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Iglesia

Vie 19 Mar 2021

Boletín "Notas de Actualidad Litúrgica" No. 78

El Departamento de Liturgia del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC), presenta el Boletín Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA N° 78, Pascua en pandemia. La Iglesia, en efecto, celebra este gran evento salvífico en el Triduo de Pascua, a través de la Pasión y la Resurrección del Señor, centro de la fe, la celebración y la vida de los fieles creyentes. Para la celebración de la Pascua, tanto el año pasado, que tuvo lugar en pleno desarrollo de la pandemia, como este, en las actuales circunstancias, la Congregación para el Culto Divino, teniendo presente el drama de la pandemia que ha provocado muchos cambios, incluso en la forma habitual de celebrar la liturgia, ha dado sus respectivas directrices a la Iglesia universal, para que, luego, sean acogidas por las Conferencias Episcopales y aplicadas en las Iglesias particulares, por medio de sus respectivos obispos, quienes son los moderadores de la vida litúrgica diocesana. Como se puede concluir de las sendas orientaciones dadas por dicho Dicasterio, si la celebración de la Pascua 2020 tuvo lugar sin la participación de fieles y en un lugar adecuado, la próxima y ya cercana celebración pascual 2021, como se prevé, se podrá realizar en los templos, pero teniendo muy en cuenta la debida y correcta aplicación tanto de los aforos y de los protocolos de bioseguridad establecidos por la autoridad, como también la no realización de procesiones para evitar la aglomeración de personas. Igualmente, para una y otra solemnidad pascual, dicha Congregación ha orientado la importancia de dar a conocer los horarios de las celebraciones, la transmisión virtual y en directo de los actos celebrativos, la dedicación de un tiempo de oración de los fieles que no puedan participar presencialmente, apoyados en subsidios convenientemente preparados y ofrecidos para el encuentro familiar y personal, dando valor a la Liturgia de las Horas. Teniendo muy presente, en concreto, que para esta cercana celebración pascual unos no podrán participar presencialmente en los templos, ya sea por las restricciones establecidas en los protocolos, por razones de salud o de edad u otras, conviene mantener activa la preocupación y el esfuerzo pastoral para hacer que las familias en estas circunstancias, con las estrategias pastorales que se deben implementar en este momento excepcional, experimenten compañía y puedan unirse a las celebraciones de la comunidad, para que se sientan parte de la Iglesia que los pastorea. En este contexto, entonces, de la cercana celebración de la Pascua, en el tiempo excepcional que vivimos, se ofrecen los siguientes artículos que pueden ayudar a profundizar, catequizar y orientar mejor las diversas acciones litúrgicas que conforman la celebración de la Pascua en el hoy de la historia, porque, como dice afirma el Papa Francisco, “La Pascua de Jesús no es un acontecimiento del pasado: por el poder del Espíritu Santo es siempre actual y nos permite mirar y tocar con fe la carne de Cristo en tantas personas que sufren”. Descargar Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA No. 78 ANTERIORES BOLETINES: Lea también: Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA" No. 71 Lea también: Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA" No. 72 Lea también: Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA" No. 73 Lea también: Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA" No. 74 Lea también Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA No. 75 Lea también: Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA" No. 76 Lea también: Boletín "Notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA" No. 77

Vie 19 Mar 2021

Diócesis de Cúcuta se prepara para la gran Marcha Virtual del Perdón

Por primera vez la tradicional Marcha del Perdón, expresión de fe del pueblo de Dios que peregrina en Cúcuta, se llevará a cabo de manera virtual, debido a la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, atendiendo a las normas del gobierno nacional y cumpliendo con el aforo permitido en templos, se va a desarrollar desde la Catedral San José como sitio central y allí se enlaza en directo con otros cinco lugares, correspondientes a las Vicarías de la Diócesis de Cúcuta, que, desde una de sus parroquias van a representar su territorio. De esta manera, el este viernes 19 de marzo a partir de las 7:00 p.m., se va a dar inicio a la Marcha Virtual del Perdón y la Esperanza 2021, con el objetivo de proclamar que “Jesucristo es nuestra esperanza” (lema que vive la Diócesis de Cúcuta este año) y que, en el espíritu de la Cuaresma y la crisis suscitada por el COVID-19, la invitación es a caminar tras las huellas del Maestro en estos tiempos difíciles. La Marcha del Perdón busca sensibilizar a los fieles y personas de buena voluntad, en el perdón y la reconciliación, y así mismo, realizar un gesto de caridad con las personas y familias más vulnerables. Por esto, desde cada una de las parroquias se va a permitir la participación de los fieles (hasta que se cumpla el límite permitido), quienes llevarán una donación de mercado para contribuir con la Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes, que busca ayudar a familias vulnerables de una periferia de la ciudad y así mismo, vivir el Evangelio como parte de una Iglesia evangelizada y evangelizadora. En cada uno de los templos parroquiales se va a decorar con el lema del mes (trabajado a nivel diocesano), la Cruz, la imagen de la Virgen de los Dolores y se dispondrá de sonido y un proyector para ver la transmisión de la gran Marcha, donde habrá momentos específicos de oración, alabanza y adoración, donde todos los espectadores se unirán de manera dinámica. La Diócesis de Cúcuta a través de su Centro de Comunicaciones prepara un gran despliegue técnico, para permitir a esta Iglesia Particular expresar su identidad y rescatar los valores del perdón, la reconciliación, la esperanza y la paz, en esta sociedad. En www.diocesisdecucuta.com está disponible el documento con las indicaciones para el desarrollo de la Marcha, subsidios digitales para redes sociales y materiales para imprimir y preparar los escenarios. Fuente: Centro de comunicaciones Diócesis de Cúcuta

Jue 18 Mar 2021

Si el grano de trigo cae en tierra y muere, da mucho fruto

QUINTO DOMINGO DE CUARESMA Marzo 21 de 2021 Primera Lectura: Jr 31,31-34 Salmo: 51(50),3-4.12-13.14-15 (R. 12a) Segunda Lectura: Hb 5,7-9 Evangelio: Jn 12,20-33 I.Orientaciones para la Predicación Introducción Estas son algunas ideas que emergen de los textos en consideración: • La vida que brota a partir de la muerte. • Una nueva alianza que nos anuncia el profeta Jeremías • El dolor y el sufrimiento. 1. Lectio: ¿Qué dice la Sagrada Escritura? Hoy las lecturas se relacionan de manera muy especial. Mientras que para los hombres el orden habitual de los conceptos es vida-muerte, en Jesucristo es al revés: muerte-vida. De estas dos realidades y de su relación nos habla la liturgia. Es necesario que el grano de trigo muera para que reviva y dé fruto, es necesario perder la vida para vivir eternamente (Evangelio). Jesús, sometiéndose en obediencia filial a la muerte vive ahora como Sumo Sacerdote que intercede por nosotros ante Dios (segunda lectura). En la muerte de Jesús que torna a la vida y da la vida al hombre se realiza la nueva alianza, ya no sellada con sangre de animales sino escrita en el corazón, y, por lo tanto, espiritual y eterna (primera lectura). Estamos a escasas dos semanas de celebrar el corazón de la vida cristiana: La pascua. Por eso las lecturas de hoy nos ayudan a recordar la muerte y resurrección de Cristo Jesús. Bien interesante que la oración colecta de hoy pide a Dios “que vivamos siempre de aquel mismo amor que movió a tu Hijo a entregarse a la muerte por la salvación del mundo”. Nosotros como discípulos del Señor, queremos unirnos a él en ese camino hacia la hora de su glorificación, que incluye la cruz y la nueva vida. ¿Cuál es la alianza nueva de la que nos habla el profeta Jeremías? Es una alianza profunda e interior. Aquí el profeta resume toda la experiencia de su vida íntima y toda la enseñanza de la historia: “Meteré mi ley en su pecho, la escribiré en sus corazones; yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo”. Tres expresiones del salmo 51(50) ayudan a entender la nueva alianza de la cual nos habla el profeta: “Oh Dios, crea en mí un corazón puro”, renuévame por dentro”, “devuélveme la alegría de tu salvación”. El autor de la carta a los Hebreos nos presenta un Mediador, un Sacerdote que sabe lo que es dolor y el sufrimiento: "a gritos y con lágrimas presentó oraciones y súplicas al que podía salvarlo de la muerte". Y por su obediencia, "se convirtió́ en autor de salvación eterna". En el evangelio de San Juan Jesús nos va dando las claves para entender su muerte y resurrección y lo hace con una metáfora de la vida del campo: “si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo, pero si muere, da mucho fruto”. 2. Meditatio: ¿Qué me dice la Sagrada Escritura y que me sugiere para decirle a la comunidad? Estamos ya próximos a vivir la Semana Santa y hoy las lecturas nos presentan a Jesús que camina con admirable fortaleza a vivir su “hora” decisiva, en la que por solidaridad con los hombres se dispone a cumplir el proyecto salvador de Dios. Esta es la hora de Jesús y los evangelistas nos hablan de sus momentos de tristeza y miedo en el Huerto. También el evangelio de hoy se puede decir que refleja otro momento, anterior al de Getsemaní́, en que Jesús confiesa con emoción: "mi alma está agitada", y nos dice que lo primero que se le ocurre pedir es: "Padre, líbrame de esta hora". Aunque en seguida triunfa su obediencia: "pero si por eso he venido, para esta hora: Padre, glorifica tu nombre". Ya sabemos qué significa para Jesús esa "hora" y esa "glorificación". Esta es la hora de Jesús porque Jesús no caminó hacia la muerte como un héroe o un superhombre, con la mirada iluminada e impasible, sino que "a gritos y con lágrimas presentó oraciones y súplicas al que podía salvarlo de la muerte". Y añade la sorprendente observación de que "en su angustia fue escuchado", y que "a pesar de ser Hijo, aprendió́, sufriendo, a obedecer". Por eso fue constituido salvador de la humanidad. Fue escuchado, no porque Dios le liberó de la muerte "antes" de sufrirla, sino "después", con la resurrección. Esta es la hora de Jesús porque asumió con seriedad su papel de redentor. Tenemos un Sumo Sacerdote que ha experimentado en su propia carne toda la debilidad y el dolor del camino pascual. Eso nos da la convicción de que el dolor o el sufrimiento o la muerte no son la última palabra. El amor total, hasta la muerte, de Cristo, fue enormemente fecundo, como la muerte del grano de trigo en tierra. 3. Oratio y Contemplatio: ¿Qué suplicamos al Señor para vivir con mayor compromiso la misión? ¿Cómo reflejo en la vida este encuentro con Cristo? En cada Eucaristía, cuando celebramos el memorial de la muerte salvadora de Cristo, participamos de la fuerza salvadora de la Nueva Alianza que él selló entre Dios y la humanidad en su cruz: "esta es la Sangre de la Alianza nueva y eterna, derramada por ustedes y por todos". En estos días vamos a seguir muy de cerca al Señor en su pasión. No nos podemos extrañar que también nuestro camino incluya a veces momentos de dolor y de miedo. De ahí la necesidad de elevar súplicas con gritos y con lágrimas a Dios, para que nos ayude en nuestros momentos de crisis. Lo que sí es seguro que tenemos experiencia de que ser buenos cristianos, y seguir las huellas de Cristo con el estilo de vida que nos enseñó, no es nada fácil. A todos nos apetece más la salud, el triunfo, el éxito y los honores que la renuncia o el sacrificio o el fracaso. Cristo nos ha enseñado que el mundo se salva no con alardes de poder, sino por medio de la cruz, que en este mundo nuestro no tiene ciertamente buena prensa ni popularidad. El mundo de hoy nos ofrece otros caminos, que son más apetecibles, pero que no conducen a la salvación. Nuestra vocación cristiana nos ofrece muchos momentos de lucha contra el mal, el mal dentro de nosotros y el mal del mundo. El mejor fruto que podemos anhelar de próxima Pascua es que Dios nos conceda eso que pedíamos en el salmo: "Oh Dios, crea en mí un corazón nuevo", para que nos comprometamos con un estilo de vida coherente, alejados de la rutina, el formalismo y podamos seguir con autenticidad las palabras del Señor. II. Moniciones y Oración Universal o de los Fieles Monición introductoria de la Misa Hoy celebramos el Quinto Domingo de Cuaresma. En los días previos se nos ha invitado a la conversión, camino a un encuentro con Cristo. El tiempo apremia; ya estamos en la antesala de la Semana Santa y el Señor hoy nos exhorta a que meditemos detenidamente en su promesa de ofrecerte una vida nueva más allá de esta vida temporal. Bienvenidos a la celebración eucarística. Monición a la Liturgia de la Palabra Las lecturas de hoy nos recuerdan la inminencia de esa celebración central: la muerte y la resurrección de Cristo Jesús. Abramos nuestro corazón y entendimiento para que esta Palabra produzca frutos abundantes en nuestra comunidad. Oración Universal o de los Fieles Presidente: Oremos a Dios Padre, por Jesucristo su Hijo, autor de salvación eterna. Unámonos con fe diciendo: R. Señor de la vida, escúchanos 1. Por la Iglesia, que ha recibido la misión de anunciar al que es la resurrección y la vida. Roguemos al Señor. 2. Por los que viven su vida disminuida, en condiciones deplorables: los que carecen de lo necesario, los enfermos, los drogadictos; los presos y condenados a trabajos forzados; los que son víctimas del odio, del miedo y la represión; los que están desesperados. Roguemos al Señor. 3. Por los responsables de tantos crímenes; por los que, llevados del odio y la venganza, dan muerte en su corazón al prójimo. Roguemos al Señor. 4. Por los médicos y todos los hombres de ciencia que trabajan por prolongar la vida. Roguemos al Señor. 5. Por los que entregan su vida por amor a los demás. Roguemos al Señor. Oración conclusiva Dios, Padre nuestro, que salvaste a tu Hijo de la muerte, escucha la oración que te presentamos, como él, en los días de nuestra vida mortal. Por Jesucristo nuestro Señor. R. Amén

Jue 18 Mar 2021

Arzobispo de Bogotá reza el santo rosario por las familias

Este viernes 19 de marzo, a las 8:00 p.m., en el día de la Solemnidad de San José e inicio del “Año Amoris Leatitia” (la alegría del amor), dedicado a la familia, monseñor Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá, rezará el santo rosario desde la página en Facebook de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), la cual se encuentra como /episcopadocol. Monseñor Luis José compartirá los misterios dolorosos que corresponden al día viernes y, además, hará breves reflexiones sobre la familia a partir de la exhortación post sinodal “Amoris Leatitia”, teniendo en cuenta que este día se cumplen 5 años de la publicación de este hermoso documento dedicado a la familia por el Papa Francisco. Este espacio virtual que orienta el padre Jaime Marenco, director de comunicaciones de la CEC, busca promover la devoción mariana a través del rezo del rosario, motivando la participación de las familias y contando con invitados especiales en fechas especiales. Fue así como el pasado 9 de febrero, Día Nacional del Periodista, se contó con la presencia de varios comunicadores sociales; más adelante, el encuentro fue con algunos cantantes católicos del país, y, el Día Internacional de la Mujer, las invitadas fueron ocho mujeres destacadas en diferentes ámbitos de la Iglesia y la sociedad.

Jue 18 Mar 2021

Inauguración año de la Familia 'Amoris laetitia'

Por: Mons. Edgar de Jesús García Gil - En la Solemnidad de San José, desde el Templete Eucarístico de Villavicencio, con la celebración de la Eucaristía presidida por su Excelencia Oscar Urbina Ortega, presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, se abrirá el Año de la Familia Amoris Laetitia, un año especial para crecer en el amor familiar. Este Año de la Familia fue convocado por el Santo Padre el 27 de diciembre de 2020 con ocasión del quinto aniversario de la publicación de la exhortación apostólica Amoris Laetitia, “para madurar los frutos de la Exhortación Apostólica Postsinodal y hacer a la Iglesia más cercana a las familias de todo el mundo, puestas a prueba en este último año por la pandemia”. Desde la Comisión Episcopal y el Departamento de Matrimonio y Familia de la CEC, hacemos eco a las palabras de Papa Francisco el domingo 14 de marzo en el ángelus donde nos “Invita a dar un impulso pastoral renovado y creativo para poner a la familia en el centro de la atención de la Iglesia y de la sociedad. Además, en este mismo acto, el papa oró “para que cada familia pueda sentir en su casa la presencia viva de la Sagrada Familia de Nazaret y pidió que llene a las pequeñas comunidades domesticas de amor sincero y generoso, fuente de alegría, incluso en las pruebas y en la dificultad”. La convocatoria de este año tiene cinco objetivos primordiales: 1. Difundir el contenido de la exhortación apostólica “Amoris Laetitia”, para “hacer experimentar que el Evangelio de la familia es alegría que llena el corazón y la vida entera”. 2. Anunciar que el sacramento del matrimonio es un don y tiene en sí mismo una fuerza transformadora del amor humano. 3. Hacer a las familias protagonistas de la pastoral familiar. 4. Concienciar a los jóvenes sobre la importancia de la formación en la verdad del amor y el don de sí mismos, es decir, la importancia que supone la alianza matrimonial donde cada esposo compromete su propia libertad a favor del bien o del valor personal del otro. 5. Ampliar la mirada y la acción de la pastoral familiar para que se convierta en transversal, para incluir a los esposos, a los niños, a los jóvenes, a las personas mayores y las situaciones de fragilidad familiar. Junto con todos los Agentes y Delegados de pastoral familiar, nos ponemos en camino con el deseo de que este Año, redescubramos -como nos invita el Papa Francisco- “el valor educativo del núcleo familiar, que debe fundamentarse en el amor que siempre regenera las relaciones abriendo horizontes de esperanza”. Ayudemos a que “el perdón prevalezca sobre las discordias” y a que “la dureza cotidiana del vivir sea suavizada por la ternura mutua y por la serena adhesión a la voluntad de Dios”. (P. Francisco). Anunciemos con alegría que la familia cristiana es una fuente espiritual que da fuerzas para abrirse al exterior, a los demás, al servicio de los hermanos, a la colaboración para la construcción de un mundo siempre nuevo y mejor. Tengamos presente que la pastoral familiar, además de un conjunto de acciones específicas llevadas a cabo por agentes especializados y que dan respuesta a problemas relacionados con el matrimonio, la familia o la vida, es constitutiva de la Iglesia y la conforma en cuanto tal. Por lo tanto, es necesario un plan integrador de la pastoral familiar que implique su presencia transversal en las distintas acciones evangelizadoras. Seamos una Iglesia en salida, “comunidad de discípulos misioneros que primerean, que se involucran, que acompañan, que fructifican y festejan" (EG 24) evangelizando con “estímulos positivos" y con "el ejemplo de vida”. Vivamos como familia cristiana el deseo inagotable de difundir la buena noticia, el Evangelio de la Familia. El Papa nos invita a contemplar a San José para afrontar la pastoral familiar, tan necesaria en nuestros días, y poner bajo su protección el don del matrimonio y el gozo del amor como cimiento de la familia cristiana. Aprovechemos en nuestras parroquias, Movimientos apostólicos, centros educativos y demás realidades eclesiales para profundizar acerca de la riqueza que ofrece “Amoris Laetitia”. Esta Exhortación Apostólica nos muestra la belleza del matrimonio cristiano, como una propuesta auténticamente revolucionaria y renovadora para una sociedad como la nuestra, necesitada de esperanza y de certezas. Dada la importancia de este acontecimiento de gracia, queremos invitarlos a vivir con todo el corazón el Año de la Familia, que concluirá con el X Encuentro Mundial de las Familias que se celebrará en Roma, el 26 de junio de 2022. Confiamos a la Sagrada Familia los frutos de este Año en nuestra Iglesia colombiana. + Edgar de Jesús García Gil Obispo de Palmira Presidente de la Comisión Episcopal de Familia

Mié 17 Mar 2021

Angustioso llamado de obispos por situación de habitantes de Murindó

Durante una rueda de prensa, convocada este 17 de marzo en la sede de la Conferencia Episcopal de Colombia, en la que estuvieron presentes monseñor Luis José Rueda, arzobispo de Bogotá y primado de Colombia; monseñor Juan Carlos Barreto, obispo de Quibdó, y monseñor Hugo Alberto Torres, obispo de Apartadó, junto con Germán Valencia, representante de la Organización Nacional Indígena (ONIC) y Amelicia Santacruz, de la Organización Indígena de Antioquia (OIA), se denunció la grave situación humanitaria que viven las comunidades indígenas asentadas en el municipio de Murindó, Antioquia. Según lo expresaron, lo expuesto refleja las conclusiones de la misión humanitaria que realizaron al municipio de Murindó, del 7 al 11 de marzo, donde asistieron las delegaciones de las diócesis de Quibdó y Apartadó, el Consejo Comunitario Mayor de la Organización Campesina Integral del Atrato (Cocomacia), el Cabildo Mayor de Murindó y la Coordinación Regional del Pacífico. Informaron que durante su visita a los cabildos de La Isla y Turriquitadó Llano, constataron que tanto el grupo guerrillero del Ejército de Liberación Nacional (ELN) como los paramilitares autodenominados “Autodefensas Gaitanistas de Colombia” (AGC), se disputan territorialmente la región, haciendo esto que cometan graves violaciones al derecho internacional humanitario y afectando también los derechos humanos de las comunidades. Frente a esta realidad hacen un llamado al Estado para que dé respuesta a estas afectaciones en contra de la población indígena que habita en estos territorios. "Se requiere la intervención estatal garantizando derechos sociales, la ayuda humanitaria urgente, el desminado territorial y la protección colectiva que les permita gozar de tranquilidad en sus entornos culturales", anotan en el comunicado que se leyó en la rueda de prensa convocada para la mañana de hoy. "A todos los organismos del Estado, incluyendo el Gobierno Nacional, la Gobernación de Antioquia, la Alcaldía de Murindó y los órganos de control y judicialización, se les exige el cumplimiento de sus compromisos constitucionales y la intervención adecuada y oportuna en esta coyuntura y en las situaciones estructurales que se viven en la región". Igualmente, dirigieron un mensaje a los grupos armados "con el objetivo de que reconozcan que su accionar es absolutamente nocivo para la población civil. Mientras avanzamos en procesos sólidos de paz, deben observar el derecho internacional humanitario y no deben afectar el discreto goce de derechos humanos que tienen las comunidades". Finalmente, se comprometieron a continuar acompañando a las comunidades afectadas por la violencia, animándolas a no abandonar sus territorios y "a perseverar en la exigencia de los derechos que les otorga la constitución nacional". [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Mié 17 Mar 2021

Con la Eucaristía, Colombia dará inicio al año dedicado a la familia

Este viernes 19 de marzo, a las 10:00 a.m., con una eucaristía virtual presidida por monseñor Óscar Urbina Ortega, arzobispo de Villavicencio y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), se dará inicio a las celebraciones del “Año de la Familia” proclamado por el Papa Francisco. La Iglesia católica en Colombia hace extensiva esta invitación para que desde los hogares se unan a esta celebración eucarística en la que se agradecerá a Dios por las familias y se vivirá, además, un momento de bendición y gracia. Este será solo el inicio de las actividades programadas para este año, que busca promover en las familias su natural vocación misionera creando momentos de formación para la evangelización. Año de la Familia El 19 de marzo la Iglesia celebra cinco años de la publicación de la exhortación apostólica 'Amoris laetitia' sobre la belleza y la alegría del amor familiar. Este mismo día, en la solemnidad de San José, el Papa Francisco inaugurará el “Año 'Amoris laetitia'”, un periodo especial que se dedicará a la familia y que terminará el 26 de junio de 2022, con ocasión del X Encuentro Mundial de las Familias que se celebrará en Roma. Para vivir este año de la familia, el Dicasterio para los Laicos, Familia y Vida, en el Vaticano, ha elaborado un folleto informativo que brinda algunas sugerencias a seguir. Entre ellas: La realización de foros, conversatorios, elaboración de videos testimoniales, momentos litúrgicos, propuestas pastorales, catequesis, celebración de una jornada para los abuelos y las personas mayores, doce itinerarios con las familias para poner en práctica 'Amoris laetitia', entre otros. Folleto informativodel dicasterio para los Laicos, Familia y Vida[icon class='fa fa-download fa-2x']Descargar folleto[/icon]

Mié 17 Mar 2021

Testimonio de una lideresa defensora de los derechos humanos: Magaly Belalcázar

Magaly Belalcázar hace parte de las Plataformsa de Mujeres del Caquetá y de Incidencia Política de Mujeres Rurales Colombianas, es consejera de paz y una lideresa activa en Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET). Es una mujer campesina, defensora de derechos humanos territoriales y ambientales, constructora de paz y educadora popular. La lideresa participó el pasado miércoles 10 de marzo en el conversatorio virtual, organizado por el Secretariado Nacional de Pastoral Social, sobre el rol de las mujeres en la construcción de paz, un espacio donde compartió sus principales motivaciones como mujer defensora de DDHH, la importancia del enfoque territorial para la paz y su perspectiva frente a las organizaciones de mujeres. En primera instancia, manifestó que su principal motivación como mujer constructora de paz es que las mujeres, especialmente, campesinas, indígenas y afro, tengan espacios de participación reales y efectivos. Planteó que las mujeres rurales son constructoras de paz desde la cotidianidad, cuando en el día a día se unen entre más mujeres y logran tener vocería política. “Hemos estado en varios escenarios y la motivación es tener también nuestra propia voz, reconocernos a nosotras mismas, reconocer a otras mujeres, caminar, poner una huella importante en la construcción de la paz, desde nuestras miradas, desde nuestra diversidad como mujeres”, afirmó Magaly Belalcázar. A su vez, durante el conversatorio compartió que dos de los principales retos para la construcción de la paz es la dimensión e integración de la mujer y del enfoque territorial. Consideró que la dimensión de la paz para las mujeres consiste en la garantía de los DDHH y en la no intermediación de los recursos económicos para la paz. “Para construir la paz tiene que existir un desarrollo, un ecosistema diverso y real que permita conectarnos a las mujeres en los territorios”. La paz no puede seguir siendo un discurso, la paz tiene que tener una base sobre un territorio, tiene que ser real”, señaló la lideresa social. Adicionalmente, compartió su preocupación por los casos de violencia sexual, feminicidios y violencia de género en el departamento del Caquetá, manifestó que no hay presencia de una gobernanza local ni regional para la paz y no hay políticas públicas implementadas para la garantía de los derechos de las mujeres. “Resulta que nosotras somos quienes históricamente reconstruimos el tejido social, nosotras somos las que hemos abanderado la construcción de paz, somos quienes votamos ‘sí’ en el plebiscito, defendemos soberanía alimentaria y la naturaleza. Lo que buscamos no es pedir nuestros derechos sino exigirlos”, reflexionó la defensora de derechos humanos. También, durante el espacio de diálogo compartió que a las mujeres las han reducido a líneas de productividad que no contribuyen a un tejido real para la construcción de la paz, como, por ejemplo, la modistería y la peluquería. Oficios que son respetables, pero no implican una participación política sustancial al interior de los territorios. “Por eso es que cuando se habla de las mujeres en la construcción de la paz piensan que el único espacio que tenemos es en la parte trasera de la casa. Por eso es que no tenemos las tierras, ahí no se hace economía, no se hace soberanía, ahí no se hace paz”, opinó Magaly Belalcázar. Al mismo tiempo, manifestó que lamentablemente continuamos con un modelo institucional que no garantiza los derechos a las mujeres y es la misma institucionalidad quien las persigue y señala. Incluso manifestó que, para el caso del Caquetá, el mismo asesor de la paz es quien estigmatiza a las organizaciones de mujeres en el departamento. La lideresa consideró que es importante organizarse como mujeres, reconocerse y construir las agendas propias en términos de paz y reconocimiento de derechos humanos. Planteó que “las organizaciones de mujeres nos permiten capacitarnos, cualificarnos, entenderos y entrar en procesos de formación política. Eso nos permite ver la realidad en los territorios, nos permite también incidir en la transformación real". A su vez, compartió que las mujeres organizadas logran transcender en colectivo y logran llegar con mayor impacto a la institucionalidad para exigir sus derechos. “Si se pueden silenciar las armas de este país se pueden fundir los odios. Pero no solamente nosotras tenemos que hacer el proceso de perdón, no es un perdón impune, es un perdón con verdad, con reparación, que reconozca a las víctimas en el territorio. Es un perdón que hable de la verdad”, concluyó la lideresa. Desde esta perspectiva la lideresa hace énfasis en la importancia de la perspectiva territorial y de género para la paz, valorando el trabajo de las organizaciones de mujeres y reconociéndolas como agentes de cambio social y reconstructoras de tejido social. Fuente: Oficina de comunicaciones del SNPS