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navidad

Mar 6 Dic 2016

Jooo…jojojo.Se roban al Niño Jesús

Por: P. Jorge Enrique Bustamante Mora - Diciembre, para los cristianos católicos es un mes de gran festividad, es el tiempo de la navidad, es el tiempo donde mejor se vive la fraternidad, la amistad, la solidaridad… etc. todo se llena de luces, regalos, alimentos, adornos que engalanan casas, calles, edificios, Iglesias y ciudades enteras. Pareciera que el nacimiento del Niño Jesús lo invade todo, pero la verdad es que como creyentes debemos estar alerta porque detrás de una risa burlona jooo.. joo, se roban el verdadero sentido de la navidad. La navidad celebra con gozo el nacimiento del Niño Jesús, el Hijo de Dios, que nació de María Santísima junto a su esposo, el Casto san José. Los personajes principales son ésta santa Familia, y de manera particular el NIÑO DIOS. El centro de nuestra fe y lo que celebramos los cristianos en navidad es este acontecimiento histórico del nacimiento del Niño Jesús. Sin embargo, el consumismo de manera disimulada nos quiere robar al Niño Jesús, nos lo quiere cambiar por un viejo gordo, barrigón, que con su estridente risa JOJOJO se burla de quienes nos dejamos llevar más por la forma que por el contenido. En las casas de los católicos, y en algunos templos para dolor del creyente, se asoma en las puertas, ventanas, adornos y colgandejos este personaje que quiere desplazar del todo al Niño. En muchos lugares que he visto atiborrados por este personaje he buscado las figuras de la Sagrada Familia: Jesús, José y María (el Belén), o un pesebre, y tengo que decirlo con dolor en el corazón, que en la gran mayoría no los he encontrado, nos han cambiado la navidad, el Niño está siendo desplazado y remplazado y lo peor los católicos no nos estamos dando por enterados. Este personaje que el mundo llama de diversas maneras: santa Claus, Papá Noel, San Nicolás, poco, mejor lo digo de plano: ¡nada tiene que ver con la navidad cristiana! “En 1809 el escritor Washington Irving escribió una sátira, Historia de Nueva York, en la que deformó al santo holandés, Sinterklaas, en la burda pronunciación angloparlante Santa Claus. Más tarde el poeta Clement Clarke Moore publicó en 1823 un poema donde dio cuerpo al actual mito de Santa Claus, basándose en el personaje de Irving. En ese poema se hace mención de una versión de Santa Claus, enano y delgado, como un duende; pero que regala juguetes a los niños en víspera de Navidad y que se transporta en un trineo tirado por nueve renos, incluyendo al reno Rudolph (Rodolfo)”. Un mito, con sabor de duendes, no debe ser motivo para cambiar al Niño Jesús y a los hermosos villancicos que hablan de Belén, del Niño, de la Virgen, de San José, para cantar el famoso “Rodolfo el Reno” que nada habla de nuestra navidad. El llamado “papá Noel” es una creación comercial al servicio del consumismo, una figura estadounidense o al menos del Polo Norte, intrusa que destruye y desplaza lo auténticamente cristiano. Algunos la han querido cristianizar y la han relacionado con San Nicolás de Myra (en Oriente, por su lugar de fallecimiento) o San Nicolás de Bari (en Occidente, por el lugar donde fueron trasladados y reposan sus restos), un obispo que vivió en el siglo IV en Anatolia, la actual Turquía; pero cuya figura y vida nada tiene que ver con el llamado papá Noel o San Nicolás con traje rojo, gorra de dormir y risa burlona de nuestros días. Los cristianos católicos no podemos promover valores paganos, nosotros seguimos a Jesús, y Él es nuestra luz, no podemos dejar pasar a segundo plano la navidad y menos promover un mundo del consumismo. El mundo nos quiere robar. Es importante mantenernos alerta porque en los últimos tiempos, en varias ciudades a nivel mundial, han propuesto cambiar el nombre a la navidad por otros, disque más incluyentes, como “solsticio de invierno” o “fiestas de la luz o del invierno”; la alcaldesa de Barcelona España, Ada Colau, ha dicho que “se trata de promover otro tipo de valores de origen pagano como “el triunfo de la luz” y dejar en segundo plano la navidad… y promover la feria del consumo responsable” (OK diario Cataluña). No puedo callar frente a esta realidad. Hermanos sacerdotes y bautizados todos, por favor no nos dejemos robar la Navidad, tengamos una actitud crítica y de alerta para promover y defender lo nuestro, nuestra fe, nuestras costumbres. Pidamos a las administraciones municipales que el embellecimiento de las ciudades no sea solo luces e imágenes sin contexto navideño, hay que pedir el pesebre, lo propio de este tiempo. Enseñemos a nuestros niños el valor de la Navidad, la importancia de aceptar al Niño Jesús que nos trae todos los regalos, especialmente los espirituales, y el máximo de ellos la Salvación. Aprovechemos la navidad para evangelizar, no nos la dejemos robar. ¡Una Feliz Navidad cristiana católica! Prefiero expresarla así por si acaso. Felices fiestas del Nacimiento del Niño Jesús. P. Jorge Enrique Bustamante Mora Director Dpto. Doctrina y Animación Bíblica [email protected]

Lun 28 Nov 2016

María es modelo de vida y acompañante misionera

En el camino del adviento, la Iglesia celebra con profundo gozo la solemnidad de la Inmaculada Concepción de María. Este dogma de fe fue proclamada por el Papa Pío IX, el 8 de diciembre de 1854. Así la Eucaristía de este día nos permite contemplar en la Santísima Virgen María el modelo de la vida del cristiano que, en la Iglesia, espera a Cristo que viene. Con María, modelo e intercesora, participemos en esta celebración. Lecturas [icon class='fa fa-play' link='']Primera lectura; Gn 3,9-15.20[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Salmo: 98(97),1.2-3ab.3cd-4 (R. Lc 1,49)[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Segunda lectura: Ef 1,3-6.11-12[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Evangelio: Lc 1,26-38[/icon] [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO BÍBLICO[/icon] La Liturgia siempre nos presenta la Escritura en forma tal que la Palabra llegue a nuestra vida. Hoy leemos cómo “el pecado entró en el mundo” (Cfr. Romanos 5,12) y cómo el pecado ha de salir del mundo. Eva con falsedad trató de exculparse “La serpiente nos engañó” (Gen 3,18), y María se ofreció a colaborar, “Fiat, hágase en mí según tu Palabra” (Lc. 1, 38). María es la llena de gracia y desde siempre sin pecado, ya antes de crearse el mundo, para la gloria y la alabanza de Cristo (Cfr. Ef. 1, 12). Con estos fundamentos bíblicos, la Iglesia maduró lo que es el Dogma, la doctrina de la Concepción Inmaculada. Y así el Papa Pío IX, en el año 1854, proclamó solemnemente que la bienaventurada Virgen María, en el primer instante de su Concepción, fue preservada inmune de toda mancha de pecado original por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Jesucristo Salvador del género humano. En efecto, así se expresa la Bula Ineffabilis Deus, citada en el Catecismo de la Iglesia Católica. Allí encontramos los detalles: ¿Quién? María; ¿Cuándo? en la Concepción, ¿Qué? sin pecado, ¿Por quién? por Dios, ¿Por qué? por los méritos de Jesucristo Accede al contenido completo del plan [icon class='fa fa-play' link='']VISITA EL ESPECIAL DE ADVIENTO[/icon]

Lun 28 Nov 2016

“Convertíos porque el reino de los cielos está cerca”

La Iglesia, siguiendo el ejemplo del Bautista, es la voz que clama en el desierto: ¡Preparad el camino del Señor! ¡Convertíos! Esta Buena Nueva siga resonando en el corazón de cada hermano. Escuchemos. Lecturas [icon class='fa fa-play' link='']Primera lectura: Is 11,1-10[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Salmo 72(71),1-2.7-8.12-13.17 (R. cf. 7) [/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Segunda lectura: Rm 15,4-9[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Evangelio: Mt 3,1-12[/icon] [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO BÍBLICO[/icon] La liturgia de este domingo tiene como figura central a Juan Bautista. Este es un personaje más interesante por lo que es que por lo que dice. Con él se culmina el Antiguo Testamento y se inicia el Nuevo; es decir, el inicio de la promesa y el cumplimiento de la misma. El texto de Isaías hace parte del segundo grupo de oráculos del profeta que comprende los capítulos 7-12 y tiene el nombre de “libro del Emmanuel”. Aquí se reagrupan todas las profecías que tienen que ver con el Mesías. Isaías es el gran profeta mesiánico. En la primera parte del texto (Is 11,1-5) se describe el descendiente de David y sus características; en la segunda (Is 11,5-10), se describen los efectos de su gobierno. El resto de Israel no será abandonado por Dios. De ese resto brotará un renuevo, un vástago sobre el que repose el espíritu del Señor; no importa que el tronco se haya muerto y que la raíz haya sido cortada en sus raíces vitales. Cuando las esperanzas humanas se agotan, el Señor retoma la iniciativa para renovar la historia de la salvación. La era mesiánica será un tiempo caracterizado por la paz y la reconciliación, un nuevo paraíso en el que los animales feroces habitarán pacíficamente y en estupenda relación con el hombre, expresada en el hecho de que los niños podrán meter su mano en el escondrijo de la serpiente. Accede al contenido completo del plan [icon class='fa fa-play' link='']VISITA EL ESPECIAL DE ADVIENTO[/icon]

Mar 22 Nov 2016

Especial Web de Adviento anima el perdón, la reconciliación y la solidaridad

La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) en sintonía con el inicio del tiempo de Adviento pone a disposición de todos los fieles el especial web: “Adviento, camino a la Navidad”. Con este recurso digital no sólo se quiere ambientar la llegada de Cristo, sino también animar en los corazones sentimientos de perdón, reconciliación y solidaridad y así renovados recibir al Salvador. El especial web contempla cuatro ambientes: “Es un itinerario que está en sintonía con la profunda necesidad que tiene nuestro pueblo colombiano de reencontrarnos, perdonarnos, reconciliarnos y ser solidarios”, explicó el padre José Elver Rojas, director de Comunicación Social del episcopado. El primer ambiente, lleno de recursos interactivos, le ayudará al usuario a comprender qué es el tiempo de Adviento. En el segundo ambiente, gracias a la colaboración de la Fundación ES.PE.RE, el visitante podrá encontrar valiosos testimonios acerca del perdón. Además, en este espacio todos están invitados a compartir testimonios de perdón que conozcan. “Sabemos que perdonar no es fácil, pero en un corazón en el que Cristo habita todo es posible, inclusive el perdón”, afirmó el padre Elver Rojas. El tercer ambiente explica al visitante qué es la reconciliación. Aquí hallará recursos interactivos, como una encuesta, claves para la reconciliación y la parábola del Buen Samaritano de manera didáctica. En el último ambiente el usuario podrá unirse a la construcción de un mapa sonoro de la solidaridad. Esta es una propuesta de carácter colaborativo en la cual se anima al visitante a ser parte de su construcción. El mapa sonoro pretende destacar las voces de los colombianos que practican la solidaridad en diferentes ámbitos como ser: hogar de niños, ancianos, escuelas, hospitales, albergues, comedores, etc. >>Participa del mapa sonoro Monseñor Juan Carlos Ramírez, animador del proyecto directorio de entidades eclesiásticas sin ánimo de lucro destacó que el mapa sonoro hace visible el trabajo evangelizador y social de la Iglesia en la promoción integral de las personas y de las comunidades y además de animar la caridad con y entre las instituciones que no son conocidas. Finalmente, el padre Elver Rojas invitó a los colombianos para que visiten este espacio virtual, que quiere ser un aporte a la construcción de la paz. “Queremos que Adviento sea el tiempo donde nuestros corazones se preparen para recibir a Cristo, para practicar el perdón, la reconciliación, la solidaridad y así alcancemos la paz que tanto espera nuestro país”, concluyó.

Mié 9 Nov 2016

Novena de Navidad una oración por la paz de Colombia

La Conferencia Episcopal de Colombia pone a disposición de los fieles la tradicional Novena de Navidad que tiene como énfasis especial pedir a Dios que regale a Colombia el don de la paz. El presidente del episcopado, monseñor Luis Augusto Castro Quiroga, nos recuerda que la paz es un don y un regalo de Dios y que para acceder a ella debemos pedir con insistencia. “Esta novena ha de ser una súplica al Señor Jesús, para que nos regale el don de la paz”, subrayó. También explica que la paz presenta una dimensión interior y otra exterior, además ambas deben estar en armonía. “Si tenemos solo la paz interior pero no tenemos la paz exterior nos sentimos prisioneros” dijo el prelado. Monseñor Castro Quiroga resaltó que la paz, al igual que una planta, debe ser cuidada las 24 horas del día. “Entonces la paz es dedicación, no es una forma simplemente que todo lo resuelve, la paz es parte de la vida y de las relaciones que hay que ir cultivando”, señaló. En este marco la Novena de Navidad de la Conferencia Episcopal quiere ser un insumo que permita a todos los creyentes ser artesanos del perdón, la reconciliación y la paz. Para adquirir la Novena de Navidad pueden comunicarse con el Teléfono: 437 55 40 Ext. 264 – Celular: 3138808447 - Email: [email protected]

Lun 4 Ene 2016

Dejémonos empujar a la misión

La voz del Señor que abre el cielo es la que confirma y empuja la misión de Jesús para que alcance hasta los límites del orbe, dejemos que esta misma Palabra abra nuestros corazones y nos empuje a la misión. Escuchemos. Lecturas [icon class='fa fa-play' link=''] Primera Lectura: Isaías 42,1-4.6-7[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Salmo de respuesta: 29(28),1a+2.3ac-4.3b+9b-10 [/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Segunda Lectura: Hechos de los Apóstoles 10,34-38[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Evangelio: Lucas 3,15-16.21-22[/icon] [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO BÍBLICO[/icon] Con el genio de un pintor la liturgia de la Palabra de este domingo, quiere seguir esclareciendo el rostro de Dios, revelando su misterio, durante 3 domingos el ciclo C se dedica a dibujar o a revelar la epifanía de Dios. Hoy estamos ante esta segunda pincelada, que está a punto de dejar la obra de Dios bellamente representada ante los ojos humanos. A diferencia de los otros evangelios para Lucas Juan está en un segundo plano, nunca se afirma que bautice a Jesús, la fuerza para Lucas va a radicar en el Espíritu Santo que unge al Señor y en la voz del cielo que confirma la identidad de Jesús y su misión. Para el evangelista tanto el Jesús como su bautismo inauguran el tiempo nuevo: la irrupción de Dios en la historia, por eso la espera del pueblo no se va a cumplir con el signo de la conversión propuesto por Juan, sino por la profundidad del bautismo cristiano. Aquel solo era con agua, este en cambio es con Fuego y Espíritu, aquel solo llevaba a la conversión, el nuevo bautismo no solo constituye el perdón de los pecados, sino que abre el cielo y da la filiación divina. Por eso no está reservado solo a unos cuantos, sino que está dado para todos, pues como afirma Pedro en casa de Cornelio “Dios no hace acepción de personas”, esta dimensión universal de la fe, querida y esperado por la profecía de Isaías 42 que leemos hoy, se cumple por la revelación suprema de Jesús, luz de las naciones. Las lecturas lejos de buscar retratar los elementos antiguos del bautismo de Juan o de cualquier otro rito de aquel tiempo están expresando la novedad del bautismo cristiano: Es una acción trinitaria para regalar al hombre, a todos los hombres, el don de la filiación divina, el don de sentirse hijos muy amados, los predilectos, sin embargo esto no puede quedarse ahí, sino que, siguiendo la lógica del evangelio de Lucas, debe llevar a cada fiel a vivir la dimensión misionera de su fe, pues los textos de la Palabra que leemos en este día así lo demuestran y exigen. [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO SITUACIONAL[/icon] La gran herida de la pastoral en este tiempo es el olvido de la maravilla de ser hijos. Si en los cristianos la dignidad de la filiación divina fuera explicita, seguramente no existirán las injusticias y vejámenes que contemplamos ante nuestros ojos. Cada uno se esforzaría por vivir como exige la dignidad a la que ha sido llamado y por permitir que los otros también vivieran como hijos. La dignidad que hemos adquirido en el bautismo no es accidental, sino esencial, hace parte de nuestra condición de vida cristiana. El problema nace cuando a causa de la cerrazón del corazón no escuchamos la voz del Padre y no vivimos la unción del Espíritu que hemos recibido y que nos ha cristificado. Una pastoral adecuadamente iluminada por la Palabra tendría que llevar a cada fiel a vivir su dignidad cristiana, a que anuncie a los demás aquella realidad que poseen y así lograr juntos la construcción del Reino de Dios en medio de los hombres, por eso todo bautizado debe vivir su fe en clave de misión, pues la fe que no se comparte se estanca, se pierde, en cambio como decía san Juan Pablo II: La fe crece dándola. [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO CELEBRATIVO[/icon] Estamos celebrando el jubileo de la misericordia y el primer paso para sentir este don maravilloso del corazón del Señor no es sentirnos pecadores, sino sentirnos hijos. Esta dimensión tendría que marcar todo nuestro caminar durante este año, pues al experimentar dicho don: al sentir que también a nosotros, como a Jesús, el Padre nos llama sus hijos, nos unge con el Espíritu y nos envía a toda la tierra, tendría que convertirse en la consigna de toda nuestra vida. En la fiesta de la Epifanía, Dios se nos ofrecía pequeño y débil, ahora en su bautismo se nos presenta como el ungido y como el hijo ¿estamos viviendo estas realidades en nuestra historia de vida personal? Ahora que, con este domingo, estamos concluyendo la celebración de las fiestas de navidad y estamos a punto de iniciar la primera parte del tiempo ordinario, ¿Qué tanto hemos descubierto la cercanía de Dios que nos hace miembros de su familia? ¿Estamos siendo nosotros la presencia de Cristo? [icon class='fa fa-play' link=''] Recomendaciones prácticas[/icon] Sería conveniente administrar el sacramento del bautismo en este día. Si no se administra el sacramento del bautismo, podría usarse el rito para la bendición y la aspersión del agua, p. 1053 del Misal Romano, que ocuparía el lugar del acto penitencial. Recordar que: Hoy finaliza el tiempo de Navidad y desde mañana, lunes 11 de enero, comienza la primera parte del Tiempo Ordinario, que se prolonga hasta el martes 9 de febrero. Se sigue el formulario de la Misa para la semana I del Tiempo Ordinario, p. 291 del Misal Romano. Liturgia de las Horas Tomo III, Salterio 1ª semana.

Lun 4 Ene 2016

El Bautismo nos configura con Cristo

Al celebrar la fiesta del Bautismo del Señor el llamado a los creyentes es el de confirmar nuestra entrega a Cristo y su Evangelio, afirmó el cardenal Rubén Salazar Gómez. El purpurado recordó que a través del bautismo Dios ha querido hacernos hijos suyos y que nos configuramos con Cristo. “Dios nos amina a través del Espíritu Santo para que seamos discípulos del maestro”, subrayó. Así mismo explicó que la Navidad, la Epifanía y la Fiesta del Bautismo están íntimamente relacionadas y que en el Año de la Misericordia estamos llamados a tener un corazón abierto y sensible para ser misericordiosos como el Padre. Escuchemos con atención la reflexión. [icon class='fa fa-youtube fa-2x' link='']Ir a lista de reproducción[/icon]

Sáb 2 Ene 2016

Seamos peregrinos de la Fe

La peregrinación de la fe es el tema que nos muestran los textos de este día, para que nadie se quede estático sino que se ponga en camino con el don de la propia existencia a encontrarse con Dios y a establecer vínculos de solidaridad fraterna con todos los hermanos. Lecturas [icon class='fa fa-play' link=''] Primera Lectura: Isaías 60,1-6[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Salmo de respuesta: 72(71), 1-2.7-8.10b-11.12-13 (R. cf. 11) [/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Segunda Lectura: Efesios 3,2-3a.5-6[/icon] [icon class='fa fa-play' link=''] Evangelio: Mateo 2,1-12[/icon] [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO BÍBLICO[/icon] La manifestación del Hijo del eterno Padre en nuestra propia carne abre para toda la humanidad nuevos tiempos, los que Él mismo Padre había determinado desde la creación, cuando el hombre estaba inmerso en la luz de la gloria divina y que el pecado había oscurecido, haciendo al hombre enemigo de Dios. Esta enemistad sigue latente según el relato del Evangelista Mateo, cuando nos muestra a unos paganos caminando al encuentro del “Rey de los judíos” que ha nacido en Belén, mientras que las autoridades políticas y religiosas del pueblo de Israel experimentan “sobresalto”, pues ha aparecido la luz que pone al descubierto lo que hay en el corazón del hombre. Cerrarse a su resplandor y permanecer en plena noche fue el camino elegido por este grupo liderado por Herodes, sendero diametralmente opuesto al de Pablo, quien siendo también judío se regocija en haber conocido el misterio revelado y por el cual, ha sido constituido miembro del cuerpo de Cristo y partícipe de todos los dones concedidos por el Padre a aquellos que se acojan a su luz, rindiendo la propia existencia para servir a la construcción del Reino de Dios. El Verbo, por su Encarnación, ha recorrido el camino que le acerca al hombre, asumiendo la naturaleza humana; ahora el hombre, es convocado a caminar hacia el encuentro con Él, para presentar nuestro ser como un humilde presente a Aquel que nos ha enriquecido con toda clase de dones espirituales y materiales. En la pequeñez el Padre eterno manifiesta la grandeza de su poder, para convocar entorno a la fragilidad del niño a todos los pueblos de la tierra, para que en adelante no haya sino un solo rebaño bajo el cayado de un solo pastor. [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO SITUACIONAL[/icon] Quien lee desde la fe el misterio de la Encarnación como la más grande bendición divina, no puede menos que llenarse de alegría, otra realidad que sobresale en los textos bíblicos. Aquellos que han vivido como deportados en tierra extrajera, que habían salido de la ciudad de Dios (vivir en su amistad), retornan habiendo dejado atrás el yugo del pecado y apuran presurosos el paso para llegar al encuentro del Señor. También hoy. muchos hombres llegan ante nosotros preguntando por Aquel que es fuente de la plena felicidad: lo hacen los jóvenes en su rebeldía para ajustarse a los modos del mundo actual, que ellos encuentran distante de ser el ambiente deseable para el desarrollo integral de la persona: las injusticias, el dolor de los más débiles, los carentes de posibilidades de desarrollo, los intrincados caminos para acceder al estudio de calidad o encontrar un trabajo digno son algunos de los motivos de sus búsquedas. Hay búsqueda de felicidad en aquellas parejas de esposos que ven fracturarse la confianza y fidelidad juradas ante el altar del Señor, asumiendo como solución la ruptura del vínculo sagrado. Anhelan felicidad los niños que crecen sin la presencia de su padre o madre, aquellos que carecen del calor hogareño, aquellos que están atados a vivir en la ignorancia porque no tienen acceso al estudio, a la salud, a un trato digno. Buscan felicidad todas las mujeres que hoy son ignoradas, ultrajadas o sometidas a condiciones inhumanas de esclavitud. Encontramos entonces muchas búsquedas y grandes insatisfacciones, que el recién nacido quiere iluminar con su luz, quiere transformar con su presencia, quiere acompañar con su gracia. [icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link='']CONTEXTO CELEBRATIVO[/icon] La Eucaristía que ahora celebramos congrega a muchos hombres y mujeres convocados a ser cuerpo, familia de Dios. Ella nos llama a romper las múltiples barreras personales o comunitarias que hemos levantado y que son fuente de división y discordia. La epifanía es un canto a la unidad, a la luz, a la vida, a la alegría. Por ello todos los que vivimos este misterio, estamos llamados a salir desde nuestro contacto íntimo con el Niño de Belén al encuentro con los hermanos que recorren muchas sendas equívocas y que esclavizan. Esta epifanía debe despertarnos de nuestro letargo espiritual, ese que nos hace celebrantes inactivos, que nos impide salir a participar a los hermanos de los dones que se nos han otorgado. Como Pablo estamos convocados a confesar que nuestra vida es Cristo y Él es nuestra máxima riqueza, que sin su presencia se oscurece la existencia humana y crecen en número e intensidad las mezquindades, llevándonos a vivir aferrados a egoísmos, a levantar muros, a separar, a dañar. La Epifanía de nuestro Señor Jesucristo conduzca a todos los aquí congregados a salir por los caminos del mundo, como estos peregrinos que han llegado hasta el portal, para comunicar con alegría cuanto en gratuidad se nos ha otorgado. [icon class='fa fa-play' link=''] Recomendaciones prácticas[/icon] Convendría Insistir en que el personaje central en este día es Jesucristo, el Niñito del Pesebre, y el misterio de la salvación revelado a todos y para todos por Él; y no las figuras de los llamados «tres reyes magos». Encender una luz al frente del pesebre podría ser elemento pedagógico. En la entrada procesional podría incluirse que algunos miembros lleven dones de especial significado y se depositen ante el pesebre con una finalidad específica: un mercado como solidaridad con los pobres, el agua como signo de la naturaleza que debe cuidarse, unas biblias para entregar a los fieles para que su fe sea iluminada, entre otros. Convendría hacerse la fórmula de bendición solemne: «En el primer día del año», p. 471 del Misal Romano.