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migrantes

Mar 11 Sep 2018

Iglesia anima a acoger, proteger, promover e integrar a migrantes venezolanos

La situación de los migrantes venezolanos en territorio colombiano nuevamente ha sido el foco de atención. Esta vez en el marco del Foro: Reflexiones sobre las acciones de acogida a migrantes pensadas hacia un camino de reintegración, que se realizó este lunes 10 de septiembre en la sede del episcopado colombiano. Durante este encuentro – organizado por la Pastoral Social y otras instituciones - se hizo un balance general sobre las acciones que buscan acoger, proteger, promover e integrara los migrantes y refugiados, especialmente a la población venezolana en Colombia. En este marco, Monseñor Héctor Fabio Henao, director de la Pastoral Social, destacó el trabajo que vienen desarrollando diversas organizaciones y que brindan oportunidades a esta población. Así mismo, afirmó que la labor social de la Iglesia se ha mostrado “en muchas jurisdicciones eclesiales que han salido al camino para ayudar, poniéndose en la senda de estos caminantes”. Nuevos aprendizajes Ana Milena Ángel, coordinadora de emprendimiento del SENA, informó que esta institución ha generado un lineamiento específico para los venezolanos en todo el territorio colombiano. “El SENA brinda la oportunidad para que los venezolanos accedan a los procesos de formación complementaria orientada a la empleabilidad y también está fortaleciendo las capacidades para el proceso de formación titulada, a pensar de las restricciones de la Ley para el acceso”, manifestó la funcionaria, quien agregó que gracias a esta etapa de formación se ha iniciado un proceso de reconocimiento de competencias para hacer un oficio y que con este certificado un empresario colombiano lo puede emplear. Por parte, Javier Olaya del Programa de Migración de la Cruz Roja Colombiana presentó dos pilotajes en atención población migrante en Cúcuta. El primero busca la integración comunitaria de migrantes a través de proyectos productivos y el segundo pretende promover un emprendimiento básico en algún oficio de producción para su subsistencia y que les permita ayudar a su familia en Venezuela. Puentes de solidaridad en Colombia Este encuentro es una iniciativa de diálogo alrededor del acontecer migratorio en el país que se desarrolla en el marco del Proyecto Puentes de Solidaridad- Plan Pastoral Integrado para la Asistencia de Migrantes Venezolanos en América del Sur en respuesta al llamado del papa Francisco sobre la necesidad de avanzar hacia actitudes, prácticas y políticas que acojan, protejan, promuevan e integren a las personas forzadas a migrar en los diferentes países. De esta manera, ocho Conferencias Episcopales en América del Sur han unido sus fuerzas para encontrar soluciones a la migración masiva de venezolanos que huyen de su país para salvar sus vidas, buscar refugio y tener una vida digna en el extranjero. En Colombia el proyecto apoya a migrantes vulnerables en asistencia y acompañamiento psicosocial y espiritual, también contempla acciones de incidencia a partir de la campaña “Compartiendo el Viaje” y el fortalecimiento de redes eclesiales para la respuesta solidaria con el apoyo de la red Clamor Colombia y la red Tamar. También se desarrollan acciones de encuentro para la reflexión y acción de la crisis humanitaria de los migrantes vulnerables procedentes de Venezuela. La Red CLAMOR Colombia está conformada por la Arquidiócesis de Bogotá, las Religiosas Adoratrices, el Servicio Jesuita a Refugiados Colombia, el Servicio Jesuita a Refugiados Latinoamérica y el Caribe, el CELAM, las Hermanas Escalabrinianas, Juanistas y Vicentinas, la Fundación de Atención al Migrante, la Corporación Scalabrini, la Pastoral de los Trabajadores y el Secretariado Nacional de Pastoral Social.

Lun 10 Sep 2018

Diócesis de Cúcuta inaugura Casa de Paso ‘Divina Providencia’

La situación del flujo de migrantes en la frontera se acrecienta cada día más debido a la aguda crisis que se vive en Venezuela. Miles de personas se ven obligadas ante la escasez de alimento, trabajo, desfavorables condiciones de salud y necesidades básicas, a salir de su país a otros lugares en búsqueda de mejores condiciones de vida. La Diócesis de Cúcuta, el pasado 5 de septiembre, con la presencia de Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, inauguró una nueva Casa de Paso en el municipio de Los Patios, para atender a los migrantes que cada día se desplazan desde Cúcuta a otras ciudades y países por las vías nacionales. En este lugar de paso, explicó Monseñor Víctor Manuel: “brindaremos agua y algo de pan, bocadillo, para contribuir en el camino de los migrantes”. Se trata de un kit de alimentación básica para el camino. Para atender la Casa de Paso ‘Divina Providencia’ del municipio de Los Patios, se organizarán las diferentes parroquias cada día de 4:00 p.m. a 7:00 p.m., que es cuando se presenta el mayor flujo de migrantes y se les ofrece una ayuda material y espiritual en su caminar. Esta iniciativa se suma a las acciones de caridad que la Diócesis de Cúcuta realiza en la zona de frontera en favor de los más pobres y necesitados. Fuente: Oficina de comunicaciones Diócesis de Cúcuta

Vie 31 Ago 2018

Nuestros hermanos venezolanos

Por: Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía - Cali es paso obligado a los países suramericanos. Por eso es destino de gran parte del flujo de migración forzosa de venezolanos. Muchos han llegado ya. No hay cifras precisas, pero son cientos de miles, porque siguen y seguirán llegando por varios años. No se trata de algo pasajero. La situación que lo origina tenderá a agravarlo, sea cual fuere el desenlace. Porque más que un absurdo sistema ideológico y político, se trata de una situación estructural de vieja data: han sido una economía y sociedad subsidiadas, dependientes del petróleo. Tardarán en salir de allí y nivelarse con la economía internacional. Entendiendo lo anterior, Cali y Colombia entera tienen el deber de dar respuestas adecuadas y de fondo, no de evasivas, ni de meros trámites documentales, “para una migración ordenada, segura y legal”. Mucho menos de justificaciones egoístas o declaraciones de impotencia, para cerrarles puertas y dejarlos a la deriva en calles y carreteras. Y la respuesta nos obliga a todos. Son rostros, situaciones, manos y grupos de hermanos nuestros, que claman ante nosotros y ponen a prueba nuestros valores más profundos: los de acoger, respetar, servir, compartir, proteger, acompañar, restaurar, animar, integrar, dignificar. Somos los ciudadanos, las familias, las organizaciones comunales, los propietarios de tierras, los empresarios y comunicadores, los voluntariados, las Iglesias, quienes los sentimos a nuestro lado, quienes no podemos chutar la responsabilidad a otros, ni dejarnos infestar por la indiferencia o actitudes oportunistas y agresivas. La magnitud del reto nos compromete a organizarnos cada vez mejor, con el apoyo local e internacional de organizaciones humanitarias, con la presión sobre nuestros elusivos gobernantes. Para nosotros, Iglesia Católica, es la hora de Jesús, la hora de la misericordia: “lo que hacen o dejen de hacer a uno de estos, lo hacen o dejan de hacer conmigo”. Es la misericordia de las obras, o al revés, las “obras de misericordia” inmediatas, pero unidas a esa lucha de los pueblos y naciones de la tierra para erradicar el hambre, la sed, la desnudez, el despojo, la exclusión, la enfermedad, el crimen y el delito, las prisiones, la tristeza y la soledad de quienes sufren, de las víctimas sin discriminación alguna: (Mateo 25,31-40). Es deber del creyente en Cristo Jesús y de su Iglesia, encontrarlo a Él en el pobre y la víctima, no solo en la Biblia y la liturgia. Es deber del colectivo social, animado por los creyentes, erradicar de las culturas, pacífica y democráticamente, las causas de la inhumanidad y de la exclusión, de las injusticias y monopolios. La fe no son meros actos caritativos, ni mero culto e Iglesias, sino también esfuerzos válidos por transformar el mundo en “Civilización del Amor”, en Reino de Dios, contenido en Jesús como Evangelio viviente. Este mes de septiembre, mes bíblico de Las Sagradas Escrituras, fundamentadas en la Persona de Cristo Jesús, mes de Los Migrantes, mes de la Paz y de los derechos humanos (San Pedro Claver, semana por la paz), entre otros motivos, mueva a las Iglesias cristianas y Católicas que están en Cali, a todas nuestras parroquias, instituciones y obras, a APERSONARNOS DE NUESTROS HERMANOS VENEZOLANOS. “Nadie se acueste en Cali sin oír la voz del prójimo venezolano”, podríamos decir, recordando al inolvidable padre Alfonso Hurtado, “el de la explosión de Cali el 7 de agosto de 1956”, como quedó en la mente y corazón de los caleños. A nuestra Pastoral de Migrantes, a la Pastoral Social y Banco de Alimentos, a nuestros voluntariados, les agradezco su sacrificio por esta población migrante y refugiada. A la naciente Delegación de Pastoral Bíblica, conformada con la Facultad de Teología de Unicatolica, los aliento a impulsar, desde la espiritualidad discipular, este compromiso de fe y de acción eclesial. + Darío de Jesús Monsalve Mejía Arzobispo de Cali

Vie 22 Jun 2018

Red Clamor: Migrar no es un delito

Las organizaciones miembros de la Red Latinoamericana y Caribeña de Migración, Refugio y Trata de Personas, CLAMOR, han manifestado su preocupación “ante las graves violaciones a la dignidad y los derechos humanos que ocurrieron en los últimos días como consecuencia de la decisión de la administración del Presidente de los Estados Unidos Donald Trump, de separar a los niños, niñas y adolescentes (NNA) migrantes de sus padres y procesar penalmente a quienes ingresen a ese país de manera irregular”. “Denunciamos la fragante violación del derecho de toda familia a permanecer unida y los graves atentados contra la estabilidad sico afectiva de los niños, niñas y adolescentes, en contraposición a lo establecido en los pactos internacionales, especialmente en la Convención sobre los Derechos del Niño y la Convención Internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores Migratorios y sus familias”. A través de un comunicado, la Red “CLAMOR”, recuerda “que los derechos humanos deben ser reconocidos y asegurados por todos los gobiernos, respetando el principio del interés superior de los niños, niñas y adolescentes, que debe regir toda política gubernamental”. Y continúan “Migrar no es un delito, por lo cual rechazamos las detenciones arbitrarias y la reclusión en cárceles disfrazadas de centros migratorios, mucho más cuando se trata de niños, niñas y adolescentes”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon] El llamamiento de la Red “CLAMOR”, Así consideran "un paso importante la firma por parte del Presidente Donald Trump de una orden ejecutiva para evitar la separación de las familias en la frontera” y realizan un llamado al Congreso de los Estados Unidos “para aprobar una ley que garantice que las familias de los migrantes, sin importar su condición legal, puedan permanecer unidas”. “Es impostergable buscar alternativas a las detenciones y deportaciones masivas, desde una perspectiva humanitaria. Oramos para que el Señor cambie corazones de piedra por corazones que sepan amar a los migrantes, especialmente a los niños, niñas y adolescentes”, concluyen. Por la Red CLAMOR firman el documento Mons. Gustavo Rodriguez Vega, Arzobispo de Yucatán y Presidente del DEJUSOL CELAM; Mons José Luis Azuaje, Presidente del SELACC y la Hna Mercedes Casas Presidenta de la CLAR. El documento está suscrito además por el Consejo Episcopal Latinoamericano CELAM, la Conferencia Latinoamericana de Religiosos y Religiosas CLAR, el Secretariado Latinoamericano y Caribeño de CARITAS, los Departamentos y secciones de Movilidad Humana de las Conferencias Episcopales de América Latina y El Caribe, las Caritas nacionales de América Latina y El Caribe, el Instituto Chileno de Migración INCAMI y el Instituto de Migración y Derechos Humanos de Brasil. También por el SIMN, el Servicio Jesuita para Refugiados, el Servicio Jesuita a Migrantes, la Red Un Grito por la Vida, la Red Kawsay, la Red Tamar, las Hermanas Scalabrinianas, la Misión Scalabriniana de Ecuador, los Padres Scalabrinianos, los Padres Salesianos, la Orden de La Merced, las Hermanas del Buen Pastor, las Hermanas Adoratrices y las de San Juan Evangelista; las Casas del Migrante de México, el IMDOSOC, y el CAFEMIN. Fuente: Vatican News

Mié 13 Jun 2018

Iglesia comparte alimentos y kits de aseo con refugiados y migrantes

En el marco de la celebración del Día del Refugiado, que se conmemora el 20 de junio en todo el mundo, la Iglesia Católica en Colombia, del 17 al 24 de junio, compartirá en Bogotá con 300 migrantes, en su mayoría venezolanos, tres mesas (almuerzos) y entregará kits de aseo. Esta acción es animada por la red Clamor Colombia y hace parte de la Campaña mundial de Migración y Refugio "Compartiendo el viaje" (share journey), liderada por el Papa Francisco. El 19 de junio en el Centro de Escucha "EscuchArte" de la Comunidad de las Hermanas Adoratrices, ubicado en el barrio Patio Bonito, se compartirán alimentos con un grupo de 15 mujeres migrantes. Este grupo hace parte de territorios de alto impacto, que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, migración, economías precarias; expuestas a violencias de género, discriminación, explotación sexual, entre otras. El 20 de junio en el Centro de Atención al Migrante de la Arquidiócesis de Bogotá, las hermanas Escalabrinianas realizarán una Eucaristía y posteriormente un almuerzo con 80 migrantes venezolanos y desplazados colombianos. El 21 de junio, la Arquidiócesis de Bogotá ofrecerá un almuerzo fraterno y actividades culturales a 150 hermanos migrantes venezolanos en el comedor de la parroquia La Capuchina del Barrio San Victorino. Por su parte, el Consejo Episcopado Latinoamericano (CELAM), Cáritas Colombiana, el Servicio Jesuita a Refugiados Latinoamérica y el Caribe, la Conferencia Latinoamérica de Religiosos y Religiosas (CLAR), y los padres Benedictinos entregarán kits de aseo a los participantes de estas jornadas de solidaridad. Que hace la Red CLAMOR La Red Clamor fue creada en 2017, articula el trabajo pastoral que realizan diversas organizaciones de la Iglesia Católica en América Latina y el Caribe para, desde la misión evangelizadora de una iglesia en salida, se pueda acoger, proteger, promover e integrar a los migrantes, refugiados, desplazados y víctimas de tráfico y trata de personas. La Red CLAMOR Colombia está conformada por la Arquidiócesis de Bogotá, las Religiosas Adoratrices, el Servicio Jesuita a Refugiados Colombia, el Servicio Jesuita a Refugiados Latinoamérica y el Caribe, el Consejo Episcopal Latinoamericano - CELAM, las hermanas Escalabrinianas, Juanistas y Vicentinas, la Fundación de Atención al Migrante, la Corporación Scalabriniana, la Pastoral de los Trabajadores y el Secretariado Nacional de Pastoral Social. Puentes de solidaridad en Colombia Esta serie de acciones responden al Proyecto Puentes de Solidaridad- Plan Pastoral Integrado para la Asistencia de Migrantes Venezolanos en América del Sur en respuesta al llamado del Papa Francisco para recibir, proteger, promover e integrar a migrantes y refugiados. De esta manera, ocho Conferencias Episcopales en América del Sur han unido sus fuerzas para encontrar soluciones a la migración masiva de venezolanos que huyen de su país para salvar sus vidas y buscar refugio y vida digna en el extranjero. En Colombia el proyecto está apoyando a migrantes vulnerables en asistencia y acompañamiento psicosocial y espiritual, también contempla acciones de incidencia a partir de la campaña “Compartiendo el Viaje” y el fortalecimiento de redes eclesiales para la respuesta solidaria con la red Clamor Colombia y la red Tamar (red de vida religiosa que trabaja prevención y lucha contra la trata de seres humano). También se desarrollan acciones de encuentro para la reflexión y acción de la crisis humanitaria de los migrantes vulnerables procedentes de Venezuela. Fuente: Pastoral Social

Mié 6 Jun 2018

Diócesis de Cúcuta, un año sirviendo con amor en la Casa de Paso

La Diócesis de Cúcuta, por iniciativa de Monseñor Víctor Manuel Cadavid, inauguró el 5 de junio de 2017, la Casa de Paso ‘Divina Providencia’, con el objetivo de brindar una ayuda a las miles de familias, niños, mujeres embarazadas y migrantes que cruzan a diario la frontera, en búsqueda de alimento, medicinas y productos de primera necesidad. En un terreno de más de 1.300 metros, ubicado en el sector de La Parada, del municipio de Villa del Rosario, junto a la parroquia san Pedro Apóstol, se ha atendido con caridad durante estos 365 días a más de 1.500 migrantes que cada día ingresan a este lugar en el que reciben un plato de comida caliente, café y agua, llegando a entregar a la fecha más de 421.400 almuerzos. La Diócesis de Cúcuta, apoyada en las palabras del Papa Francisco: “No existe una Iglesia sin caridad” y gracias a los movimientos apostólicos (Escuela Bíblica Católica YESHU’A, Apostolado de la Sangre de Jesucristo, Hermandad de Nazarenos, Casa de la Misericordia, Misioneros de Jesús, Comunidad Católica del Amor, entre otros.), religiosos, religiosas, sacerdotes, seminaristas, agentes pastorales, universidades, organizaciones como ADVENIAT y Cáritas Colombia, brinda apoyo constante material, espiritual y pastoral a la población colombo-venezolana. Monseñor Víctor Manuel Ochoa expresa que este es un espacio de caridad al servicio de los más necesitados y que es posible gracias a la solidaridad de los habitantes de la zona de frontera Colombo- Venezolana. El padre José David Caña Pérez, coordinador de la Casa de Paso ‘Divina Providencia’, manifiesta que lo más difícil de este año transcurrido, ha sido la realidad que se vive en La Parada, la violencia que acecha la zona que les quita tranquilidad, pero con la misericordia de Dios, es posible seguir adelante. Durante este año de servicio, da gracias a Dios por vencer los obstáculos y por la ayuda de la Diócesis de Cúcuta a los migrantes, pobres y necesitados. Además del auxilio en alimentos, la Diócesis de Cúcuta adecuó un espacio en la Casa de Paso para la atención médica, donde se proporcionan medicinas a los hermanos venezolanos, que se ven afectados por las difíciles condiciones de salud en su país. En un mensaje la Diócesis de Cúcuta, agradece a todos los que se vinculan a esta obra de caridad, a los fieles, voluntarios, empresas de la ciudad y a todos los que hacen que cada día se viva la solidaridad, la generosidad y el amor en la Casa de Paso ‘Divina Providencia’. Fuente: Oficina de comunicaciones diócesis de Cúcuta

Jue 17 Mayo 2018

En Soacha se analizan las condiciones de acogida de migrantes

El próximo 17 de mayo se dará inicio al ciclo de conversatorios El Acontecer Migratorio Regional: Signo de Vida y Esperanza, liderado por organizaciones de la Iglesia Católica colombiana. Este primer encuentro se llevará a cabo en Soacha, teniendo como principal tema uno de los cuatro verbos planteados en el mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2018 “acoger”. En este sentido, este espacio tiene por objetivo: contribuir a la transformación social de las relaciones entre las comunidades de migrantes y comunidades de origen desde la acogida. El espacio contará con dos paneles: el primero tendrá tres miradas sobre los signos de vida y esperanza en la acogida, a partir de primero una reflexión teológica por parte de Monseñor José Daniel Falla, Obispo de la Diócesis de Soacha; segundo una reflexión institucional por parte de Sonia Vargas representante de la Secretaria de Desarrollo Social– Alcaldía Municipal (Soacha); y tercero una reflexión desde la experiencia migratoria de Norge Benítez, migrante residente del barrio Bosa Carbonell. El segundo panel, se centrará en las acciones e iniciativas de acogida desde las necesidades de protección internacional (solicitantes de asilo, refugio y apatridia) por parte del Programa solicitantes asilo y refugiados de Pastoral Social-ACNUR. También se hará una presentación sobre la ruta de asistencia migratoria a extranjeros por parte de Migración Colombia. Cerrando este espacio se tendrá la presentación de la experiencia de acogida desde entidades eclesiásticas la Parroquia Sagrados Corazones de Jesús y María en Ciudad Verde (Soacha) y la Fundación de Atención al Migrante de la Arquidiocesis de Bogotá. Cuatro conversatorios, cuatro verbos: acoger, proteger, promover e integrar Llamados por el mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2018, la Red Clamor Capítulo Colombia ha planeado como escenario académico el desarrollo de 4 conversatorios y un foro de cierre para el mes de Septiembre, en el marco de la Semana Nacional del Migrante, exhortando a la acción de la Iglesia como respuesta común entorno a cuatro verbos: acoger, proteger, promover e integrar que son los pilares del mensaje del Santo Padre para “responder con generosidad, diligencia, sabiduría y amplitud de miras —cada uno según sus posibilidades— a los numerosos desafíos planteados por las migraciones contemporáneas”. “Considerando el escenario actual, acoger significa, ante todo, ampliar las posibilidades para que los emigrantes y refugiados puedan entrar de modo seguro y legal en los países de destino”. El mensaje también invita a los países a adoptar programas que abran corredores humanitarios para los refugiados más vulnerables, y subraya la importancia de ofrecer a los emigrantes y refugiados un alojamiento adecuado y decoroso. Sobre los programas de acogida expresa que siempre hay que anteponer la seguridad personal a la nacional y el acceso a los servicios básicos. Red CLAMOR Capítulo Colombia por los migrantes La red articula el trabajo pastoral que realizan diversas organizaciones de la Iglesia en Colombia que acogen, protegen, promueven e integran a los migrantes, refugiados, desplazados, víctimas de tráfico de migrantes y víctimas de trata de personas. Hasta ahora la Red está conformada por diferentes entidades de Iglesia como lo son: la Arquidiócesis de Bogotá, las Religiosas Adoratrices, el Servicio Jesuita a Refugiados Colombia, el Servicio Jesuita a Refugiados Latinoamérica y el Caribe, el CELAM, las hermanas Scalabrinianas, Juanistas y Vicentinas, la Fundación de Atención al Migrante, la Corporación Scalabrini, la Pastoral de los Trabajadores y el Secretariado Nacional de Pastoral Social. Este encuentro hace parte de las acciones realizadas en el marco de la campaña mundial compartiendo el viaje.

Lun 7 Mayo 2018

Iglesia trazará agenda sobre migraciones, refugio y trata de personas

Entre el 7 al 11 mayo en la ciudad de en Santiago de Chile, se llevará a cabo la Asamblea Anual de la Red CLAMOR (Red Eclesial Latinoamericana y Caribeña de Migración, Desplazamiento, Refugio y Trata de Personas) en la cual la Iglesia colombiana presentará su trabajo sobre migración, refugio y trata de personas durante el año 2018 y también presentará propuestas para el trabajo articulado en la Red. En representación de la Red Colombia participarán el padre Enán Xavier Humánez, Subdirector del Secretariado Nacional de Pastoral Social y la hermana María Victoria Acevedo, Secretaria Ejecutiva adjunta del Departamento de Justicia y Solidaridad del CELAM. Este espacio, organizado por el Departamento de Justicia y Solidaridad del Consejo Episcopal Latinoamericano CELAM y el Instituto Católico Chileno de Migración (INCAMI), tiene por objetivo con las diversas organizaciones de la Iglesia Católica a nivel Latinoamericano que trabajan en el campo de la movilidad humana, seguir trazando caminos comunes que permitan servir con mayor eficiencia a la causa del Evangelio entre nuestros hermanos y hermanas migrantes, refugiados y víctimas de trata de personas. El Instituto Católico Chileno de Migración, anfitrión de la Asamblea, ha convocado además, a participar en suXX Jornada Migratoriaque tendrá lugar en el marco del encuentro. En respuesta al llamado del Papa Francisco en su reciente mensaje en ocasión de la Jornada Mundial por los Migrantes y Refugiados: “A cada ser humano que se ve obligado a dejar su patria en busca de un futuro mejor, el Señor lo confía al amor maternal de la Iglesia”, la Iglesia Latinoamérica desea servir cada vez mejor a la misión deacoger, proteger, promover e integrara nuestros hermanos y hermanas migrantes, refugiados y víctimas de trata de personas La Red CLAMOR Colombia va conformándose hasta ahora por la Arquidiócesis de Bogotá, las Religiosas Adoratrices, el Servicio Jesuita a Refugiados Colombia, el Servicio Jesuita a Refugiados Latinoamérica y el Caribe, el CELAM, las hermanas Escalabrinianas, Juanistas y Vicentinas, la Fundación de Atención al Migrante, la Pastoral de los Trabajadores y el Secretariado Nacional de Pastoral Social. Red CLAMOR La Redcreada en 2017, articula el trabajo pastoral que realizan diversas organizaciones de la Iglesia Católica en América Latina y el Caribe para, desde la misión evangelizadora de una iglesia en salida, se puedanacoger, proteger, promover e integrarlos migrantes, refugiados, desplazados y victimas de tráfico y trata de personas.