generar una sombra de duda frente a la llegada del Santo Padre. Ante este hecho vale la pena recordar e insistir algunos criterios pastorales que van a orientar este acontecimiento para nuestra patria. El Comité Ejecutivo Nacional para la visita del Papa y los Obispos católicos de Colombia, tienen como primer criterio que la visita del Santo Padre debe ser entendida como un acontecimiento puramente pastoral, en la que como Padre viene a consolar e iluminar. Que con su voz profética bendecirá a su pueblo y lo invitará a gestos concretos de reconciliación, perdón y misericordia. Será la de un Pastor que nos exhortará a ser artesanos de la paz que Jesús nos regala, como nos lo relata el evangelista Juan, donde Jesús resucitado se presenta a sus discípulos atemorizados, irrumpe en sus vidas, a pesar de que las puertas estaban cerradas con cerrojos, y les dice: “La paz con vosotros. Dicho esto, les mostró las manos y el costado” (Jn 20, 19-20). Esta es la paz que añoramos como fruto de nuestro compromiso de cambio integral en nuestras vidas. Por ello, es perentorio que todos reconozcamos que esto es una gracia del Señor Jesús, pero también un trabajo mancomunado y sin descanso de cada uno de los colombianos. En consecuencia, la presencia del Papa en Colombia no se va a enmarcar como un “acontecimiento político”, sino como un hecho pastoral y evangelizador. Desde el principio los Obispos de Colombia han tenido el firme propósito de no permitir ninguna forma de manipulación, que desee utilizar la visita con fines propagandísticos o como plataforma política e ideológica de ningún movimiento social. Tampoco como excusa para privilegiar algún sector de la sociedad o hacer visibles propuestas sociales de algún grupo en particular. Asimismo, para este momento de gracia están invitados a recibir al Santo Padre, todos los colombianos que quieran escuchar la voz del Papa, Vicario de Cristo, sucesor de san Pedro y Pastor de la Iglesia universal, que viene a animarnos y confirmarnos en la fe (cf. Lc 22, 32), a guiarnos como el pastor orienta a sus ovejas hacia los mejores pastos (cf. Sal 23), y a ayudarnos en las necesidades que tiene nuestro país, por medio de su magisterio y discernimiento. De ahí que la presencia del Papa en Colombia será “un punto de partida para comenzar algo nuevo” sin dejar de mirar atrás, con memoria agradecida, lo que hemos construido como pueblo que cree en Cristo Jesús y que se vea a sí mismo de una manera esperanzadora. Por eso, la preparación se ha centrado en el texto de Isaías 43, 18-19: “Yo estoy por hacer algo nuevo: ya está germinando, ¿no se dan cuenta? Sí, pondré un camino en el desierto y ríos en la estepa”. Este texto de la Palabra de Dios nos anima a creer firmemente en que nuestro país, colmado de riquezas humanas y naturales, merece vislumbrar en el horizonte un nuevo amanecer, para que, superando las raíces de la violencia y todo aquello que nos ha fracturado, podamos como hermanos caminar hacia una auténtica e integral felicidad, que se fundamente en los derechos humanos y en el progreso de todos los pueblos de forma justa, equitativa y solidaria. Asimismo, se entiende la visita del Papa Francisco como un momento privilegiado para impulsar a todos los bautizados a evangelizar como discípulos misioneros, con nuevo ardor y convicción a todos los hermanos, para que se fortalezca el compromiso de ser una “Iglesia en salida” que privilegia el trabajo con los “descartados de la sociedad”, con los que no cuentan económicamente y todos aquellos que se encuentran en las “periferias existenciales”. Por lo tanto, esta visita apostólica ha de favorecer y propiciar la “cultura del encuentro”, como lo hizo Jesús: no sólo viendo sino mirando, no sólo oyendo sino escuchando, no sólo cruzándonos con las personas sino parándonos con ellas, para que, en un futuro próximo, los enemigos se vuelvan a dar la mano y los que no cuentan para la sociedad sean acogidos como hermanos. Por ello, es necesario evocar las palabras del Papa Francisco que nos invita a no perder el encanto de soñar juntos, de caminar juntos, de encontrarnos y atrevernos a soñar sin importar cuales hayan sido las caídas, nunca debemos perder el encanto de soñar con un camino diferente. Es por esto, que la visita del Santo Padre a Colombia será un momento de gracia y alegría, para dar el primer paso y volver a reencontrar al otro, dejando atrás las rencillas y los odios que tengamos con familiares, amigos o vecinos, que volvamos a creer en nosotros mismos y que le apostemos a la construcción de un país mejor y hermanado. P. Juan Álvaro Zapata Torres Secretario adjunto Conferencia Episcopal de Colombia

Jue 8 Jun 2017

Directivas y colaboradores de la CEC oran por la paz del mundo

Directivas y colaboradores de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) este jueves a mediodía se unieron al llamado que hizo el papa Francisco para dedicar un minuto por la paz del mundo. La iniciativa fue lanzada para recordar la histórica reunión en 2014, en los jardines del Vaticano, con el fallecido presidente de Israel, Shimon Peres, y el líder palestino Mahmud Abas, durante la cual pidieron por la paz en Oriente Medio y plantaron un olivo. “Hoy se renueva en diversos países la iniciativa un minuto para la paz. Un pequeño momento de oración, para recordar el encuentro en el Vaticano que mantuve con el desaparecido presidente israelí Peres y el presidente palestino Abas”, explicó el pontífice a los miles de fieles que asistieron a la audiencia en la plaza de San Pedro este miércoles.